Buruaga conserva 38 cargos del bipartito

La mayor parte de los que repiten en el Gobierno son subdirectores de área, un puesto limitado a funcionarios por concurso de méritos pero elegido por libre designación. Salvando las distancias, un modelo similar al que se utiliza para nombrar a los directores de empresas públicas como Cantur o Sodercan, por ejemplo. Al fin y al cabo, un cargo de confianza de cada consejero destinado, eso sí, solo a empleados públicos.

Entre ellos, por su carácter político y por actualidad, destaca la reciente entrada de Marta Barca al Ejecutivo del PP. La abogada de Torrelavega fue uno de los fichajes de Javier Marcano cuando volvió a primera línea política en 2021 como consejero del Gobierno de Miguel Ángel Revilla. Barca, hasta ese momento jefa del Servicio de Obras del Ayuntamiento de Santander, asumió entonces la dirección general de Turismo. Ahora, estará a las ordenes de Roberto Media en Fomento, donde ya ejerce como subdirectora de Planificación Territorial y Paisaje. En esa misma Consejería repiten Virginia Martínez y Leyre Rodríguez en Urbanismo y Control Ambiental, respectivamente.

También aguanta, de momento, en el organigrama el director de El Soplao, Juan Carlos Jimeno, exconcejal de Obras del PRC de Marina de Cudeyo que se puso al frente de la cueva en 2018. Es uno de los pocos cargos que la consejera Eva Guillermina Fernández ha decidido mantener. Tan solo repiten Pedro Osaba como subdirector de Cultura y Valentina Granados en el FIS, cuya jubilación, según dijo la propia consejera, está próxima.

En el organigrama de Buruaga aparecen nombres que ya estaban en la estructura del Gobierno cuando la presidenta era la consejera de Sanidad en la legislatura 2011-2015. Cargos que se han mantenido desde aquel mandato de Ignacio Diego pese al cambio de ciclo del bipartito. Entre ellos están Joaquín de la Serna, subdirector de Justicia desde hace doce años; José Manuel Callejo, que ahora ha cambiado el Emcan por el Icasst en la Consejería de Industria; Fernando Olaiz, con diversos cargos en Economía desde 2014 hasta ahora en la dirección general de Presupuestos; y Javier Vidal Campa, que fue secretario general y director de Administración Local en aquella Consejería de Presidencia de Leticia Díaz –ahora líder de Vox–, después subdirector de Vivienda con el bipartito, y ahora director general de Economía.

Precisamente, esta última consejería es la que más cargos ha adoptado de la etapa anterior, con hasta 15 nombres que se repiten, casi todos ellos en el mismo puesto, excepto el citado Campa y José Manuel Ramírez, que ha pasado de subdirector de Tesorería a interventor general. Por el contrario, la Consejería de Educación ha decidido renovarse por completo y es la única que no conserva ningún cargo de la pasada legislatura.

Mantener la estructura de los altos cargos ha crecido sustancialmente en los últimos años. En 2018 hacían falta 5,5 millones de euros para sostenerla. Este año hicieron falta 7,3 millones. Es decir, un 32% más. Los sueldos más altos son los del interventor general (98.000) y el director del Hospital Virtual Valdecilla (90.000).

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