Los centros de salud sólo atenderán lo urgente y ya no se harán test de coronavirus a domicilio

El ritmo al que está evolucionando la pandemia de coronavirus no da tregua. Cada día se añade más tensión al sistema sanitario, que trata de reajustar su actividad a marchas forzadas para que desde hoy, lunes, «esté garantiza la atención urgente las 24 horas del día», que «es crucial en estos momentos», y se pueda dar cobertura, a la vez, al aumento de contagios del Covid-19 que se espera. «Hay que evitar en la medida de lo posible que la gente acuda a los centros de salud y a los hospitales si no es grave», destacan desde el Servicio Cántabro de Salud. Es el mensaje que se repite por activa y por pasiva: «¡Que la gente se quede en casa!» Y en líneas generales, la ciudadanía está respondiendo con la responsabilidad que exige esta emergencia sanitaria de dimensiones nunca vistas. Una responsabilidad a la que apelan los sanitarios, conmovidos por los aplausos enviados desde los balcones de esos hogares donde se comparte preocupación e incertidumbre, pero también orgullo y confianza de que «entre todos, saldremos pronto de esto».

El último parte de la epidemia de coronavirus en Cantabria, con datos actualizados hasta las 12.00 horas de hoy lunes, indica que hay 6 nuevos casos de coronavirus en Cantabria, lo que eleva a 48 el número total de casos activos en estos momentos, y a 10 el número de personas curadas, según los datos actualizados a las 12.00 horas.

Del total de casos activos en Cantabria, 18 se encuentran hospitalizados: 16 en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, 2 de ellos en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), y otros 2 en el Hospital Sierrallana. El resto de positivos, 29, permanecen en aislamiento domiciliario. Todos los pacientes son mayores de 18 años y 1 de ellos es profesional sanitario.

Salud Pública destaca que la epidemia ya ha cambiado de fase. Si hasta ahora los esfuerzos se habían concentrado en contener la propagación del coronavirus, identificando a las personas infectadas y poniendo en cuarenta a su red de contactos estrechos, en aras de cortar cada cadena de transmisión; ahora se ha entrado ya en el escenario de mitigación.

¿Qué implica eso? «Se considera que el coronavirus tiene una extensión comunitaria», explica la directora de Salud Pública, Paloma Navas. Las vías de contagio y el volumen de casos ya se han abierto hasta tal punto que ya no se realizará la toma de muestras a domicilio que se venía haciendo hasta ahora para confirmar o descartar el diagnóstico.

«Igual que ocurre con la gripe todos los años, ya no se hace una prueba específica a todo el mundo que presente síntomas, sino que se centrarán en aquellas personas que tengan un cuadro más grave o complicado», añade. Lo que se traduce en que a partir de ahora las personas que empiecen a notar síntomas compatibles con el Covid-19 (fiebre, malestar general, catarro o resfriado), si es de forma leve, que es como se pasa la enfermedad en el 80% de los casos, ya no tienen que llamar a los teléfonos de emergencias para que les tomen las pruebas microbiológicas en casa, como se ha venido haciendo. Es más, tanto desde el 061 como del 112 se pide insistentemente que no se les llame para consultar dudas sobre el coronavirus -para eso se ha habilitado el teléfono 900 612 112-, porque se colapsan las líneas y se interfiere en la asistencia a urgencias vitales.

La expansión del virus, que desde hace 48 horas experimenta un notable ascenso, ha llevado ya a dar prioridad a «las pruebas de los pacientes que presenten complicaciones», subraya Navas. Hasta ahora, se habían realizado 353 pruebas. «La sensación es que vamos a tener un repunte importante de coronavirus en España y en Cantabria», avanzó el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, tras participar en una videoconferencia con Pedro Sánchez y los presidentes autonómicos.

En previsión de esa oleada de contagios, a lo largo del fin de semana, se han tenido que adoptar medidas organizativas que en el calendario no estaban marcadas de forma tan inmediata. De ahí el desconcierto entre buena parte de los propios profesionales sanitarios, sobre todo de la red de Atención Primaria. Desde el SCS se informó la tarde del sábado de la suspensión de toda la actividad no programada, ya no sólo en Valdecilla, sino también en Sierrallana y Laredo, y en todos los centros de salud de la región.

Para vaciar el flujo de pacientes en todos los centros sanitarios, se han suspendido más del 70% de las intervenciones quirúrgicas y todas las consultas susceptibles de atenderse más adelante o sin tener que acudir físicamente a la cita con el médico, tanto en Atención Primaria como en Especializada. Una medida que se extiende también a las pruebas diagnósticas no urgentes y a las extracciones de sangre. Sólo en Valdecilla Sur son más de 2.500 las personas que acuden a consulta una mañana cualquiera, sin contar a los acompañantes.

«Todo lo que podamos evitar, mejor. El hospital ahora mismo es un potencial foco de contagio», insisten desde el Servicio Cántabro de Salud. Por eso, se ha activado ya una aplicación para el móvil (se puede descargar en la web del SCS) para establecer consultas por videoconferencia en los casos que sea factible. Desde la Dirección General de Transformación Digital se trabaja ya para poder ampliar cuanto antes esta prestación a las consultas de Atención Primaria.

A partir de hoy en los centros de salud se limitará la asistencia a lo «imprescindible». Por eso, desde la Gerencia se ha dado indicaciones a médicos de familia, pediatras y personal de enfermería para suspender todas las citas que pueden esperar, de tal forma que se vacíe la actividad habitual. Tampoco habrá posibilidad de pedir cita previa a través de la web del SCS. El paciente que necesite consulta deberá llamar por teléfono a su centro de salud, donde se le pondrá en contacto con el médico, y será él quien decida si es preciso que acuda físicamente o se puede resolver su caso en esa misma llamada. Para evitar la posibilidad de contagio entre las personas que tengan que ir de forma irremediable a los centros de salud, se va a establecer un doble circuito para que no se mezclen quienes acuden con patología respiratoria (tos, catarro, dificultad respiratoria...), con el resto de pacientes que van por otros motivos diferentes. Asimismo, desde el SCS aclaran que «la atención domiciliaria que habitualmente se realiza desde Atención Primaria está asegurada para los pacientes que lo necesiten».

Otra medida introducida para evitar los desplazamientos a los centros de salud es que ya no hace falta el papel de la receta: bastará con acudir a la farmacia con la tarjeta sanitaria para poder recoger los tratamientos indicados por el médico. También la Asociación-Hermandad de Donantes de Sangre de Cantabria recordó ayer que quedan anuladas todas las extracciones previstas para las dos próximas semanas. Las autoridades sanitarias insisten en que «hay que evitar en la medida de lo posible acudir a los recursos sanitarios» y recuerdan que los más vulnerables ante la pandemia que sacude al mundo son los mayores, sobre todo aquellos con enfermedades de base, y los fumadores.

Los hospitales comarcales se preparan también para dar respuesta al previsible aumento de infectados por coronavirus. La suspensión de la actividades quirúrgica programada, decidida primero en Valdecilla y aplicada al día siguiente en Sierrallana y Laredo, busca minimizar el movimiento de pacientes por el hospital para evitar la propagación del virus, pero sobre todo liberar camas de hospitalización para la demanda que está por venir. En el centro de Torrelavega se ha dispuesto ya una planta entera con 19 habitaciones que se pueden hacer dobles; y en Laredo se ha reservado, de momento, el área de día quirúrgico, que está separado del resto de las instalaciones y dispone de nueve camas.