Multinacional del tejido

El origen de la empresa es indiano: fue fundada en 1923 por los hermanos González Cossío en Cabezón de la Sal, lejos de los grandes mercados, y funcionaba produciendo prácticamente para determinados compradores barceloneses, como los Serra. Durante la posguerra y la autarquía se produjo una grave descapitalización en el tejido industrial español. Esta situación se frenaría a partir de 1959 con el Plan de Estabilización, que aplicó medidas como la reforma fiscal, la estabilización de la peseta, el fomento de la inversión extranjera y la elevación de los tipos de interés. La empresa contó además con un directivo que supo leer perfectamente su momento histórico.

La importancia y expansión de Textil Santanderina tienen un nombre propio: el ingeniero técnico textil Juan María Parés Serra (1931-2015). Natural de Puigreig (Barcelona), fue destinado a Cabezón de la Sal en 1959, al hacerse cargo de la Textil el grupo catalán Cuitó y Cía. Parés fue primero director y luego consejero delegado; en los años ochenta, al retirarse progresivamente del accionariado los Serra, se hizo con la mayor parte de la empresa, en cuya dirección ha continuado su hijo Juan Parés Boj.

Entre las actuaciones de Parés al frente de la empresa, adquirió moderna maquinaria de hilado y amplió la cartera de clientes. Diversificó la producción hacia la ropa laboral, los uniformes militares (para ejércitos de todo el mundo) y el denominado 'denim' o tela vaquera, que ha dado justa fama histórica a la factoría y una amplia capacidad expansiva.

Los años setenta y ochenta fueron fundamentalmente críticos para el sector textil en España, hasta el punto de que numerosas empresas importantes se vieron abocadas a la desaparición. Parés desarrolló una importante actividad empresarial: discreto y dialogante, mantuvo contacto con los sucesivos gobiernos en el proceso de reconversión del sector, negoció con los sindicatos la redacción de convenios nacionales y presidió la patronal nacional de la industria procesadora de algodón (AITPA). Alcanzó un gran prestigio en el sector e incluso diferentes gobiernos, tanto nacionales como autonómicos, solicitaron su experiencia para sacar a flote a diversas empresas que se encontraban en situación calamitosa; la intervención de Parés se verificó en algunos casos, pero no en otros, ya que realmente algunas empresas públicas precisaban una reconversión profunda. Parés fue nombrado hijo adoptivo de Cabezón de la Sal (1982), recibió la Medalla de Oro del municipio (2006) y fue presidente del Consejo Social de la Universidad de Cantabria. Como tantos empresarios de su época, tuvo muy claro que las empresas deben devolver a la sociedad parte de lo que esta les ha dado y en este sentido hay que destacar la colaboración de Textil Santanderina en diversas obras sociales y el patrocinio deportivo del Voley Textil o la SD Textil Escudo.

Parés inició en la Textil Santanderina una política de adquisición de otras empresas textiles, como Galicia Textil, Gerona Textil, Vica Industrial, Acabados del Vallés, Montsiá y Grupo Esteve. El holding tiene en España siete hiladoras, tres tejedurías y dos plantas de acabado, con una plantilla de unos setecientos trabajadores en 2019. Además, controla filiales en diversos países que facilitan el intercambio internacional, hasta el punto de exportar aproximadamente el 70% de su producción hacia más de quince países. El llamado «perímetro de consolidación» del grupo abarca Santex Textile, de China; Bellisima Apparels, de Bangladesh; TS do Brasil, de Sao Paulo; Desarrollo y Comercialización de Artículos Textiles (Desco), de Madrid; y Monretex, Acabats del Bages e Inada, de Barcelona. Su proceso de expansión ha contribuido a variar su concepto empresarial: la fabricación se completa con un servicio al cliente que incluye el diseño y la distribución nacional e internacional de los productos. Parte de las prendas de Inditex, H&M, Mango, Cortefiel o Pepe Jeans son diseñadas en Ontoria.

Parés Boj explica así la orientación hacia la demanda: «Nuestra estrategia es mantener el nombre con el que somos mundialmente famosos dentro del sector. Así, en Estados Unidos nos compran firmas como Gap, Nostrum, etcétera, mientras que en Europa lo hacen, entre otras, H&M, C&A o Marks & Spencer. Como hemos de adecuarnos al estilo, las cantidades y los plazos de entrega de cada cliente, hemos creado una estructura empresarial muy flexible, basada en la diversificación mediante pequeños equipos con conocimientos específicos sobre cada ámbito y sobre las exigencias de cada una de las empresas que abastecemos. Nosotros les ofrecemos ideas y diseños y les resolvemos toda la logística; y lo hacemos con una rapidez excepcional, porque en 40 días somos capaces de situar las prendas necesarias en el punto final».

A partir de 2020, con la mayor presión en los precios por parte de las marcas y la reducción de las compras, la producción se ha reorientado hacia los tejidos técnicos. Santanderina Group forma parte de Texfor, asociación que agrupa las manufactureras del sector textil dedicadas a la lana, la seda, el algodón y los acabadores, y ha sido reconocida por su compromiso social y medioambiental: con un Plan de Transición Verde con vistas a 2030, fabrica con fibras Seaqual Initiative, a partir de residuos plásticos del mar reciclados, y ha participado en la Carta de la Industria de la Moda por el Cambio Climático de la Cumbre del Clima de 2019.