El autor confeso del crimen de León amenazó con su navaja a otros dos jóvenes

Uno de esos dos jóvenes declaró ante la Policía Nacional que sobre las tres de la madrugada de ese día se personó en el parque de los merenderos del barrio de La Palomera, junto a la Universidad, acompañado de dos amigos. Allí se encontraron con una chica que estaba junto a otros cinco chicos, «a los que no conocía de nada». Mientras se quedó hablando con dos de esos cinco chicos, observó como la joven abandonaba el parque con uno de sus amigos, viendo como tres chicos del grupo les seguían e insultaban llamándole «maricón y pringao». Entonces, caminó detrás de ellos para evitar que agredieran a su amigo y comenzó una pelea. «A mi amigo le agredieron físicamente, propinándole un bofetón, teniendo también que esquivar más golpes. Yo también tuve que esquivar varios puñetazos». Después, dice que uno de los chicos del grupo agresor «que tenía los ojos rojos, como si estuviera bebido o hubiera consumido alguna sustancia», le colocó una navaja en el pecho, concretamente en el pectoral izquierdo, notando una presión en dicha zona. «Me dijo: 'Qué, como os achantáis ahora cuando saco la navaja'». «También me amenazó diciéndome en tono burlesco: 'Que te pincho'». A continuación, cuenta este joven, el chico que le sacó la navaja, y al que no pudo identificar durante su declaración cuando los agentes le mostraron varias fotografías, fue corriendo hacia su amigo, pero, pasados unos minutos, parece que el problema remitió y cesó la pelea. Sin embargo, ese amigo le manifestó que el agresor le había colocado la navaja en un costado.

Horas después del incidente y ante la molestia que notaba en el pecho desde la noche, este joven comprobó que tenía una «herida leve» en la zona del pectoral donde le colocó la navaja.

Su amigo, el que también fue amenazado con la navaja y que sí identificó tanto a Jorge Cervantes como al chico que le dio una bofetada, añadió a este testimonio que cuando se encontraron con la chica, a la que conocía, ésta le manifestó que el grupo de chicos no la dejaban ir a casa, pidiéndola que se montara en su coche para ir juntos de fiesta. «Cogí a la chica y uno de los chicos me gritó que la dejara, que era su novia. Me di la vuelta para hablar con él y otro me dio un tortazo. Entonces mi amigo se acercó para defenderme y fue cuando le pusieron la navaja en el pecho, diciéndole que se marchara». Su amigo hizo caso y se marchó con la chica y fue cuando Jorge se acercó a él y le puso la navaja en el costado, «por lo que me aparté».

Por su parte, la chica que se vio en medio de la reyerta confirmó lo manifestado por los dos jóvenes anteriores y dio más detalles de lo ocurrido. «Uno ellos se arrodilló haciendo el tonto y diciéndome que me casara con él. Después llegaron tres chicos, uno de ellos es novio de una amiga. Le empezaron a insultar y luego le dieron un puñetazo. Me quedé en shock cuando vi a uno de ellos con la navaja detrás de mi amigo. Después volvieron y le dieron un puñetazo al otro chico, que cayó al suelo», relató.