Hoy, 12 de abril, Día de la Atención Primaria (AP), desde la Sociedad Científica de Enfermería Familiar y Comunitaria Cántabra (SCECC) queremos rendir homenaje a ... todos aquellos profesionales que trabajan en este sector, muy especialmente a las enfermeras, cuya labor es fundamental para cuidar nuestra salud y promover el bienestar.
Las enfermeras de Atención Primaria no solo trabajan en los centros de salud, también lo hacen en colegios, comunidades y hogares, ofreciendo en todos y cada uno una atención integral. Nos ayudan desde que somos niños con revisiones del niño sano, nos vacunan, nos guían en el control de enfermedades crónicas como la diabetes y la hipertensión, y organizan talleres educativos y actividades comunitarias tales como caminatas saludables. Su objetivo es prevenir enfermedades, fomentar elecciones saludables y acompañar a las personas en su camino hacia el autocuidado.
A pesar de su importancia, muchas personas no saben que tienen una enfermera asignada en su centro de salud, algo que podría aclararse fácilmente incluyendo su nombre en la tarjeta sanitaria y que lleva pendiente desde la huelga de 2019. Este gesto fortalecería su conexión con los pacientes y visibilizaría su trabajo.
Es esencial también aumentar el número de enfermeras en los equipos y apoyar actividades comunitarias que beneficien a toda la población. Más allá de la gestión diaria, como la organización de horarios y vacaciones, es urgente pensar a largo plazo. Necesitamos crear una Cartera de Servicios Comunitarios, tal y como propone el Ministerio de Sanidad. Este cambio permitiría que toda la población de Cantabria acceda a programas de promoción de la salud, reduciendo las desigualdades.
El Ministerio de Sanidad, en su Plan de Reforma de la Atención Primaria, tiene como uno de sus objetivos consolidar el rol de la enfermera especialista en Enfermería Familiar y Comunitaria, un enfoque ya desarrollado en otras comunidades autónomas. Es fundamental que Cantabria se sume a estos avances para garantizar un sistema sanitario fuerte y equitativo.
La Atención Primaria es la base de nuestro sistema sanitario, el primer contacto que tienen los ciudadanos con la salud pública. Las enfermeras de familia y comunitaria son esenciales, habida cuenta de que construyen relaciones de confianza con los pacientes que aseguran una atención personalizada y más humana.
Sin embargo, el cuidado que ofrecen puede verse afectado por cargas laborales excesivas y sistemas administrativos que dificultan su trabajo. Para atendernos adecuadamente, las enfermeras necesitan tiempo, estabilidad y condiciones laborales justas. El cuidado no es una simple estadística, sino una interacción humana que requiere compromiso y profesionalidad.
Es imprescindible proteger y valorar el trabajo que realizan las enfermeras, y es necesario garantizar que tengan voz en las decisiones y apoyar su labor para que sigan siendo pilares de nuestra salud. Estas profesionales dedican su esfuerzo diario a reducir desigualdades y guiar a la población hacia elecciones más saludables. Su dedicación merece nuestro reconocimiento y apoyo.
Esta tribuna esta firmada por los integrantes de la junta directiva de la Sociedad Científica de Enfermería Familiar y Comunitaria Cántabra (SCECC): Rosa Merino Barreras (presidenta); Marta Martín Herrero (vicepresidenta); Eva Terán Santana (secretaria); José Álvarez Cano (tesorero); Olga Corral Rodríguez; María Ángeles López Saiz, Isamar Fraile López y Laura Martínez Benavides (vocales).
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