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Beso en la nariz de Diego a Lola, su gesto de cariño y amor.

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Beso en la nariz de Diego a Lola, su gesto de cariño y amor. MEDIASET

El decepcionante e 'interruptus' reencuentro del cántabro y su novia en 'La Isla de las Tentaciones'

CANTABRIA EN TV ·

Queda pendiente resolver la 'hoguera de la confrontación' que Diego Pérez Asón pidió para arreglar sus problemas y que podría poner fin a su historia de amor

Sergio Sainz

Santander

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Viernes, 26 de febrero 2021

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Ya hemos perdido la cuenta de los giros de tuerca que lleva el noviazgo o todo lo contrario de Diego Pérez Asón y Lola Mencía en 'La Isla de las Tentaciones'. El cántabro, después de poder observar en modo 'Gran Hermano' las confesiones de arrepentimiento de su chica la semana pasada se lanzó a pedir una 'hoguera de la confrontación', un ritual definitivo en el programa de Telecinco. Sin embargo, los más de 3.000.000 millones de espectadores 'enganchados' a la 'telenovela' se quedaron con las ganas de saber si la pareja resolvía o no sus diferencias. Vasile y los suyos nos dejaron con el 'hype' en todo lo alto, para regresar a Telecinco el próximo jueves y ver si nuestro abogado santanderino pasa a ser soltero de nuevo.

Lola y Lucía hablan de 'su noche' con Carlos.
Lola y Lucía hablan de 'su noche' con Carlos. MEDIASET

El programa comenzaba con una historia para no dormir, como así fue, de su chica. Como ya se adelantó en el episodio anterior la leonesa compartió cama con su amiga Lucía y algo más con Carlos. La joven en medio del 'sándwich' estaba de lo más indignada. «Que Carlos se haya pegado un magreo con mi amiga, para mí significa que me ha estado tomando el pelo», aseguraba la andaluza. «¿Qué hago yo ahí? ¿Pinto algo?», se preguntaba. «Surgió en un momento determinado», explicaba él. Algo que no convencía a la tercera en discordia. Si, en alusión a Lola, «tan amiga que es mía, tanto que llora conmigo y tanto que todo… me lo podría haber dicho». Ante las cámaras rajaba lo más grande. «Se han dado a la pasión delante de mí, aunque no se sabe bien lo que ha pasado ni lo que ha dejado de pasar», confesaba. Aunque su sensación era de que se habían reído de ella.

Diego entra, como cada mañana, en su villa.
Diego entra, como cada mañana, en su villa. MEDIASET

En su villa, Diego mostraba sus dudas. «Ahora mismo tengo un buen cacao en la cabeza. A partir de ahora no tengo claro lo que va a pasar, también depende un poco de lo que Lola siga haciendo allí. Estaría muy bien tener una charla y ver qué final podría tener esto», comentaba con sus compañeros. El cántabro mostraba su postura tajante, «prefiero que mi novia se líe con uno y luego pida perdón, aunque no la perdone, a que diga que se ha dado cuenta de que no está enamorada». Una sesión de entrenamiento a base de saltos de cuerda le valía para quemar calorías y evadirse de su momento. En cambio, Lola trataba de escurrir el bulto de su episodio carnal. «Te estoy hablando de Diego…», exponía como argumento para negar la mayor. Lucía no lo veía claro, «cada uno cuenta una cosa. Te creo a ti antes que a él, pero entonces, ten cuidado. Ha dicho que os habéis besado...», advertía.

«Prefiero que mi novia se líe con uno y luego pida perdón, aunque no la perdone, a que diga que se ha dado cuenta de que no está enamorada»

DIEGO

En declaraciones dudaba de la leonesa, «no la pillo bien por dónde va. No la creo mucho lo que me dice, me esconde cosas», aseguraba. Aunque a ella le decía que «si es mentira el que tiene que hacer el ridículo es él». La versión del chico no dejaba lugar a dudas. «Lola no quería que se supiera el magreo que tuvimos en la cama, aparte de que tiene pareja no quería cuchicheos en la casa», dijo. En sus cruces por la villa la auxiliar de veterinaria dejaba claro que «no había hecho nada». La cara B, lo que decía el muchacho. «Sé lo que he hecho, si ella quiere decir que es mentira, pues está en su derecho. Necesitaba hablarlo con ella y ella conmigo y solucionar el problema». Carlos lo resumía fácil, «se desmadró».

Diego, en momento relax con Jesús.
Diego, en momento relax con Jesús. MEDIASET

«¿Tú crees que Lola ha dejado de hablar en seco con el italiano?», preguntaba Jesús a Diego. «Quiero creer que sí. Hablar, hablarán, se le acercará…», decía. Con una mala imitación de acento italiano bromeaba diciendo «yo puedo transformar esas lágrimas en sonrisas». Eso sí, cuando tenía que ponerse firme lo hacía. «Prefiero ver a Lola destrozada llorando que sigue pasando de todo, teniendo acercamientos que no me gustan con Simone», comentaba. En la otra casa Carlos quería jugar y, supuestamente, aclarar el 'episodio'. «Vamos a liarla», decía. «Somos una familia, tendríamos que hablar las cosas y no cuchichear entre grupitos», aseguraba mientras todos chapoteaban en la piscina. Ante las cámaras Lola explicaba sus sensaciones, «no he admitido la verdad de lo que pasó con Carlos bajo las sábanas. Soy una persona que me cuesta mucho enfrentar los problemas. Me avergüenza decir que yo hago algo sexual. Todo el mundo cuchicheaba, hacía corrillo, me quería meter debajo de la tierra y no salir nunca».

«No he admitido la verdad de lo que pasó con Carlos bajo las sábanas. Soy una persona que me cuesta mucho enfrentar los problemas»

LOLA

Aunque hubo momento aclaración. «Va a haber explicaciones, que no hay que darlas, pero como no quiero comentarios ni opiniones. Hubo un poco de mamoneo y nada más. La perjudicada acabo siendo yo porque soy la que tengo pareja y a la que tengo que darle explicaciones», expuso al grupo. Entonces Simone despertaba para soltar un 'zasca', «me equivoqué totalmente de cómo es Lola… Es una chica falsa, que no quiero nunca a mi lado», dijo el italiano. La chica quería parar la bola, «no quiero mal rollo, me lo estoy pasando aquí muy bien. Estoy bien con todo el mundo».

La 'hoguera' de los chicos.
La 'hoguera' de los chicos. MEDIASET

La dinámica del programa imponía una nueva noche de 'hogueras'. En la previa, Diego comentaba sentirse «más tranquilo que nunca porque lo que espero ver casi al cien por cien es a una Lola arrepentida y hablando de mí». En el coche de camino, compartía su pronóstico, «espero ver una continuidad» de lo que captó 'espiando'. Se la imaginaba «queriendo hablar conmigo. Espero no encontrarme imágenes que no me gusten», decía. Al llegar al set, Sandra Barneda situaba a los concursantes. «Hemos llegado al ecuador de esta dura prueba de amor y los sentimientos son más intensos. Habéis luchado contra vuestros mayores miedos», aseguraba. El santanderino decía haber «estado dándole muchas vueltas a la cabeza. Viendo las imágenes que vi de ella arrepentida, llorando, que quiere verme, que se da cuenta que quizá ella pasó el límite que habíamos marcado antes de entrar aquí. Ahora me replanteo todo un poco», compartía. «Es la imagen que quería ver de Lola, no las imágenes que había visto hasta ahora. Me alegra mucho que ella esté pensando en mí y que quiera arreglar las cosas, porque es obvio que está mal», añadía.

«Me alegra mucho que ella esté pensando en mí y que quiera arreglar las cosas, porque es obvio que está mal»

DIEGO

Repetía a la presentadora que esperaba «ver a Lola en la misma actitud que ayer», refiriéndose al privilegio de las cámaras. «Confío y creo en ver buenas imágenes», remataba. Al enfrentarse al Ipad mini, apenas se inmutó. «¡Qué pesado el italiano!», dijo al ver cómo la leonesa se quejaba de su intensidad. «El que me llamaba manipulador a mí», exponía el cántabro. «Las imágenes empiezan bien, me gustan. Está como cansada del chaval. En realidad, ha sido una locura que ha hecho de primeras», decía.

