Illa asegura en la UIMP que las medidas contra el covid deben adaptarse a la realidad de cada momento y cada territorio

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha destacado hoy en el Palacio de La Magdalena de Santander que las medidas de control de la pandemia deben adaptarse a la realidad epidemiológica de cada momento y en cada territorio. «La experiencia de cada comunidad puede ser un aprendizaje y, desde luego, la situación epidemiológica actual es diferente en cada territorio», sentenciado en su intervención telemática en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP)

Illa ha defendido la descentralización del sistema sanitario español ya que considera que «ha sido una fortaleza del sistema porque nos ha permitido responder de forma coordinada con proximidad al mismo tiempo al ciudadano»

La intervención del ministro ha tenido lugar durante la inauguración del curso 'Sanidad en el contexto COVID-19' en la que ha destacado la intención de su departamento ministerial de fortalecer, a medio y largo plazo, el sistema de salud pública, la Atención Primaria y, además, mejorar las condiciones laborales de los profesionales sanitarios.

Y es que, tal y como ha explicado, la crisis sanitaria generada por el nuevo coronavirus, y que en España ya ha afectado a más de 479.000 personas y provocado la muerte de más de 29.000, ha evidenciado las «fortalezas y debilidades» del Sistema Nacional de Salud (SNS).

«Si antes de la pandemia sabíamos que había retos pendientes, ahora se han hecho más evidentes», ha avisado el ministro de Sanidad, para subrayar la importancia que tiene, «ahora más que nunca», reforzar el sistema de salud pública, sobre el cual sólo se destina el 1,1 por ciento del gasto sanitario público total.

De hecho, Illa ha recordado que el Ministerio está trabajando en la creación de un Centro Estatal de Salud Pública que espera poder presentar al Congreso de los Diputados antes de un año. El objetivo de este organismo será responder a las amenazas y riesgos derivados de posibles nuevas pandemias.

En este sentido, el ministro ha abogado por cambiar el actual modelo de atención sanitaria en otro en el que la prevención juegue un papel fundamental y en el que, además, se ponga a las personas en el centro del sistema. «Se trata de tener un sistema que produzca salud en lugar de sanidad. Si la pandemia nos ha dejado una lección es que es más necesario que nunca cambiar hacia esta dirección y crear un modelo más robusto y resiliente que afiance la sanidad pública como un servicio de bienestar y como una punta de lanza de desarrollo social del país», ha recalcado Illa.

Otra de las prioridades marcadas por el ministro de Sanidad a medio y largo plazo es el refuerzo de los servicios de Atención Primaria, los cuales han tenido un papel «fundamental» en la respuesta y control del nuevo coronavirus.

«Su enfoque integrador y preventivo es su esencia, por lo que tenemos que potenciar y reforzar su estructura, así como modernizar la forma en la que cuidan de los pacientes», ha puntualizado, tras comprometerse a seguir impulsando el Marco Estratégico para la Atención Primaria y Comunitaria 2019, aprobado durante el mandato de su predecesora en el cargo, María Luisa Carcedo.

Finalmente, el ministro de Sanidad ha aludido al trabajo realizado por los profesionales sanitarios y, especialmente, por la labor que han desempeñado durante la pandemia. «Hay que cuidar a los que nos cuidan y, por eso, necesitamos trabajar para mejorar sus condiciones profesionales y hacerlo de manera coordinada y conjunta con las comunidades autónomas», ha zanjado.