Patadas de nostalgia
Cinesa, Yelmo y Ocine ·
Una descarada operación, acelerada y muy prefabricada, para vincular a los jóvenes especctadores a la leyenda con una trama adolescente sin sorpresasSecuela con guiños generacionales, su clara intención es enganchar la aureola de fenómeno, para muchos inexplicable, con los espectadores más jóvenes. Si se despoja de ... sus nombres de referencia y de esa atmósfera hereditaria, el filme es una estudiada mezcla de comedia dramática adolescente donde la pizza se combina con el acoso escolar, y las fricciones pandilleras con artes marciales y amistades. 'Karate Kid: Legends', en este sentido, no abusa de metraje, va al grano y deja que la nostalgia entre por las rendidas y los muchos agujeros negros de una entrega que busca ser una simple, pero poco refrescante, y simpática nadería. Los personajes de Jackie Chan y Ralph Macchio que deberían ser los eslabones de la saga son presencias anecdóticas y el filme se desmaya hasta convertirse en mero artefacto de esencias adolescentes.
-
País EE UU
-
Año 2025
-
Dirección Jonathan Entwistle
-
Guion Rob Lieber
-
Música Dominic Lewis
-
Fotografía Justin Brown
-
Reparto Jackie Chan, Ralph Macchio, Ben Wang, Joshua Jackson
-
Género Drama
El salto a Nueva York es convencional y estereotipado y el desafío de retomar el mundo Kung Fu se limita a intuir que en la sombra sigue estando Jackie Chan. En la dirección Jonathan Entwistle se muestra más bien anodino, mientras que la única posible sorpresa es la defensa del personaje que hace Ben Wang, muy pronto carne de reparto de 'Los juegos del hambre: Amanecer en la cosecha'. El factor joven, la llamada generacional está planificada en todos sus frentes: el papel de la música, el diseño o la estética, desde la animación al videojuego y guiños al consumo audiovisual de YouTube y de TikTok. El guion desequilibrado opta a veces por apresurarse y contribuye a que todo suene ligero y forzado, prefabricado.
Es un 'Karate Kid' urbano, respetuoso con los síntomas permanentes de la franquicia, pero es disperso, acelerado y muy gaseoso. Hay patadas voladoras, críticas a las desigualdades y a las diferencias de clase y de raza pero no existe un sólido sustento narrativo sobre Cobra Kai. Ni siquiera esa vuelta de tuerca de que el adulto se convierta en discípulo del adolescente permite justificar el regreso. Por supuesto no falta el juego de complicidad y con tono de preludio de los títulos de crédito finales. Los adictos del 'Karate kid' de los 80 no se sentirán del todo aludidos, tras muchas variaciones (también televisivas) del mismo ecosistema. Una repetición reglada en la que no faltan sus homenajes, aunque todo previsible y con sus algoritmos marciales. No hay sorpresa ni riesgo.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión