El nuevo Comité Ejecutivo de la Cámara de Comercio despide a Jesús Tortosa como director
Las partes cerraron ayer un acuerdo en el Orecla para una salida basada en la pérdida de confianza tras su actuación en el pasado proceso electoral
La nueva etapa abierta en la Cámara de Comercio de Cantabria tras la celebración del proceso electoral y el nombramiento de Tomás Dasgoas como ... nuevo presidente en sustitución de Modesto Piñeiro igualmente ha llevado a otros cambios en la cúpula de la entidad. El Comité Ejecutivo resultante, con mayoría de representantes de CEOE-Cepyme Cantabria y la Federación de Comercio (Coercán), acordó a finales de agosto el despido del hasta ahora director, Jesús Tortosa.
Las partes alcanzaron ayer un acuerdo definitivo para la salida de Tortosa en el Organismo de Resolución Extrajudicial de Conflictos Laborales (Orecla), aunque desde comienzos de mes el directivo ya había abandonando sus funciones. El despido se ha calificado como improcedente. Tortosa, consultado por este periódico, declinó hacer declaraciones. Fuentes de la Cámara apuntan a la firma de un acuerdo de confidencialidad para cerrar la relación entre las partes.
Lo cierto es que los nuevos responsables camerales han aducido pérdida de confianza para adoptar la decisión. No en vano, Tortosa se posicionó durante las elecciones y se mostró crítico con la actitud de CEOE y Coercán para asumir el control de la organización. Como principal detonante, la carta remitida en junio por el director a la Junta Directiva de la patronal cuando todavía no estaba claro el desenlace final del proceso después de que ni Manuel Huerta ni Antonio Cornadó fueran elegidos presidentes.
En aquella misiva reprobaba la actitud de los responsables de la confederación.
El nuevo equipo liderado por Tomás Dasgoas ya tiene en mente el perfil que pueda relevar al ya exdirectivo
De ahí que los mandatarios surgidos del proceso electoral sostuvieron que esa carta, de la que El Diario se hizo eco, ocasionaba un grave perjuicio tanto para la Cámara como para los empresarios que conforman el Pleno. De hecho, la calificación inicial de la extinción laboral pasaba por un despido disciplinario.
Tortosa, especializado en sostenibilidad ambiental y comportamiento ético en el mundo empresarial, fue partícipe de la transformación de la Cámara de Comercio en el último lustro, en el que la organización junto a Piñeiro y su Ejecutiva, logró dar la vuelta a una complicada situación financiera que a punto estuvo de acabar en la venta de la sede de Santander.
Como reflejo de esa evolución, la organización ha saltado de presupuestos de 1,3 millones a más de cuatro millones, cifras que no se alcanzaban siquiera con el recurso cameral hasta 2010. Tras las diferentes reestructuraciones y salidas en el ámbito laboral, la plantilla ha pasado de 13 personas a 32 trabajadores.
Dasgoas y su equipo están a la espera de concretar el perfil que pueda relevar al ya exdirector. Los nuevos mandatarios ya explicaron públicamente su voluntad de modernizar la Cámara, así como favorecer una mayor coordinación con el resto de asociaciones corporativas.
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