Bloqueantes mentales

Personalmente, llevo un tiempo en el que tenía que decidir ante dos alternativas; o bien inmunizarme frente a los mensajes que recibía o bien bloquearlos y he decidido bloquearlos, igual que hacemos con un perfil en una red social o con alguien a quien no queremos escuchar. Mi decisión final ha sido la de aislarme de todas las noticias que tengan que ver con el independentismo, con las políticas que se desarrollan en relación con el independentismo, con todo lo que tenga que ver con la amnistía y con todo tipo de información sesgada destinada a justificar lo injustificable por parte de cualquier político en estos ámbitos. La verdad es que vivo mucho más tranquilo sin la crispación que todo esto estaba provocando en mí y en el conjunto de la sociedad. En cierto sentido lo que he conseguido es una mayor dosis de paz y tranquilidad en mi vida, pues lo que yo pueda sentir ante todos estos mensajes no va a tener ninguna utilidad práctica y el devenir será el que tenga que ser. Además como pienso que ni el dolor ni la rabia ni la ira no se deben de sentir con carácter gratuito he decidido aislarme de este tipo de noticias, lo cual recomiendo; considero que es una buena terapia para los momentos actuales.

Lamentablemente los políticos, cuando son políticos y no son gobernantes, es decir cuando lo que aspiran es a gobernar caiga quien caiga, el destanteo y el desasosiego que provocan en la sociedad, en la economía, en la inversión o en el empleo, les da igual, porque el fin justifica los medios y, además, como saben que la memoria de los ciudadanos es frágil y las hemerotecas cuesta esfuerzo llegar a ellas de nuevo, les trae al pairo lo que provoquen porque saben que no va a tener ninguna consecuencia limitante para ellos en el futuro.

Este tipo de bloqueantes vienen muy bien para impedir que mensajes castrantes, repetitivos o cansinos dejen de ocupar espacio en nuestro cerebro y lo liberen para pensar en cosas realmente importantes como quiénes son personas valiosas para nosotros, qué es lo que tenemos que mejorar en nuestras vidas personales y profesionales o nuestro grado de satisfacción general ante la vida que tenemos, todo ello mucho más importante que esos impactos que solo son útiles para quien los lanza y no para todos los que lo recibimos. Dejar de leer, ver y escuchar este tipo de noticias facilita la tranquilidad de vivir en la ignorancia haciendo oídos sordos a palabras necias.