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Anina Anyway, durante su viaje por los Alpes Dolomitas el pasado verano.
La soledad de la montaña como bálsamo para la mente

La soledad de la montaña como bálsamo para la mente

La gijonesa Anina Anyway rememora su último viaje en solitario atravesando los Alpes Dolomitas

L. RAMOS

Cangas de Onís

Viernes, 15 de marzo 2019, 19:45

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En la inmesidad de la montaña, acompañada solamente por sus pensamientos, Ana Inés López se encontró a sí misma. Fue hace tres años y, desde entonces, esta gijonesa más conocida como Anina Anyway, ya no pudo dejar de emprender aventuras en solitario por diferentes sistemas montañosos. La última la llevó el pasado verano a atravesar los Alpes Dolomitas por la ruta Alta Via 1. De ese viaje, pero sobre todo de cómo la soledad de la montaña puede llegar a ser un verdadero bálsamo para la mente, habló esta semana Anina en el marco de la XXII Semana de la Montaña de Cangas de Onís.

Todo comenzó, recordó la montañera, en 2011 haciendo el Camino de Santiago. «Me di cuenta de que me encanta esa vida en continuo movimiento», señaló. Unos años después, en 2015, emprendió, junto a su entonces pareja, una aventura de mayor envergadura que, además, le sirvió de inspiración para escribir un libro, 'Expedición Cabo Norte', publicado por la editorial Desnivel. «Pasamos cinco meses viajando desde Gijón al Cabo Norte (Noruega) en bici y aprendí mucho de supervivencia y acampada, enamorándome de la vida sin techo», relató.

Con estos antecedentes, hace tres años llegó, por fin, su primer viaje en solitario «serio». «Lo del Cabo Norte me dio mucha confianza y me lancé a viajar sola y no de refugio en refugio, sino con mi 'mochilota-casa' a cuestas», indicó Anina. En aquella ocasión se decantó por los Pirineos y la experiencia, reconocía ayer, le cambió la vida. «Me di cuenta de lo mucho que me gustaba, de cómo aventurarme en la montaña me hace sentir fuerte, me empodera», aseveró.

La montañera anima a hombres y mujeres a lanzarse a este tipo de aventuras en plena naturaleza que «te resetean y empoderan

Este tipo de aventuras, indicó, «te ponen en situaciones totalmente diferentes a lo que vives día a día, te ayudan a conocerte mejor y a darte cuenta de que eres capaz de hacer cosas que jamas creerías». Por este motivo, Anina Anyway aprovecha siempre que puede para animar a hombres y mujeres a experimentar un viaje en solitario al corazón de la naturaleza al menos una vez en la vida. «Lo necesito, me resetea, me sirve para ordenar mis prioridades y reconectarme con la vida, pues cuando tienes la posibilidad de estar en completa soledad y sin miles de distracciones alrededor te sorprendes pensando en cosas que no imaginabas», indicó.

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Poco más de 30 kilómetros, eso era todo. . Sobre la carretera, solitaria y silenciosa, dos ciclistas imprimían movimiento a un paisaje boreal y monótono. Junto a ellos, una perra sin cola caminaba con paso ligero. . Las cadenas de las bicicletas y las pisadas del animal murmuraban una especie de hechizo, el único sonido audible cuando hombre y mujer se quedaban callados, absortos. . Y aunque en aquellos momentos podía parecer que pedaleaban como autómatas, llevados por la inercia de 148 días de marcha, lo que sucedía en su interior no puede narrarse en un libro. . La desbordada mezcla de sentimientos, sensaciones e ideas incluso a ellos llegaría a resultarles borrosa e inalcanzable cuando pasara. . Poco tiempo después, el recuerdo de aquel último tramo recorriendo la Isla Estéril de sur a norte, desde Honnisvåg hasta el final, sería parcialmente irrecuperable. . Tres horas eran el tiempo estimado. . Tres horas para que todo acabase y volviese a empezar, para descubrir la realidad tras el ideal que tanto habían perseguido, para escribir en la última página un final feliz. . Tres horas que se derretían, se alargaban, se distorsionaban. . Pablo era un manojo de nervios, presa fácil para la impaciencia; cientos de flashes y pensamientos emergían del fondo de su memoria como un géiser ardiendo. . Ana era contradicción, queriendo y no queriendo llegar, deslizándose sobre la nostalgia como quien patina en una hermosa danza sobre el hielo. . Y Hippie... bueno, Hippie era Hippie: ella podía mostrar más entusiasmo ante una piedra que ante aquel instante, cuya gloria quedaba reservada para los humanos. . . 📚 De ‘Expedición Cabo Norte. Un viaje real hacia el interior del círculo polar’, editado por @edicionesdesnivel . 🎁 Declarado por la revista Forbes libro que más amor transmite del mundo cuando lo regalas con un lacito cuqui . #libros #libro #leer #expedicioncabonorte #viajar #cicloturismo #bicicleta #cicloviajeros #viajarconperro #librosrecomendados #cabonorte #aventura #noruega #2015 #viajarenpareja #carretera

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Pese a que hasta ahora nunca tuvo ningún problema durante sus viajes, la gijonesa reconoció que sigue llamando la atención ver a una mujer hacer sola este tipo de viajes. «A mi madre siempre le digo que hay más posibilidad de que me pase algo malo volviendo a casa a las cinco de la mañana en Gijón que estando en la montaña sola, rodeada tan solo de ovejas», manifestó, e indicó que aprovecha sus redes sociales y sus ponencias para animar a las mujeres que siempre desearon hacer este tipo de viajes a dar el paso. «No podemos dejar de hacer cosas por miedo», aseveró.

Actualmente, Anina se encuentra preparando su próximo libro, 'La mujer montaña', donde abordará lo que suponen los viajes en solitario y cómo a ella le cambiaron la vida.

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