UGT y CCOO dudan del diálogo social con el Gobierno: «Está siendo menospreciado y es inútil e improductivo»
Los dirigentes sindicales instan al bipartito a retomar la negociación con interés porque, si no, convocarán movilizaciones
El Gobierno de Cantabria «está menospreciando» el diálogo que mantiene con los agentes sociales. Así lo creen Mariano Carmona y Carlos Sánchez, secretarios generales de UGT y CCOO, respectivamente, que han hecho público «su desilusión y su descontento» tras la reunión de la comisión permanente del diálogo social que tuvo lugar ayer, martes. Para los sindicalistas, este foro es un órgano esencial de negociación. Pero desde el pasado abril -cuando firmaron con el Ejecutivo un plan de choque contra el covid-19 en Cantabria- «todas las reuniones han sido meramente informativas, carentes de contenido, improductivas e inútiles si se trata es de resolver los problemas de la clase trabajadora y de las empresas». Por este motivo, han instado al Ejecutivo a retomar este diálogo con interés. De lo contrario, avisan, convocarán movilizaciones.
En un comunicado hecho público hoy, Carmona y Sánchez recuerdan que querían haber tratado en la citada comisión los Presupuestos Generales para 2021, pero no se les ha convocado hasta que las cuentas y la Ley de Acompañamiento estaban aprobadas, lo que supone «un grave quebranto a la confianza» del diálogo social.
Para Mariano Carmona, secretario general de UGT Cantabria, en la reunión del martes se ha evidenciado «la fragilidad en la que se encuentra» este foro. «Hemos hecho un repaso de los últimos meses, hemos hablado de los presupuestos, que no se han tratado en este órgano, hemos criticado la modificación en los presupuestos de algunos acuerdos que habíamos alcanzado y hemos incidido en algunas leyes, como la de agilización de los trámites administrativos». Además, sindicatos y patronal «hemos anunciado que no designaremos representantes para el Consejo Económico y Social (CES)» ya que se ha dado cabida en el mismo al sindicato USO pese a que estas organizaciones estiman que no le corresponde debido a su representatividad general en la región. Este asunto ha generado un conflicto entre las centrales mayoritarias y el Gobierno que ya dura meses.
Carlos Sánchez, su homólogo en CC OO ha considerado que el Gobierno se ha dedicado a utilizar este foro «para simular un aparente proceso de negociación con empresarios y sindicatos, cuando la realidad ha sido la convocatoria de reuniones para cubrir el expediente, sin contenido sustantivo que solo han servido para perder el tiempo y marear la perdiz. El Gobierno Regional, en el marco del covid-19 y parapetado detrás del Boletín Oficial, ha repartido durante estos últimos meses una suerte de ayudas y subvenciones tan desconocidas por empresarios y sindicatos como inútiles para la finalidad que deberían servir como confirman los malos datos de empleo, de brecha social, de desigualdad y de crisis económica».
Para los dos sindicatos, estos presupuestos, «que dan la espalda a las reivindicaciones de los trabajadores, abren un camino de incertidumbre para el diálogo social en 2021 y pueden suponer la constatación de su fracaso por inutilidad porque, además, el acuerdo covid-19 firmado en abril aún se hace esperar».
Ambos sindicatos han subrayado que si se mantiene el modelo actual, que es «un diálogo de sordos, más vale que demos por finalizado el diálogo social, asumiendo cada parte la responsabilidad que le corresponde. Si el Gobierno decide enterrarlo, los sindicatos estaremos en la obligación de movilizar a los trabajadores de Cantabria para exigir medidas que frenen la destrucción de empleo, el empleo precario y el avance de la pobreza y la desigualdad social», ha anunciado Sánchez.
Carmona ha subrayado que «la aplicación del primer acuerdo del diálogo social no ha llegado a todos los trabajadores» pero ha recalcado que «justo enfrente vemos todos los días como se hace una dispensa millonaria de dinero para muchas empresas que no sabemos si lo necesitan o no». «Lo que queremos es que esa mesa sirva para llegar a medidas concretas que afecten a los trabajadores, a las empresas y garanticen un reparto adecuado del dinero público», ha concluido Carmona.
Segundo acuerdo del diálogo social
Los sindicatos quieren que este foro sirva para alcanzar un nuevo gran acuerdo social regional y para ello han presentado una propuesta a la que habría que dotar de casi 20 millones de euros, que incluye un Plan de Choque por el Empleo y un plan de medidas urgentes para personas trabajadoras afectadas por ERTE, reducción de jornada o excedencia, así como una línea de apoyo a empresas.
En el Plan de Choque por el Empleo querrían la convocatoria extraordinaria del programa de Corporaciones Locales, donde el Servicio Cántabro de Empleo financiará parte de los costes salariales y de Seguridad Social de los trabajadores hasta un importe máximo de 10.000 euros por cada contrato a jornada completa por un periodo de seis meses. La cifra a manejar sería de 10 millones de euros.
También se recogen ayudas a la contratación de personas desempleadas para sustituir a trabajadores por causa de contagio, aislamiento o aquellas que tengan a alguna persona dependiente o menor en dichas circunstancias. Además, se contemplan subvenciones para contratos temporales iniciales con una duración mínima de un año, para contrataciones indefinidas iniciales y conversiones de temporales a indefinidos, para primeras contrataciones por parte de autónomos así como ayudas a los incrementos de jornada.
El segundo bloque se refiere a un plan de medidas urgentes para personas trabajadoras afectadas por ERTE, reducción de jornada o excedencia desde el 1 de julio de 2020 a 31 de enero de 2021, con ayudas de 10 euros por día con una duración máxima de 90 jornadas. Por último, el tercer bloque sería una línea de apoyo a empresas para el primer semestre de 2021 que incluye un complemento a la exoneración de cuotas de la Seguridad Social por contingencias comunes, a partir del 50% de la plantilla anterior al estado de alarma y para empresas que no superen los 100 trabajadores.