Diego comenta las imágenes.
Diego comenta las imágenes. MEDIASET

James Lover era sincero, «más fuerte lo que he hecho yo, que yo he llegado a liarme con una chica. Empezó con un 'feeling', que para lo que habíamos hablado antes de entrar aquí se iba de madre. Lo que la ha pasado es que ha desconectado del mundo exterior. Está viviendo esta experiencia, se ha olvidado de mí, de todo… Me dolió», confesaba. «Viendo estas imágenes, sumadas a las de ayer, me tranquilizo y pienso fríamente, yo también he cometido un error, que no me arrepiento de él. La conclusión a la que llego es que ahora tengo como un debate interno de si perdonar, no perdonar», argumentaba. «La veo afectada y eso me gusta. Ayer, de hecho, me emocioné cuando vi las imágenes de ella hablando de mí. En realidad, me gusta lo que he visto», repetía. El programa le mostraba cómo declaraba su amor, «me siguen encantando estás imágenes», continuaba. «Ayer las vi y me emocioné, me cuesta más emocionarme. Venía muy hecho a ver esto y traía algo pensado… Yo no la puedo ver así. No quiero seguir viendo imágenes de Lola destrozada, porque me duelen mucho», aseguraba.

«No quiero seguir viendo imágenes de Lola destrozada, porque me duelen mucho»

DIEGO

«Lo que quiero hacer es ir al grano, si se puede hablar con ella, quiero…», lanzaba. «Diego, ¿me estás pidiendo una 'hoguera de confrontación'?», preguntaba Barneda. «Sí, segurísimo», contestaba él. «Lo necesito yo, te diría que ella más. Me conozco a mí mismo, queda la mitad, voy a estar mal, dándole vueltas a la cabeza, pero lo aguanto y tiro hacia adelante. Ella no, es más floja y si sigue así va abandonar o va a estar hundida», pronosticaba. «Es una chica que quiero, no quiero ver que esté mal, así que lo mejor para los dos es vernos y hablar las cosas», sentenciaba. La presentadora le comentó el protocolo, «se lo voy a trasladar a Lola, puede aceptar o no». Y, de paso, repetía las consecuencias de la propia petición. «En caso de que no acepte, deberás abandonar solo y sin posibilidad de hablar con ella. Si se presenta, aclarar todo lo que consideréis oportuno y decidir si abandonáis solos, acompañados con una nueva pareja o volvéis cada uno a la villa».

Los compañeros apoyan al cántabro.
Los compañeros apoyan al cántabro. MEDIASET

Él veía claro lo que ocurriría. «La va a aceptar, no tengo ninguna duda. Lo está pidiendo a gritos que quiere estar y hablar conmigo. Si no la acepta 'c'est fini', me voy porque ya está claro lo que hay», advertía. El deportista comentaba que «preparado siempre estoy. Obviamente le voy a estar dando vueltas a la cabeza de qué va a pasar o no. Será ella libremente la que decidirá», añadía. «Diego, no hay más imágenes para ti porque así lo has decidido tú», aseguraba Barneda. El joven confiaba en haber tomado la decisión correcta, «a ver si podemos arreglar esto, a qué conclusiones llegamos y es una buena oportunidad para hablar las cosas».

«A ver si podemos arreglar esto, a qué conclusiones llegamos y es una buena oportunidad para hablar las cosas»

DIEGO

Su chica evidenciaba dudas, «no sé qué pasará. Me da muchísimo miedo ver a Diego en la misma actitud de rencor, hablando mal de mí, sobre todo, me daría muchísima pena. No me gustaría ver esa imagen», decía mientras se vestía para acudir a la 'hoguera'. En el coche grupal se mostraba «a la expectativa, a ver si veo un poco de cambio en Diego». Ya sentada para afrontar el ritual reconocía no vivir «mi mejor día. Tengo un caos en mi cabeza maravilloso». Aclaraba sus decisiones, «he decidido poner punto y final a lo que estaba haciendo con Simone para que Diego se dé cuenta que de que en verdad yo quiero estar con él».

