Tres jóvenes de Castro limpian los restos del botellón en la zona de la Atalaya
Recogieron de madrugada toda la basura que encontraron en la zona: más de 30 bolsas que llenaron de botellas y vasos
SAMIRA HIDALGO
Miércoles, 25 de agosto 2021, 06:59
La práctica del botellón se intensifica tras la anulación del toque de queda en Castro Urdiales, algo que se hace notar por el estado en ... el que quedan algunas de las zonas frecuentadas para el consumo de alcohol en la calle, llenas de residuos plásticos. Conscientes del problema medioambiental que estas conductas generan, tres jóvenes castreños de 16 años, decidieron recoger los vasos y las botellas que el pasado sábado inundaban la zona de la Atalaya, después de que los asistentes abandonaran el lugar para continuar con la fiesta en otro sitio. «Nos parece fatal que se deje todo tirado después de hacer botellón», afirmó Sergio Ruiz, uno de los promotores espontáneos de la iniciativa, junto a Sandra Rus y Haizea Bayón, que recogieron más de 30 bolsas con residuos.
«Los fines de semana se suele ir a la Atalaya y sobre las dos de la madrugada se empieza a ir la gente. Nosotros nos íbamos a marchar, pero nos giramos y vimos que estaba todo sucio, con bolsas, botellas y vasos tirados por el suelo. No es normal, es contaminar a lo tonto. Les dije a mis amigas si me ayudaban a limpiar un poco para que no se cayese toda esa basura al mar, que es donde nos bañamos, y dejamos apartadas las bolsas llenas de basura para que el viento no las llevase al agua», explicó este joven, contando que podía haber en esa zona unas 300 personas haciendo botellón. No era el primer fin de semana que hacían algo similar.
«La gente puede salir de fiesta siempre y cuando no haga de la calle un vertedero», añadía su amiga Sandra Rus, que rompía una lanza por los jóvenes. «No todos somos causantes, pero pagamos las consecuencias». «Nuestro pueblo es nuestro hogar y tenemos que cuidarlo», añadía Haizea Bayón, la tercera jovenque arrimó el hombro para recoger los restos del botellón. «No hay excusa para no recoger la basura que generamos», insistió.
«La gente puede salir de fiesta, siempre y cuando no haga de la calle un vertedero. No todos somos causantes, pero pagamos las consecuencias»
Sandra Rus - Vecina de Castro Urdiales
«No nos hace mucha gracia recoger, pero creemos que es mejor hacerlo que dejar toda esa basura tirada para que después llegue al mar»
Sergio Ruiz - Vecino de Castro Urdiales
«Nuestro pueblo es nuestro hogar y tenemos que cuidarlo. No estamos exentos y no hay excusa para no recoger la basura que generamos»
Haizea Bayón - Vecina de Castro Urdiales
Según los jóvenes, el pasado fin de semana la presencia de gente y residuos había sido «brutal». Por ello, animaban a concienciar respecto a la recogida de residuos «porque es un problema que nos afecta a todos».
Difícil de controlar
Por su parte, el concejal de Medio Ambiente, José Mari Liendo, quiso agradecer el comportamiento de estos jóvenes por «ir en contra de la actitud negativa de una parte de la población». «No se deberían dar este tipo de situaciones, pero, una vez que se dan, no debería costar nada recoger los residuos que cada uno genera», matizó, indicando que el volumen de personas en Castro está en estos momentos «sobredimensionado y que los focos en los que se hace botellón son tantos que «difícilmente se puede controlar esta práctica». «Lo deseable sería abrir expedientes sancionadores a esas personas, jóvenes y no tan jóvenes», opinó.
Para el edil, dejar los residuos tirados en el entorno genera «problemas graves» en la limpieza de la ciudad, lo que «perjudica» la imagen que se proyecta a vecinos y visitantes, además de ser un «quebranto» para el servicio de limpieza.
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