Acaba este martes la búsqueda del pescador desaparecido el sábado en Suances, sin rastro

Concluye el martes sin que los servicios de emergencia hayan encontrado a José Antonio Santamaría, el pescador de 36 años, vecino de Polanco, que se encuentra desaparecido desde el pasado sábado, cuando su embarcación fue hallada a la deriva frente a la costa de Suances. A bordo de esta se localizaron cañas de pescar lanzadas al agua y dos bonitos, pero ni rastro del patrón.

Las tareas de rastreo se reanudaron sobre las 06.45 de esta mañana y han concluido al filo de las 22.00 horas. Los medios marítimos se centraron durante todo el día en el área costera entre Suances y Santander. La patrullera 'Río Trueba' de la Guardia Civil inició el operativo, y se fueron sumando luego otros. También los aéreos, como el 'Cuco' de la Guardia Civil y el helicóptero 'Helimer 205', de Salvamento Marítimo, con nuevas inspecciones aéreas. Ayer, el rastreo se extendió hasta las 20.00 horas sin encontrar novedades.

Según fuentes de la Guardia Civil, el último avistamiento de José Antonio se produjo el sábado por la tarde, cuando los tripulantes del barco de recreo 'Vima V' lo vieron a unos cien metros de distancia. Uno de ellos, Juan Alba, recuerda que les llamó la atención su comportamiento: «Estaba solo, y lo vimos agacharse a coger agua del mar con un cubo rojo de goma. No es lo habitual; lo normal es usar una bomba o echar un cabo al cubo para no correr riesgos».

Este detalle no ha pasado desapercibido para los investigadores, ya que en el entorno pesquero se considera peligroso manipular agua manualmente en cubierta, especialmente en solitario y con condiciones de oleaje. Además, los familiares del desaparecido han informado a la Guardia Civil de que el pescador no sabía nadar.

Su embarcación fue remolcada hasta la base de la Guardia Civil en el Barrio Pesquero de Santander, donde permanece bajo custodia. Allí, según testigos, se comentaba lo inusual del caso: «No es normal salir solo a bonitos, aunque tengas experiencia. Un golpe de mar o un mal paso puede ser fatal, especialmente si no puedes pedir ayuda», señalaban pescadores veteranos.

Hasta ahora, no se ha encontrado ningún indicio claro sobre el paradero de Santamaría, lo que mantiene la incertidumbre en su entorno familiar y entre la comunidad pesquera local.

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