Cabo Mayor vuelve a alumbrar el arte

Los espacios portuarios vuelven a integrarse en el calendario expositivo y la temporada 2019 se inicia con el emblemático Centro de Arte Faro de Cabo Mayor, impulsado por el artista Eduardo San y su compañera, la también pintora Isabel Villar, que reabre sus puertas. Tras un breve periodo de cierre para la realización de labores de mantenimiento, el espacio ubicado en la Avenida del Faro, llamada Pintor Eduardo Sanz, retoma su actividad. Una temporada que estará integrada, junto a la colección permanente, por tres grandes pilares, desde finales de primavera hasta final de año: las exposiciones de Antonio Rojas en el mes de junio; José Luis Serzo con su 'Morfología del encuentro', a continuación; y del 15 de agosto al 20 de octubre se exhibirán las obras seleccionadas de la segunda edición de la Bienal Miniprint, que el año pasado llevó a cabo su primera convocatoria dentro del evento Impact 10, conferencia internacional de grabado y obra gráfica multidisciplinar.

Además, el Centro cuenta con su muestra de carácter permanente. La colección que cedió para su exhibición la familia Sanz-Villar. Formada por sus obras pictóricas junto a numerosos cuadros de otros artistas y a una variada recopilación de objetos y documentos, toda ella está fundamentada en la iconografía del mar y de los faros. La parte más importante de esta colección es la constituida por las obras del propio Eduardo Sanz.

El museo cuenta con cinco salas distribuidas entre la base de la torre del faro y sus edificios anexos donde se ubica la colección permanente. En la sala Cabo Mayor reside el núcleo central de la colección, una cuidada selección de las obras de Eduardo Sanz dedicadas a los principales faros y paisajes del litoral español.

La sala Cabo Menor alberga una selecta representación de las vanguardias artísticas españolas de la segunda mitad del siglo XX en todos los soportes y técnicas, articulada en torno a la temática del faro, con obras de Sergio Sanz, Eduardo Arroyo, Dis Berlín, Sara Huete, Ángel Pascual, Ángel de la Hoz, Carmen Pagés, José Ramón Sánchez y El Roto, entre otros. Por su parte, en la sala Anular se ofrece un original acercamiento al mundo de los faros, representados en bisutería, embalajes de conservas, productos textiles, dioramas y todo tipo de objetos, así como su estimulante papel en el imaginario infantil.

Completan el espacio las salas Isla de Mouro, donde se ha habilitado un pequeño espacio de interpretación sobre el faro, y prolongando la sala Cabo Menor, el espacio dedicado a las exposiciones temporales. Durante el pasado año 2018, Cabo Mayor contó con la presencia de un total de 37.566 visitantes a los que ofertó una decena de actividades culturales: exposiciones temporales de fotografía, pintura y arte gráfico, proyecciones de vídeo además de un concurso de dibujo infantil y una jornada poética.

Antonio Rojas, cuya obra forma parte precisamente de la colección que forjó Sanz, es un pintor vinculado desde los inicios a la neofiguración de los 80 y seguidor de la obra de algunos artistas de esa generación como Pérez Villalta, Chema Cobo y el desaparecido Carlos Alcolea. El pintor realiza una obra plástica de aspecto figurativo y algo surrealista o neometafísico. Sus constantes son: «la luz, el espacio y, sobre todo, el deseo de trascender lo pintado con la intención de ir más allá de la superficie del lienzo».

En el caso de Serzo, artista vinculado a la galería santanderina Siboney, con una trayectoria que ha discurrido muy ligada a Cantabria, se sumará a la temporada con 'Morfología del Encuentro', otro de sus relatos pictóricos. En este caso se narra la historia de Michael Burton Junior, un alto ejecutivo en finanzas inspirado en las películas de Wall Street de los 80, que se ve abocado a emprender un camino iniciático en la búsqueda, quizá, del sentido de su vida. «El arquetipo del personaje ha conseguido tocar su techo profesional, pero, al parecer, también su fondo espiritual».

El mundo singular de Serzo, un ecosistema propio habitado por iconos y personajes, por una pintura entre la escenografía y lo literario, se exhibió por última vez en Siboney hace dos años. Sus 'Escenas dentro y fuera del Teatrorum plantearon una «lectura transversal» de su amplia producción.

Serzo (Albacete, 1977), considerado uno de los artistas españoles más destacados y reconocidos de su generación, y vinculado a la galería santanderina desde sus inicios, celebró otra de sus citas importantes en el Palacete del Embarcadero. 'Ensayos para una gran obra' mostraba por primera vez de manera monográfica una faceta fundamental de su trabajo: el dibujo.

Serzo, que desarrolla su producción a partir de ambiciosos ciclos que, en ocasiones, elabora durante años, exhibió en el espacio portuario su serie protagonizada por Blinky Rotred, alter ego del propio artista, junto con su hija Maya (en la ficción y en la vida real), que certificó que en su creación «las fronteras entre lo real y lo imaginado, lo deseado, lo temido o lo soñado, no aspiran a ser claras».

Las piezas de Siboney se presentan como una serie de estudios, bocetos y pequeñas obras que dejan ver lo que está dentro y fuera de la narración. «Nos desvela, porque no tiene nada que esconder, el entramado de su universo, las bambalinas de la creación, quedando al descubierto el proceso mismo».

Finalmente, la segunda edición de la Bienal de Miniprint 'El Mar y los Faros', se celebrará entre los meses de agosto y octubre en la sala Isla de Mouro del Centro de Arte Faro Cabo Mayor. El foro pretende fomentar una nueva corriente de arte en Santander y en Cantabria. y un mayor reconocimiento de la ciudad en los circuitos del arte internacional vinculados a la gráfica. La Autoridad Portuaria editará un catálogo digital con las obras seleccionadas y premiadas.