Lola se emociona por si ha fallado a Lucía.
Lola se emociona por si ha fallado a Lucía. MEDIASET

Además de sus 'dramas' amorosos se unía el que compartía con su amiga Lucía, quien reconocía no encontrarse bien. Una Lola emocionada recordaba que habían pasado juntas toda esta experiencia. «La quiero mucho, a veces, quizás fallo. Aquí me tienes para siempre», decía, mientras evidenciaba su mal momento. «Contigo me puedo desahogar», agradecía su compañera. «No sé qué me está pasando aquí, no me entiendo ni yo. No sé si me estoy dejando llevar por mis sentimientos, por la situación. Cometo errores, yo he perdonado muchísimos y me gustaría que cuando cometo alguno me perdonaran también», exponía la leonesa al tiempo que se quejaba de su propia actitud «no quiero llorar, todo el día llorando». Sandra mostró imágenes de Diego y Carla, en la que el cántabro se mostraba locuaz. «Si mi novia tiene 'feeling' con el chaval, no respeta cosas que yo he respetado… Yo me suelto y si me quiero liar con Carla, me lío», aseguraba. Tanto que así lo repetía, «creo que es la hora de besarte», advertía a la catalana. «Te ha quedado muy romántico», aseguraba ella.

«A mí me gusta proteger mucho a la chica con la que estoy. Mi chica para mí es intocable»

DIEGO

Una llorosa Lola valoraba las imágenes. «Le he visto con Carla muy bien, la verdad. Al principio es muy romántico, cariñoso… Conmigo lo era también. Se abrazan y parece que se gustan de verdad. Es la consecuencia de lo que he hecho, lo asumo», exponía. «¿Crees que Diego está sintiendo algo por Carla?», preguntaba entonces Sandra Barneda. «No sé, él dice que a veces se reprime de besarla porque me va a hacer daño. Eso significa que algo me quiere todavía», comentaba. Aunque no podía evitar un análisis realista, «les veo bien, no sé si le está gustando. No voy a mentir», añadía. En otras imágenes veía el comentado juego del hielo de Diego y Jennifer. «No quiero quedar tampoco de celosa, pero me ha molestado. Soy un poco impulsiva», aseguraba Carla. Y era directa con el cántabro, «es que quiero que sólo te beses conmigo». «Los besos en la frente son de protección», identificaba la 'influencer'. «A mí me gusta proteger mucho a la chica con la que estoy. Mi chica para mí es intocable», explicaba Diego. «¿Si no hay más vetos?», preguntaba la rubísima al abogado. «Tendré las citas contigo», aclaraba él.

Beso de Diego a Carla, su 'tentadora'.
Beso de Diego a Carla, su 'tentadora'. MEDIASET

Lola asumía el golpe. «Está siendo cariñoso como es él. No quería llorar, pero es que el beso en la frente es el que él me daba. Sólo me falta verle dándole el beso en la nariz, como hace conmigo», contaba. La leonesa reflexionaba, «me he dado cuenta de que le quería. Es verdad que, al principio, no he valorado lo que yo necesitaba, pero luego he valorado de él lo que me daba y no lo veía, como darme esos besos». Barneda quería averiguar mejor qué significa ese beso en la frente, «mucho amor, al menos hacia mí, era una muestra de cariño muy importante en nuestra relación». Con el ánimo muy bajo confesaba a las cámaras que «ojalá hubiera algo que arreglara nuestra relación. Echo de menos estar en casa con él, con nuestro perro, mi vida con él... Me siento una estúpida».

«Ojalá hubiera algo que arreglara nuestra relación. Echo de menos estar en casa con él, con nuestro perro, mi vida con él...»

LOLA

Al volver a sus respectivas villas, Diego contaba que había visto «las imágenes que esperaba ver. La he visto todo el tiempo mal, afectada, que quiere estar conmigo y verme. He pedido la 'hoguera de confrontación' para hablar las cosas y tranquilizarla, tampoco puede estar ella todo el rato así», aseguraba. Por su parte, Carla se mostraba intranquila, «me preocupa que pueda cambiar la forma de estar conmigo», decía. En cambio Lola se mostraba abatida, «no tengo a nadie que me ayude. No me he visto tan sola nunca. El único que ha venido a preguntarme ha sido Rubén, ha intentado levantarme», exponía. En 'Villa Playa', Diego compartía charla con Jesús. «Hasta que no llegue mañana voy a estar rayado a tope», compartía. «Como no vaya Lola», dejaba en el aire su compañero. «Me daría una puñalada trapera. Estar pidiendo verme, si te lo concedo… Que luego no vengas, ahí ya sí que se acabó», aclaraba el cántabro. «Necesito ver a Lola porque hay muchas cosas que tengo en mi cabeza que necesito que aclare y me explique. A ver qué conclusiones sacamos tanto ella, como yo», añadía.

