Volar el día 24 de Madrid a Santander costará 339 euros

Con las restricciones de movilidad todavía vigentes y un plan de medidas para Navidad ya trazado, pero todavía susceptible de sufrir cambios si la incidencia del virus empeora, algunos pasajeros llegaron ayer al aeropuerto Seve Ballesteros para pasar las fiestas en la región. Uno de ellos era Unai Miguez, estudiante de Filología Hispánica en la Universidad de Santiago de Compostela. Reconocía haber adelantado la vuelta a su residencia, en Castro Urdiales, para asegurarse de que podría reunirse con sus seres queridos: «Prefería ser prevenido por si se endurecen las medidas», indicaba a la salida del vuelo que aterrizaba poco antes de las nueve de la mañana. Explicaba también que los precios variaban mucho de un día a otro, pero aseguraba que «son más caros» que otras veces por la alta demanda en estas fechas.

Ayer sólo aterrizaron dos vuelos, ambos con origen en Madrid -uno por la mañana y otro a la tarde-, ya que debido a las restricciones, las frecuencias habituales de vuelos todavía no se han retomado. La mayoría de pasajeros aterrizan en Santander por motivos laborales y muchos de ellos vuelven a sus casa en el mismo día.

Es el caso de Elena Cabrera y Ángela Hernández, dos trabajadoras sociales que volaron ayer desde Tenerife, con escala en Madrid, hasta Santander y que esa misma tarde regresaban al archipiélago canario. Se mostraban un tanto sorprendidas por el aumentos del precio de los billetes: «En nuestro caso, va por agencias, pero sí que los he visto bastante caros, hacemos escala, pero aún así cada uno nos ha salido por más de 300 euro. El importe no suele ser tan elevado», aseguraba Cabrera.

Algunos llegaban desde otros países, como Susana Briz, trabajadora en Luxemburgo y que ayer venía a su casa de Santander para pasar las Navidades: «Siempre suelo coger el vuelo con tiempo de cara a estas fechas porque sé lo que ocurre; lo compré hace más de dos meses y me salió bastante barato», explicaba a la salida del aeropuerto.

Se espera que el flujo de viajeros que regresa a Cantabria para pasar las Navidades aumente en los próximos días y que se retomen las líneas de transportes como los autobuses para las fechas en las que se permitirá la movilidad entre comunidades para reunirse con familiares o allegados. Por el momento, con muchos de los trayectos suprimidos, apenas llegan pasajeros de otras comunidades en tren o autobús.

Algunos todavía tiene dudas sobre si podrán pasar las Navidades con más de dos grupos diferentes. Como Javier Salvador, que tiene a su familia entre Palencia y Santander. Ayer llegaba en tren desde Palencia, sólo junto a otros seis pasajeros, tras decidir trasladarse allí una temporada con su familia.

Desde allí, este cántabro ha estado estudiando de forma telemática la carrera de Administración de Empresas y vuelve ahora para ver a su madre y a su hermana, con las que pasará los primeros días de Navidad en su casa en Santander. «No sé todavía si podré hacerlo, vuelvo a casa para hacer unas entregas de la Universidad y ya aprovecharé para pasar unos días. Si puedo, me gustaría compartir la otra mitad de las fiestas con mi familia palentina», explicaba a las puertas de la estación de tren.