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La ronda marcera de Torrelavega, durante una de sus interpretaciones. ::

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La ronda marcera de Torrelavega, durante una de sus interpretaciones. :: Roberto Ruiz

Las marzas toman el Parlamento

Las rondas de Torrelavega, Reinosa y Santander se unieron en el patio del edificio para ofrecer un concierto

Ángela Casado

Santander

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Sábado, 2 de marzo 2019, 07:40

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El Parlamento de Cantabria cambió este viernes a sus diputados por marceros. A las ocho de la tarde comenzaba el concierto en el que las rondas de Torrelavega, Reinosa y Santander iban a interpretar las marzas más representativas de sus respectivas comarcas. El patio del edificio estaba completamente lleno. Pocos minutos antes de la hora de inicio ya comenzaban a escucharse cánticos en las inmediaciones. Y así entraron en el edificio. Por la puerta, pasaban decenas y decenas de hombres tocados con boina y la vara de avellano en la mano mientras entonaban 'Si no hay oro, venga plata'.

«Ahí está mi nieto, más alto que de costumbre», le contaba una mujer a otra mientras señalaba las albarcas del niño. No había muchos más de su edad. El presidente de la Asociación Ronda Marcera, Juan José Crespo, tomó la palabra cuando todos los marceros se colocaron en el escenario. «Hoy todos somos pueblo», decía. «Venimos, un año más para continuar con esta tradición tan valorada y de larga existencia». Antes de terminar su presentación se dirigió a la presidenta del Parlamento, Dolores Gorostiaga, con una pregunta: «Buena gente de la casa, ¿dais marzas?». Y ella se dirigió al atril para presentar el acto cultural.

«Una tradición larga que da inicio a la primavera». Así describía Gorostiaga a las marzas. Una costumbre que ha cambiado con el paso de los años. Antes sólo podían cantar los hombres solteros mayores de edad. «A las mujeres también les gusta rondar», añadía a la vista de que ninguna se había animado a participar. Para finalizar su intervención y dar pie al concierto, se despidió con una invitación: «Cantad, mozos, cantad».

El turno de las rondas

La Ronda Marcera de Torrelavega, dirigida por Raúl Castillo, fue la primera en intervenir. Interpretaron 'De casa salimos' y, al terminar, dieron paso al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla. «La cultura con mayúsculas es la popular», expuso. Aprovechó la ocasión para hacer un llamamiento a seguir inculcando las costumbres de la región a las nuevas generaciones, porque así «no se acabarán nunca». También valoró que en muchos colegios se hubieran celebrado durante los últimos días las marzas y que sea «una tradición cada vez más extendida». «Por eso pienso que nunca terminará», concluyó esperanzado.

Las rondas Las Fuentes, de Reinosa, y Altamira, de Santander, también interpretaron sus canciones más reconocidas. Entre sus actuaciones, el consejero de Educación, Francisco Fernández Mañanes, quiso dedicarles unas palabras, con las que aseguró que los marceros «perpetúan esta expresión popular hasta nuestros días y suponen un orgullo para el pueblo cántabro».

Al término de las interpretaciones se rindió un homenaje al tenor solista Rafael Cangas, un artista «con muchos años de trayectoria en la Coral de Torrelavega y en la parroquia de la Asunción». Para finalizar, Revilla entregó los habituales aguinaldos. Este año se eligió una cesta con productos típicos de la región que serán donados a la asociación Hogar del Transeúnte, de Torrelavega.

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