Diego explica qué espera de Lola.
Diego explica qué espera de Lola. MEDIASET

Rubén, el mítico 'tentador' de la primera edición, tenía consejos para la leonesa, «Lola tú aquí necesitas disfrutar». Ella lo veía todo negro, «porque la gente aquí ya no me traga, yo ya no puedo disfrutar bien». «¿Quién?», cuestionaba él. «Todo el mundo», contestaba la joven. Y seguía con su discurso victimista. «Me veía sola. Carlos estaba muy rayado por el tema de las sábanas, mis amigas tampoco confiaban en mí, pero las cosas han surgido así», comentaba. El joven 'reincidente' en República Dominicana asumía que «se te ha ido de las manos». «Me siento súper estafada por ella», esgrimía Lucia. «A mí me trató como si fuera su novio de toda la vida, Carlos… Agarrándome las manos, haciéndome caricias», explicaba Carlos.

«Me sentía que era falsa, mala amiga y persona, todo lo contrario a lo que yo soy…»

LOLA

Y seguía dando detalles, como la advertencia de Lola, «de esto nada a nadie» o lo mucho que duró su tonteó, «toda la noche, yo no he dormido nada». Lucía insistía en su decepción, «me molesta que me ha estado mintiendo todo el día en mi cara. Considero que me ha traicionado un poco. Voy a seguir distanciada», aclaraba. Por su parte, la auxiliar de veterinaria mostraba su debilidad. «No sé gestionar la situación. ¿Nadie ha roto un plato o se ha equivocado en su vida?», decía. Y ante las cámaras se desahogaba, «me sentía que era falsa, mala amiga y persona, todo lo contrario a lo que yo soy… Me sentí fatal». Por suerte, «Rubén me hizo desconectar del tema Carlos, pensé que la noche iba a ser peor y él me ayudó».

Lola recibe el apoyo y cariño de Rubén.
Lola recibe el apoyo y cariño de Rubén. MEDIASET

Antes de enfrentarse al gran momento, Diego confesaba a sus compañeros que «me da miedo, la verdad». «Si no va y te tienes que largar tú de aquí, sería una pedazo de guarrería por su parte», aseguraba Manuel. «Entonces ya que se despida de todo», repetía el cántabro. «Nada más verla vas a sentir lo que tienes que hacer. Ten en cuenta que significa perdonar y, poco a poco, olvidar… Si te perdona y no olvidas, entras en una relación tóxica, como la que yo estaba, que todas las discusiones terminan en lo mismo», aconsejaba el andaluz, entregado a los encantos de Fiama. «Soy una persona muy fría, quiero ver lo que me dice, cómo está… Analizar y ya después podré tomar una decisión», zanjaba.

«Soy una persona muy fría, quiero ver lo que me dice, cómo está… Analizar y ya después podré tomar una decisión»

DIEGO

En 'Villa Montaña' las chicas recibían la visita de Sandra Barneda. Ellas hablaban del mal rollo en la casa, más con el tema Lola. La presentadora quiso enterarse. «No paro de tomar malas decisiones. Siento que me he perdido. No sé qué narices estoy haciendo con mi vida. No sé porque no pienso bien las cosas, no me controlo. No sé la razón de mis actos. No acabo de saber tomar las decisiones por mí misma y hago lo primero que se me pasa por la cabeza», explicó la joven. Entonces tuvo que recapitular y volver al momento cama. «Carlos durmió con las dos. Fue un cachondeo, como un amigo que viene a dormir de risas. Me dejé llevar, hicimos cosas que no me siento orgullosa de hacerlas aquí. Me voy a morir de vergüenza y quiero que me trague la tierra cada vez que lo pienso», contaba a la presentadora.

Sandra visita a las chicas para dar una noticia.
Sandra visita a las chicas para dar una noticia. MEDIASET

«Tengo que afrontar mi realidad», añadía, mientras no entraba en detalles de sus juegos más que había supuesto «traspasar un límite». «Esto no lo he hecho en mi vida», repetía llorosa. Entonces Lucía intervino y dijo que «me estaba mintiendo», al explicar su sensación 'en medio' de la situación. Barneda quiso saber si Lola sentía algo por Carlos, «hay atracción, le veo como un amigo que me atrae». Aunque seguía fustigándose, «me arrepiento por hacerlo aquí, de la manera en que lo hice, por Lucía, por Diego…». «Diego cuando haya visto las imágenes no entenderá nada de lo que estoy haciendo, sobre todo, le he dañado el orgullo de hombre. Sé que no me va a perdonar eso, nunca», añadía. La leonesa se temía lo peor. «Si antes lo tenía crudo, ahora… Mi relación está acabadísima», aseguraba. Incluso se proyectaba después e imaginaba lo «difícil de llegar a mi casa y tener que irme de ella. Despedirme de mi perro, se acabó ya… Mi mayor miedo es enfrentarme a la realidad. Diego es el que ha hecho que pase todo esto porque se ha olvidado de mí», lamentaba.

«Diego cuando haya visto las imágenes no entenderá nada de lo que estoy haciendo, sobre todo, le he dañado el orgullo de hombre»

LOLA

Entonces la maestra de ceremonias tomaba la palabra, «la 'hoguera' de los chicos fue complicada, especialmente para algunos de ellos. ¿Quién puede estar mal?», preguntaba. «Si Diego ha visto las imágenes, me lo pudo imaginar cómo estará», dijo Lola. «Tengo un mensaje de uno de vuestros novios para vosotras… Es para… Lola», desveló la comunicadora. La reacción de la joven fue llorar desconsolada. «Estoy bloqueada. Es muy duro para mí todo esto. Le quiero muchísimo. No le quiero hacer daño, decepcionarle, pero es ya tarde para decir eso», explicaba. «Me siento hipócrita si Diego que quiero que me perdone. Yo no perdonaría, no le puedo pedir eso. Quizá sienta asco hacia mí, siempre va a tener eso en su cabeza. No va a haber otra opción», afirmaba. Sandra le aclaraba que había pedido la 'hoguera de confrontación'. «Quiere explicaciones», dijo, para pasar después a relatar las consecuencias de esa 'prueba' de amor.

Lola llora al contar su confusión.
Lola llora al contar su confusión. MEDIASET

«Tengo mucho miedo, le he fallado como novia. No sé qué querrá decirme, si querrá dejarlo. Si quiere arreglarlo, perdonarme», explicaba. Ella pensaba que él estaría «muy dolido y confundido». «No sé si ir o no ir, enfrentarme a la realidad, huir...», compartía. Y cuando se lo contaba a sus compañeras sentía pena por la situación y por él, «pobrecito». «Si voy me puedo enfrentar a un Diego vengativo. Si no voy demuestro que no sé afrontar los problemas», contaba ante las cámaras dudosa. Lejos de allí, Diego seguía dándole vueltas. «Si estando mal y yo pido la 'hoguera' por ella y decide no ir pues, sinceramente, es una sinvergüenza», comentaba. «La suerte está echada. Voy a ir allí preparado para todo lo que pueda pasar. ¡Al toro!», decía a sus compañeros. Eso sí, en su reflexión, el cántabro mostraba su «miedo a que haya una discusión muy fuerte. Lola y yo somos muy calientes los dos y no me gustaría acabar a gritos y discutiendo».

«Si estando mal y yo pido la 'hoguera' por ella y decide no ir pues, sinceramente, es una sinvergüenza»

DIEGO

En la otra casa, Lola y Carlos volvían a tener un momento a solas. «Eres una niña que yo siempre he estado bien contigo. Te he visto con una amiga porque estabas con un chaval...», coqueteaba de frente. «Soy un bocazas, no le tenía que haber dicho nada a nadie», añadía. Las compañeras no entendían esa nueva muestra de conexión entre ambos. Lucía era clara, «no sabría decir cómo está ahora mismo mi relación con Lola, porque lo mismo me pega una puñalada trapera que a los cinco minutos me dice perdóname, yo no quería hacerlo. Hasta que no vea algo que me haga volver confiar». Carlos recordaba su noche loca, «pasó porque estábamos tan a gusto.... Esta noche lo haría otra vez», aseguraba. «No quería perder a una amiga que tenía aquí, había empezado a surgir una 'cosita' hablamos ella y yo y, la verdad, que lo hemos solucionado todo», decía a cámaras.

