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Una patrulla de la Guardia Civil, junto al cuartel de Maliaño.
La Guardia Civil cierra oficinas de atención al público y refuerza su presencia en las calles

La Guardia Civil cierra oficinas de atención al público y refuerza su presencia en las calles

Reorganiza sus recursos en Cantabria «para estar más cerca del ciudadano, tener más rapidez de actuación y ofrecer un servicio mucho mejor»

José María Gutiérrez

Martes, 17 de enero 2017, 20:52

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La Guardia Civil de Cantabria realizará una reorganización de sus recursos para «conseguir una mayor presencia de patrullas en las calles», lo que obligará al cierre de las oficinas de atención al público de varios cuarteles. «El tener más efectivos en la calle nos permitirá mejorar la prevención de hechos delictivos, captar más información, estar más cerca de los ciudadanos y tener más rapidez de actuación», apuntan desde la Benemérita. En definitiva, «dar un servicio mucho mejor».

La remodelación afectará a las unidades de Seguridad Ciudadana, encargadas de velar por la protección de las personas y sus bienes, e incluirá el cierre de algunas oficinas de atención al público, allí donde se interponen las denuncias. La medida ha despertado la preocupación de diferentes alcaldes, como los de los valles de Buelna, Iguña y Cieza, que la semana pasada mostraron su desacuerdo con la misma, tal y como hoy trasladarán en persona al delegado del Gobierno, Samuel Ruiz, en el encuentro previsto en Santander, donde acudirán decididos a defender este servicio, al menos con cierta periodicidad. «No se debe perder la conexión humana en un momento tan duro como el de un hecho delictivo», defienden. Una preocupación que también han expresado algunos regidores de la zona oriental, como Ampuero, Voto, Guriezo, Liendo y Ramales.

La Guardia Civil subraya al respecto que no se va a cerrar «ningún cuartel», que «no se va a dejar de atender a los ciudadanos» y que «no se va a dejar de prestar ningún servicio», sino que lo que se persigue «es optimizar los recursos». «Es más útil que haya más patrullas en la calle, que pueden dar un servicio mejor y más rápido, a que haya un agente en un cuartel esperando a que pongan una denuncia cuando hay días en que no se produce ninguna».

El Cuerpo recuerda que para dar respuesta a los ciudadanos existe un teléfono (el 062) en servicio durante todo el día y que en aquellas localidades donde se tiene previsto cerrar oficinas de atención al público, se ampliará a 24 horas el servicio en otros cuarteles «cercanos», los situados en los mayores núcleos de población, además de que la mayor presencia en las calles «posibilitará una atención más cercana».

El número, en estudio

Las fuentes de la Guardia Civil de Cantabria consultadas por este periódico no supieron cifrar ni el número de oficinas que se cerrarán ni los cuarteles que asumirán 24 horas de apertura a partir de entonces, ya que «está en fase de estudio». Lo que sí se empeñan en defender es que «ni se van a cerrar acuartelamientos ni se va a hacer una reestructuración general; lo que se va a hacer es optimizar los recursos que tenemos para dar un mejor servicio al ciudadano con el objetivo final de aportarle una mayor seguridad».

Los alcaldes de los municipios de los valles de Buelna, Iguña y Cieza, que se ven afectados por el cierre de los centros de atención de Los Corrales y Molledo, son los que más han hecho visible su oposición a la medida porque, a su juicio, lo que hace «es dificultar, especialmente a la gente mayor, la que vive en zonas rurales y la que no tienen la opción desplazarse, la posibilidad de denunciar hechos delictivos que puedan sufrir, más en un tiempo de incremento de los mismos». Se refieren a los robos en viviendas, que en 2016 se dispararon en Cantabria hasta alcanzar cifras récord. La Guardia Civil considera que la presencia de más patrullas en la calle no sólo acerca la atención al ciudadano, sino que «ayuda a mejorar la prevención de delitos».

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