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Berta Betanzos, campeona del mundo de la clase 49er FX .
"En las cuatro veces que hemos ido a Río no hemos tenido ningún problema"
Berta Betanzos, Regatista de 49er FX

"En las cuatro veces que hemos ido a Río no hemos tenido ningún problema"

La cántabra afrontará en la ciudad brasileña los segundos Juegos de su vida, en los que quiere dar el máximo, disfrutar y "cumplir mi sueño de ganar una medalla"

Marco García Vidart

Jueves, 14 de julio 2016, 10:54

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Le tocan ahora 20 días de pruebas. De montar el barco con el que junto a su ya álter ego Tamara Echegoyen navegará en pos del oro olímpico. Berta Betanzos (Santander, 1988) ha convertido Río de Janeiro en su segunda casa en los últimos tiempos. Con esta estancia de una veintena de días, sumará ya su quinta visita a la sede olímpica. Y en las cuatro anteriores, la santanderina reconoce que no ha tenido «ningún problema» en un país de gente amable y agradable. El aluvión de noticias negativas respecto a la ciudad carioca no resta un ápice de ilusión a las vigentes campeonas del mundo de 49er FX. En Río, Berta se ha propuesto dar lo máximo, pero también «disfrutar» de la experiencia. En el horizonte de esos Juegos hay un sueño a cumplir desde niña: ganar una medalla olímpica.

¿Cómo están a un mes de los Juegos Olímpicos?

Estamos bien, con muchas ganas. Y sobre todo focalizadas en el objetivo que teníamos para estos días de entrenamiento en Río. Con ganas de llegar a los Juegos en el mejor estado posible.

Han estado en los últimos días allí. ¿Qué han entrenado?

Hemos estado diez días y nos vamos ahora otros 20. En esos diez días hemos buscado sobre todo las condiciones de poco viento en la bahía de Guanabara. Conocerla mejor. Ese era el objetivo fundamental. Y navegar con las velas nuevas. Básicamente eso. Queríamos mejorar nuestra técnica con poco viento y optimizar detalles. En los 20 días que nos quedan allí queremos juntar todas las piezas del barco que usaremos en los Juegos. Y ver si la combinación nos gusta. Decidir entre las dos posibles velas elegidas, los dos spís, las dos orzas... Tenemos una idea bastante clara de lo que vamos a utilizar, pero queremos corroborarlo. Por eso queremos probar ese material y hacernos a él, tripular el barco para que se adecúe a ese material. Se trata de que el cómputo de todas esas piezas haga el barco muy rápido. Es como montar un puzzle.

¿Cómo está la ciudad a menos un mes de los Juegos?

Nosotras hemos estado fundamentalmente en la Marina, la zona en la que se va a celebrar la competición de vela. Ha cambiado mucho desde la regata preolímpica del año pasado, a mejor. Hace un año no había restaurantes. Nada de nada. No había ni donde comprar agua ni una sombra en la que guarecerse del sol. Ahora hemos estado ya más cómodas. Tener una sombra o donde comer algo tranquilamente, se agradece. En ese sentido, han hecho algo. También hemos visto que estaban montando carpas en la mayoría de las zonas, para habilitarlas para los deportistas. Del resto de infraestructuras no sabemos nada. He oído que la villa olímpica ya estaba acabada y que tiene muy buena pinta. Pero nosotros nos vamos a quedar en un hotel en los Juegos. La villa está a una hora de ida y otra de vuelta de la Marina. Y el tráfico en Río es una locura, aunque se va a habilitar un carril especial. Pero aun así la villa olímpica está lejos, en Barra de Tijuca. Es en las afueras de Río. Habrá unos 30 kilómetros, por carreteras que no son autopistas.

La práctica totalidad de noticias que llegan sobre Río son negativas. Aguas llenas de porquería, inseguridad en las calles, protestas de policías o bomberos... Usted ha estado varias veces en estos últimos meses. ¿Hay algo positivo?

Ha habido compañeros que han tenido sustos, como Fernando Echávarri, Tara Pacheco y Santi López-Vázquez, que sufrieron un atraco. Pero nosotros, las veces que hemos ido a Río, no hemos tenido ningún problema. La gente es muy amable y agradable. Río está rodeado de favelas y todos sabemos que son problemáticas. Pero en las cuatro veces que hemos ido, no hemos tenido ningún problema. Ojalá que siga siendo así. No hemos sentido inseguridad, aunque sabes lo que hay.