Diego se prepara para acudir a la 'hoguera'.
Diego se prepara para acudir a la 'hoguera'. MEDIASET

Diego se preparó con la cabeza en ebullición. «Estoy algo nervioso. Espero que Lola se presente y me explique las cosas que ha hecho y, sobre todo, aclarar las cosas que ha dicho sobre mí». Su look, más formal, fue muy aplaudido. «¡Qué guapo!», le dijeron en la casa. «A ver si sirve de algo», contestó él. Se mostraba «tenso, pero preparado. Si no va, me piro para mi casa y, obviamente, la relación termina», compartía. Aunque esperaba que la historia fuera otra y «volver con buenas noticias». Así, se iba de la villa entre aplausos. Mientras tanto Carla pasaba por lo 'suyo', «se me pasaban 20.000 cosas por la cabeza. Si Diego decide abandonar la villa, yo probablemente también, porque no voy a tener aquí mi lugar ni voy a estar a gusto», decía la catalana.

«Yo le quiero. Si estoy diciendo que estoy enamorada y luego hago lo que hago…»

LOLA

La leonesa casi lanza una moneda para tomar su decisión. «Estoy nerviosa. No sé si quiero ir a la 'hoguera' y enfrentarme a todo lo que me va a decir. Creo que me va a dejar si voy», decía. «Yo le quiero. Si estoy diciendo que estoy enamorada y luego hago lo que hago… Digo, pues igual el amor es costumbre. Tengo dudas, hace dos días estaba convencida de que quería arreglarlo. No sé si lo quiero arreglar por la costumbre de mi casa, de mi vida, por Horus, el perro, o porque, de verdad, estoy enamorada», reflexionaba. «Mis compañeras me aconsejan que vaya, que me enfrente, tengo un poco de miedo porque es muy duro enfrentarse a lo que va a haber ahí», contaba.

El cántabro espera si llega o no Lola.
El cántabro espera si llega o no Lola. MEDIASET

Cayó la noche y llegó el fuego. En el coche, previo a la 'hoguera', Diego admitía sentir «muchos nervios y tensión. No sé si Lola va a venir o no. Al final me doy cuenta de que estar aquí parece el combate más importante de mi vida y el más difícil». Al llegar, Sandra le recordaba que estaba ante «una situación extrema. Tu aventura aquí es un mar de dudas. Necesitas pedirle explicaciones a Lola». Él se confesaba «muy nervioso, con cansancio. No he pegado mucho ojo, dándole vueltas a todo lo que podía pasar hoy aquí. Si va a venir o no, las consecuencias que eso trae», aseguraba. «Pienso mucho en el perro, que es como si fuese un hijo, cada vez nos enfadamos se le nota muy triste, que salgamos de aquí separados pues también él lo va a notar», añadía.

«No he pegado mucho ojo, dándole vueltas a todo lo que podía pasar hoy aquí. Si va a venir o no»

DIEGO

La presentadora le preguntaba sus expectativas. Él esperaba «aclarar ciertas cosas. Imagino que si ella acude aquí yo también tengo que dar mis explicaciones, porque también he hecho cosas la habrán dolido, pero, sobre todo, aclarar las cosas que no salen de mi cabeza cuando me voy a dormir en la villa». Concretó, «las imágenes con Simone en la piscina o diciéndole cosas que, para mi punto de vista, son algo fuertes. Lo mismo que las conversaciones que tiene con las chicas en privado en la habitación hablando sobre él. Que me explique eso, ver si realmente la Lola real era la que he visto tres años y medio o la que está aquí ahora». Barneda insistió en la mecánica, primero Lola tenía que aceptar. En caso de no acudir, abandonaría solo y sin poder hablar con ella. Si ella aceptaba, tendrían que tomar decisión: dejar el programa solos, juntos, en compañía de un nuevo amor continuar experiencia en la villa.

