Educación y la Junta de Personal no llegan a un acuerdo: se mantiene la huelga de profesores

La novena reunión para negociar concluyó con el mantenimiento de la convocatoria de huelga docente para el inicio del curso escolar la próxima semana. Solo quedan nueve días para el primero de los paros escalonados. Y según los sindicatos, «el consejero de educación es quien tiene en su mano que desconvoquemos la huelga». El encuentro comenzó sobre las 12.15 horas en el antiguo colegio Simón Cabarga con un último movimiento encima de la mesa por parte del Gobierno de Cantabria. A primera hora de la mañana, el área de Silva remitía una propuesta que se ajustaba al marco de petición de los sindicatos. «Hemos llegado a un acuerdo tanto en las cantidades, como en los matices», explicó Conchi Sánchez (Comisiones Obreras) en representación de la Junta de Personal Docente (STEC, ANPE, CC OO, TÚ y UGT). El documento recogía todas y cada una de las peticiones de los sindicatos, pero como lamentó Sergio Silva, «han considerado que condicionar el acuerdo a tener suelo presupuestario no es justo».

35 millones de euros supone el impacto presupuestario del acuerdo, recordó el consejero, «es casi un ejercicio de realismo decir que para poder implementar una subida de este calibre necesitamos contar con los recursos necesarios para afrontarla». Sin embargo, la percepción de los sindicatos es distinta. Creen que la postura de Silva en la negociación es la de «un comisario del Partido Popular y no de un consejero de Educación». Los sindicatos plantearon que «no podemos ser tan irresponsables de firmar una cláusula que le permite a él, o a otros partidos políticos que accedan al poder, incumplir el texto y las cantidades que tanto tiempo, casi un año, nos ha costado alcanzar».

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De la misma manera, Silva criticó la «postura» de la Junta de Personal. Incluso, apeló a su «responsabilidad», con respecto al paro, «conocen lo dañino que puede ser una huelga al inicio de curso». Además, el consejero anunció que, previo al inicio de la reunión, la Consejería había recibido el miércoles pasado la convocatoria de huelga para el inicio del curso en los centros de Educación Secundaria y Bachillerato y el mismo día de la reunión por la mañana «la solicitud para una manifestación el día 8 de septiembre por la tarde». Es decir, antes de comenzar la reunión la Junta de Personal Docente ya había tramitado la documentación para llevar a cabo una de las movilizaciones previstas, «porque debemos cumplir los plazos, ya decayó una fecha de huelga en mayo».

La negociación, por el momento, vuelve a quedar en pausa. No hay una nueva fecha para el diálogo. Y las trece jornadas de paro previstas para el inicio de las clases se acercan. Comenzarán los colegios, los días 8 y 9 de septiembre; seguidos por institutos, el 11 y 12; y por los centros educativos de personas adultas, música y danza, artes plásticas y diseño el 17 y 18 del mismo mes y concluirán el 7 y 8 de octubre en escuelas de idiomas. Pero no es todo. Si para esa fecha no se ha alcanzado un acuerdo para la adecuación salarial, los sindicatos prevén una semana completa de huelga coincidiendo con la presentación de los Presupuestos Generales de Cantabria en el Parlamento autonómico.

El órdago llega a pesar de que la viabilidad presupuestario es el único fleco entre los sindicatos y la Consejería. «No vamos a participar del juego del 'pin, pan, pun' de los partidos políticos», dijo Conchi Sánchez, «todo el mundo entenderá que las organizaciones sindicales no podemos ser tan irresponsables de firmar esa condición». Mientras tanto, Silva permanece inmóvil con respecto a este punto del pacto. Ya lo advirtió la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga en el Debate de Estado de la Región: «No es responsable ni sensato poner en riesgo la viabilidad de los servicios públicos e hipotecar el presupuesto educativo. Voluntad de diálogo, toda. Disposición al pacto, toda. Pero no a cualquier precio, no a costa del sistema». Y para afrontar el impacto presupuestario de la subida salarial de los docentes solo hay una opción: aumentar el presupuesto. Una vez más, el consejero apeló indirectamente a la oposición para que los docentes tengan su subida salarial, «somos un Gobierno en minoría y tenemos la obligación de llevar un proyecto de presupuestos. Esa es nuestra responsabilidad y lo que se nos puede pedir. Más allá, tendrían que intervenir otras fuerzas políticas que, en este caso, se han manifestado clarísimamente y de un modo contundente, incluso dando ultimátums, para que alcanzar un acuerdo –con los docentes– sea la condición para negociar un presupuesto».

El resto de las cláusulas están claras. Los docentes cobrarían 180,23 euros más al mes en enero de 2029, tal y como solicitó la Junta. Además, incrementaría el complemento de los sexenios en 187 euros al final de la carrera docente con 150 horas de formación. Incluso, el primer sexenio –al que más docentes pueden acceder– ascendería a 150 euros y se empezaría a cobrar en enero de 2026. Es un acuerdo que ha estado a punto de ser definitivo, que complace a ambas partes y pondría fin a meses de conflicto, pero que, por un escollo en la forma o «en la redacción», como alegaron los sindicatos, no evitará la huelga en nueve días.