Cantabria ensaya con 3.600 familias un plan para prevenir la desprotección infantil

Ayudar a las familias en la crianza de sus hijos y detectar situaciones de desprotección infantil en los hogares. Un doble objetivo con el que nace el Plan Integral a las Familias del Gobierno de Cantabria, que empezará a aplicarse en 3.617 hogares repartidos por nueve municipios. Nace con fuerza porque en dos años quiere entrar «en todas» las casas de la región.

Un total de 7.883 niños y adolescentes de cero a 17 años (el 8,5% del total de este tramo de población) se verán beneficiados de la prueba piloto que rescata del fondo del armario el delicado asunto de la protección a la infancia y la adolescencia.

A finales de 2010 se aprobó una Ley en este sentido. Un documento para fomentar programas educativos, de responsabilidad parental, para evitar todo tipo de violencia en el ámbito familiar... pero que en Cantabria «nadie ha visto nada de eso aún». Al menos eso es lo que dice la vicepresidenta regional, Eva Díaz Tezanos, encargada ahora de retomar este asunto.

Su plan, elegir un programa con dos recomendaciones europeas. El Consejo de Europa sobre políticas de apoyo a la infancia y la Comisión Europea para invertir en infancia avalan el Plan Integral a las Familias de Cantabria porque «rompe la cadena de las desventajas».

¿Y cómo va a alcanzar esos objetivos? La macroconsejería de Tezanos ha trazado una hoja de ruta que comenzará con la constitución de unas mesas de coordinación en la que estén presentes agentes y representantes de colegios, institutos, ludotecas, bibliotecas y escuelas deportivas municipales, además de trabajadores sociales y educadores.

Su misión será desarrollar medidas concretas que se impulsarán luego en los ayuntamientos (al principio solo en los nueve municipios elegidos). Los técnicos municipales serán los encargados de trabajar la prevención con las familias. Junto a los del Instituto Cántabro de Servicios Sociales, «ya se está formando» en la materia de la misma manera que lo harán los profesionales que tiene previsto contratar el Gobierno para que el proyecto logre «romper la cadena de las desventajas».

Todos ellos tendrán la responsabilidad de «diseñar medidas preventivas y actuaciones específicas para ayudar a las familias en la crianza de los hijos, con apoyo especializado y técnico, detectando también, por ejemplo, situaciones de desprotección infantil».

Precedentes

Con éste ya es el cuarto intento en la historia de Cantabria de poner en marcha programas de prevención sobre infancia y adolescencia. En 2005 se realizó la primera evaluación sobre la materia. Dos años más tarde, en 2007 comenzó un plan de dos años. Y en 2010 se aprobó la Ley de Derechos y Protección de la Infancia y Adolescencia. Ahora, en 2016, el nuevo intento lleva el apellido de Plan Integral, pero sigue acompañado de las mismas dudas de siempre. ¿Cómo se ayuda a las familias a criar a sus hijos? ¿Cuál es la fórmula para prevenir la desprotección infantil en los hogares? Serán preguntas que deberán aclarar quienes se ocupen de lograr el «buen trato a la infancia» que persigue el nuevo plan del Gobierno.