Diego, muy atento, sigue las instrucciones de Sandra Barneda.
Diego, muy atento, sigue las instrucciones de Sandra Barneda. MEDIASET

«¿Estás preparado?», le preguntaba. «Si te digo que sí te miento. Ahora mismo no, pero lo que tenga que ser será», respondía sincero. Tras unos segundos de tensión dramática-musical-fogosa, aparecía Lola vestida de blanco. ¿Casualidad o mensaje a la inversa? En cuanto Diego la vio de levantó y se abrazó a ella. «¿Estás bien?», preguntó él, al tiempo que lanzó un «te quiero». «¿Me quieres?», cuestionaba Lola. «Sí», insistió Diego. Algo que se llegó a repetir. «Esto va a ser difícil», antepuso la leonesa. «Tranquila», repetía él. «Lo siento. Por lo mío de las imágenes y eso», dijo ella. Él la besó entonces en la nariz. Ella seguía cuestionando si la quería, «de verdad, te lo juro», le respondía Diego.

«Se me hace raro hasta mirarte. Es una situación extraña»

dIEGO

«Lo que tenga que ser, será, como siempre digo yo», añadió el cántabro. Ya sentados, ella mostraba sus miedos iniciales, «pensé que no me ibas a abrazar». «¿Cómo no te iba a abrazar? Yo también la he 'cagado'», decía el abogado. Es más, mostró su duda 'razonable', «pensé que igual ni venías». «¿Cómo no voy a venir?», devolvió ella. Su diálogo fue poco aclarador. «No me esperaba…», decía la leonesa sin concretar. «Ni yo, cuando vi la primera 'hoguera', en realidad flipé, no entendía nada. Se me hace raro hasta mirarte. Es una situación extraña», comentaba el santanderino.

Reencuentro de la pareja en la 'hoguera'.
Reencuentro de la pareja en la 'hoguera'. MEDIASET

«Vamos a ver qué pasa», aseguraba él más calmado. La leonesa se definía «como un flan. Es muy raro y muy duro». A las preguntas de Sandra sobre sus sentimientos, dijo que en ese encuentro había entendido «que le quiero. Me ha sorprendido que me abrazado y me ha cuidado muy bien, pensé que no me iba a mirar. Sé que es muy orgulloso». En cambio él, aseguraba que el momento era muy «difícil, no me sale ni mirarla a la cara, pero no porque no la quiera. Es una situación muy agresiva. La quiero de verdad. Después de cosas que he visto, que me salga abrazarte es porque te quiero». Ella, en un mar lágrimas, le confesaba que «me duele pensar que se puede romper la relación. He pensado muchísimo en Horus». «Y yo», añadía él. «Pero no sé qué me ha pasado», explicaba la leonesa.

Lola sufre porque tiene que ser sincera.
Lola sufre porque tiene que ser sincera. MEDIASET

El cántabro explicó el sentido de la 'hoguera' «porque las últimas imágenes que vi de ti eran arrepentida y eso me tocó el corazón. Quiero que estés tranquila. Por primera vez quizá en mi vida, admitir también mis errores y cosas que he hecho mal yo», dijo. Entonces ella abrió un nuevo melón, «he hecho cosas peores». «¿Cómo peores?», preguntaba Diego. «Pensé que lo habías visto», aseguraba ella. «¿Pero un beso?», preguntaba el abogado. Entonces ella negó con la cabeza y la cara de él se volvió un poema sin título. Fin. En todo lo alto.

«Por fin en mi vida me quito mi coraza y muestro mis sentimientos a los demás. La verdad es que es una sensación increíble»

DIEGO

El avance apenas nos da pistas, más allá de las pregunta directa de Sandra Barneda a nuestro James Lover, quien deberá responder a su futuro en la isla, según las normas. ¿Cuántos capítulos nos quedan? Cariño no le va a faltar. Ya en redes está agradeciendo tantos mensajes «de apoyo». «Estoy alucinando con el cariño que me estáis dando. Para mí esto es muy importante, porque por fin en mi vida me quito mi coraza y muestro mis sentimientos a los demás. La verdad es que es una sensación increíble y ahora pienso todas las cosas y personas que he perdido todos estos años por ser tan orgulloso y tan frío…», escribía en Instagram. Puede que vuelva soltero de la isla, pero volverá con aprendizaje emocional en la maleta.

La pareja no ha resuelto toda su historia.
La pareja no ha resuelto toda su historia. MEDIASET

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