La España de Diego Botín se queda sin aire en Ginebra
La falta de viento marca una jornada en la que 'Los Gallos', que pilotael santanderino, son novenos a seis puntos del podio del Rolex SailGP Championship
Los catamaranes F50 tienen una artesanía de diseño única y representan la ingeniería de vanguardia: están diseñados para alzarse por encima del agua mediante hidrodeslizadores, ... reduciendo la resistencia y aumentado la velocidad drásticamente, a más de 100 kilómetros por hora. Pero si no hay viento no hay tecnología que valga, la cosa va mucho más despacio. Y eso es justamente lo que ocurrió ayer en el Lago Lemán en Ginebra, donde se disputa el Rolex SailGP Championship en que participa el cántabro Diego Botón como piloto de 'Los Gallos', el barco español.
España tendrá que buscar la heroica y encomendarse hoy al viento para conservar sus opciones de luchar por la final en Ginebra y, por consiguiente, por la Gran Final. Tras un primer día de carreras marcado por las dificultades para foilear, 'Los Gallos' son novenos en la tabla provisional, a seis puntos de la tercera clasificada, Suiza. El viento apenas sopló en el lago Lemán, y por el bien del equipo español, lo mejor es que no desaparezca del todo hoy, porque las carreras quedarían canceladas y con esa novena plaza, llegaría a Cádiz más muerto que vivo.
'Los Gallos' fueron a remolque durante toda la jornada. En la primera manga del día, el equipo pilotado por el santanderino salió muy atrás, en novena posición. Acostumbrado a realizar buenas remontadas, las condiciones atmosféricas no permitieron en ningún momento que pudiese luchar por las primeras plazas. Pozo de viento aquí, pozo de viento allá, el campo de regatas hizo estragos en las esperanzas españolas.
La segunda y tercera carrera fueron un calco de la primera, salvo que, esta vez, el equipo español no pudo sacar provecho de dos buenas salidas y tuvo que conformarse con las posiciones intermedias. Por suerte, salvo Australia y Gran Bretaña, el resto de países sufrió el mismo destino que España. «Ha sido un día de competición en el que hemos pagado dos errores que hemos tenido en la primera salida y en la segunda carrera. Tenemos que ver la forma de mejorar para mañana si queremos tener opciones de entrar en la final», explicaba Diego Botín al término de la jornada.
Más dificultades
Además, de la falta de viento y los errores, la tripulación española se enfrentó a otro hándicap añadido. El aire, demasiado ligero, les forzó a reducir el número de tripulantes.De los seis que habitualmente se hacen al mar, se pasó a solo tres. Diego Botín como piloto, Florian Trittel como trimmer de ala y Joel Rodríguez como controlador de vuelo. Algo que suponía doblar la exigencia. A 'Los Gallos' no les queda otra que tirar hoy de épica para recortar la distancia que les separa de la final. El equipo español es ahora mismo noveno con 12 puntos, mientras que Suiza cierra el podio provisional con 18. Gran Bretaña, con 23 puntos, y Australia, con 25, son prácticamente inalcanzables.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión