El Mazabi y su confianza sin límites

Juegan en la casa de un equipo que no ha perdido un solo partido esta temporada y que ganó el encuentro de ida por dos puntos (28-30). No estará su capitán, Gastón Moreno, que se volvió a partir la cara -literal- el domingo en San Román tras volver de la misma lesión. Y además, se viajará en el día, porque no hay dinero para gastar en una noche de hotel y así estén más descansados los jugadores. Y a pesar de todo eso, ahí va un vaticinio. «Si llegamos vivos al descanso, dos puntos por arriba o por abajo, ganamos y somos campeones». El augurio es de Tristán Mozimán, el entrenador de un Mazabi Santander Independiente que hoy, desde las 17.00 horas, juega en Las Terrazas ante el Alcobendas el duelo final de la División de Honor B. Quien lo supere, directo a División de Honor y quien pierda, a promocionar ante el Pozuelo en una eliminatoria también a doble partido.

La confianza en sí mismos de todos los integrantes de esa plantilla verde no tiene límites. Y bien que lo demostraron el pasado domingo en San Román. Un Mazabi contra las cuerdas se revolvió en la segunda parte y, quizá por primera vez en la temporada hizo que el Alcobendas, el único favorito para el ascenso y que durante el curso ha propinado palizas a diestro y siniestro, se tambalease y fuese por debajo en el marcador. «Encontraron un equipo que les plantó cara y les superamos en algunos aspectos del encuentro», añade el Chucho Mozimán. «Eso no se lo esperaban».

Aunque el Alcobendas reaccionó para ganar el partido por ese 28-30, los santanderinos cumplieron el primer objetivo que se habían marcado. «Llegar vivos a Madrid». El encuentro de ida dejó sensaciones positivas. «El equipo entendió el planteamiento que propusimos los entrenadores. Y lo ejecutó muy bien. Porque una cosa es cómo lo veamos y otra, que los jugadores crean en ello y lo ejecuten. Por otro lado, acabamos el partido con muchos rugbiers criados en la cantera». Entre lo que no le gustó al 'Chucho', destaca algo sobre todo. «El arbitraje. Condicionó el partido. Al '10' del Alcobendas le tenía que haber mostrado roja por una infracción burda sobre Jabase. Y al final del partido el señor, José Luis Murillo, me lo reconoció. Eso, y que teníamos que haber sacado tres o cuatro golpes de castigo más en las melés, y dos de ellos se hubiesen saldado con puntos, además de haberle costado alguna amarilla al Alcobendas».

Aún así, Mozimán reconoce que la cosa está difícil. Por todos esos factores en contra que hay para el partido de hoy, además de la calidad del rival. «Pero esas adversidades nos hacen más fuertes». El Alcobendas sigue siendo el gran favorito para el ascenso, pero el Mazabi le mostró el pasado domingo que pondrá muy difícil el partido. Y ese margen de apenas dos puntos invita a soñar con todo. Si gana por tres, el Mazabi retornará dos temporadas después a la División de Honor en un ejercicio de confianza sin límites. Porque casi nadie creía, allá a principios de temporada, que el equipo pudiese estar en una situación como la de hoy. A tres puntos de la gloria.