El botellón y la movilidad abren una brecha entre los socios del Gobierno
Cantabria ·
Revilla escribe una carta a la delegada del Gobierno, Zuloaga defiende en Asturias que allí acertaron al retrasar la movilidad, y el presidente dice que, si es un reproche, lo es para su consejero de SanidadCon la crisis del coronavirus de por medio, socialistas y regionalistas siguieron este jueves cruzándose comentarios. Por cartas o con declaraciones. En un tono ... suave, Revilla envió una misiva a la delegada del Gobierno, Ainoa Quiñones, a cuenta de la lucha contra el botellón. El regionalista alabó el «alto grado de responsabilidad y dedicación» de los efectivos de los cuerpos de seguridad. Sí. Pero no dejó de recordar que las competencias las tienen la Delegación y las entidades locales. Y mucho más sorprendente, en dirección contraria, fue el mensaje entre líneas del vicepresidente Zuloaga. De vacaciones en Asturias y en un encuentro informal con el presidente asturiano (el también socialista Adrián Barbón), aseguró que «a la vista de los resultados», la comunidad vecina «acertó tomando la decisión de posponer al último momento» la apertura de movimientos entre autonomías, según recoge Efe. Unas palabras con carga de profundidad para la foto de Revilla con el lendakari vasco y su decisión de adelantar el tránsito. «No entiendo qué ha querido decir. Si era un reproche lo será para su consejero de Sanidad, que fue el que autorizó esa decisión, de la que, por otro lado, estoy muy satisfecho», respondió Revilla.
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«El Gobierno de Cantabria ha ejercitado todas las competencias que la normativa nos atribuye. Por lo tanto, y dado que tanto la normativa estatal como la Ley autonómica 5/1997, de 6 de octubre, de Prevención, Asistencia e Incorporación Social en materia de Drogodependencia prohíbe el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública, ahora corresponde por ley orgánica a las fuerzas y cuerpos de seguridad garantizar la seguridad ciudadana». Eso escribe Revilla, que apela a Quiñones -«como máxima autoridad que eres», dice- a que establezca «los mecanismos de coordinación con los ayuntamientos, a través de las juntas de seguridad, para que policías locales, Guardia Civil y Policía Nacional optimicen los procedimientos y protocolos y adopten medidas que puedan paliar la escasez de recursos humanos para afrontar esta crisis, que nos has desbordado a todos». La misiva, pese a su tono conciliador, es un episodio más del choque a cuenta de la lucha contra el botellón.
Y lejos de sacar la manguera, Zuloaga avivó el fuego desde Asturias. El vicepresidente propuso impulsar un frente común entre su comunidad y Asturias como «puerta a la oportunidad» y «vía» para poder captar más recursos de los fondos europeos de reconstrucción. «Hemos hecho frente antes ambas comunidades a la crisis sanitaria por encima de la media de España y eso ha sido lo que nos ha movido. Sin duda el ejemplo asturiano es un ejemplo a admirar por el resto de comunidades autónomas», dijo tras verse con Barbón.
«A la vista de los resultados, Asturias acertó tomando la decisión de posponer al último momento la apertura de la movilidad»
Pablo Zuloaga | Vicepresidente de Cantabria
Pero, al ser preguntado por la movilidad entre regiones y la posición asturiana, el líder socialista cántabro no dudó en reconocer el acierto de Asturias. Esa respuesta no hubiera llamado la atención si no estuviera en la mente de todos la foto del encuentro en el límite entre los dos territorios que tuvieron el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, y el lendakari, Íñigo Urkullu. Un acto muy del estilo de Revilla en el que se dio por bueno adelantar dos días la opción de circular. O sea, un mensaje cargado de significado y directo al cuello de la decisión de Cantabria y País Vasco.
«Habrá querido quedar bien allí. Abrir dos días antes no ha influido, como explican en Sanidad, y fue positivo en la imagen que dimos de región segura»
Miguel Ángel Revilla | Presidente de Cantabria
Revilla se mostró sorprendido. «Habrá querido quedar bien allí». Y dio razones. «Abrir dos días antes no influyó para nada. Los rebrotes se hubieran producido diez o doce días después, no en agosto. Y en esos días dimos los mejores datos». Más aún, a su juicio, adelantarse («porque Asturias hizo lo mismo que Madrid y que el resto») «fue positivo en cuanto a la imagen de región segura y atractiva que dimos y que ha movilizado a muchos para que Cantabria esté 'petao'». Además, Revilla insiste en que ese paso se dio con la autorización de Sanidad, «y no creo que Zuloaga vaya en contra de lo que dijo su consejero, que es de su partido».
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