¿Llegarán a tiempo los brasileños o faltará alguna cosa?

No lo sé. A nivel de infraestructuras no he visto mucho. Me sorprendería si llegaran con todo. A día de hoy, el estado de Río se ha declarado en bancarrota. Supongo que eso tenga alguna repercusión en los Juegos.

Los de este 2016 serán sus segundos Juegos Olímpicos ¿Qué ha cambiado respecto a los primeros, los de 2012 en Londres?

Por un lado, supongo que la experiencia de haber ido ya a unos Juegos. Eso lo hace diferente. A raíz de esa experiencia, los de Río los afronto no con más ganas, pero sí con ganas de hacer lo que sé hacer. En Londres, creo que no pude dar el 100% de mí y me gustaría aprovechar esta segunda oportunidad que tengo para hacerlo. Estoy con muchas ganas. Luego saldrá o no saldrá. Los meses previos a los Juegos de Londres, en los que regateaba en 470 con Tara Pacheco, fueron muy diferentes. Entonces surgieron problemas que no supimos cómo afrontar y que no nos dejaron dar nuestro 100%. Eso es lo que más pena me dio. Creo que teníamos mucha más capacidad de la que pudimos dar en ese momento. Por eso, ahora ese es el objetivo. Y también disfrutar mucho. No sabemos cuántas veces estaremos en unos Juegos Olímpicos.

El equipo que forman usted y Tamara Echegoyen suena como una de las opciones más sólidas a medalla en el equipo olímpico español de vela ¿No conseguirla sería un fracaso?

Mi sueño es conseguir una medalla olímpica. Desde que empecé en la vela esa ha sido mi ilusión. Pero muchas tripulaciones tienen el mismo objetivo y no nos lo van a poner fácil. Van a pelearlo como nosotras. También sé que hay que ser realista. Si das lo máximo de ti, creo que hay que estar orgulloso. En Londres no me satisfizo el resultado, pero en ese momento era nuestro 100%. Pero así es el deporte. La vela es muy complicada, con muchos factores y hay que controlarlos todos. A ver si en esa semana en Río podemos hacerlo. En el Mundial de Estados Unidos cumplimos el objetivo en todas las condiciones, todos los días. Vamos a intentar hacer eso en los Juegos. Cumplir cada día nuestro objetivo.

¿Cuáles serán sus principales rivales en Río? Siempre se dice que como sólo hay un barco por país, la regata olímpica es una prueba con menos nivel que un Mundial...

Lo que ocurre es que al haber sólo 20 barcos, también una buena regata vale menos. Todas las rivales buenas están muy cerca. Un resultado bueno no vale tanto como en un Mundial y un mal día sí se paga caro. Es verdad que no están todas, pero las que están van a ir a tope. Va a ser muy duro. Y también entrarán en juego tripulaciones que en un Mundial no estarían entre las favoritas. Son sólo cuatro días de regata tres pruebas por día más la medal race. Todas las que estén en cabeza van a estar muy apretadas de puntos. En cuanto a tripulaciones, Italia (Conti y Clapcich) está muy fuerte; Brasil (Grael y Kunze), también, al igual que las holandesas Bekkering y Duetz. Las suecas Ericsson y Klinga, que ganaron la prueba de la Copa del Mundo en Hyeres, van muy bien con viento ligero. Por su parte, las neozelandeses Alexandra Maloney y Molly Meech van a llegar muy bien preparadas, aunque son un poco irregulares. Y las inglesas Dobson y Ainsworth. Casi todas (risas). Va a ser una batalla difícil. Las más regulares en estos cuatro años han sido las brasileñas Martine Grael y Kahena Kunze, campeonas mundiales en Santander. Y corren en casa. Son favoritas no por jugar en casa, sino porque realmente en estos cuatro años han sido las más regulares. No se han bajado casi nunca del podio. Van muy bien preparadas Otra cosa es que la cabeza no las funcione lo bien que debería. Porque jugar en casa también es una presión añadida y son sus primeros Juegos.

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