«Esto ya no es una costera»
Laredo ha comercializado en la lonja 350 toneladas de este pescado, a falta de contabilizar los barcos de artes fijas que están estirando la pesca unos días más
La Cofradía de Laredo ha calificado de «miseria» la costera de verdel que se está desarrollando este año, porque con ella ya no solucionan la mitad de la facturación de todo el año, como sí se hacía antaño. En esta ocasión, los barcos de cerco y artes fijas de Laredo han conseguido comercializar en la lonja pejina unas 350 toneladas, en la anterior costera se capturaron 989 toneladas.
«Ya no se puede llamar a esto una costera de nada, es muy frustante verlos pasar por delante y no poder pescarlos», explica Cesar Nates patrón mayor de la Cofradía de San Martín de Laredo. A pesar de los esfuerzos por poner de moda el verdel, con la celebración de jornadas como el día en honor a este pescado, que organiza la Cofradía, el desánimo pesa en la flota por la escasez de la cuota. «Antes del verdel vivíamos todos, podía suponer el 50 o 60% de la facturación de todo el año», explica.
Los pescaderos de cerco con sede en Laredo apenas han estado «4 días» en el mar, mientras que la pequeña flota de artes fijas «lo está estirando un poco más y se ha quedado 10 días como mucho», dice Nates.
El patrón se muestra molesto con los recortes que vienen de Europa, pero también con el retraso en tomar decisiones en Madrid, para ampliar la cuota como se había prometido hasta los 2, 3 millones de kilos. En este sentido, lamentaba tener que leer en la prensa asturiana o gallega como sus compañeros pescadores «dicen que somos unos privilegiados en la cuota del verdel, cuando no es así», incide.
El patrón explica que la flota cántabra ha vivido tradicional e históricamente del verdel «porque no tenía otra cosa» como «sí» tienen en comunidades como la asturiana o la gallega. Un derecho histórico que se contempla en el reparto de cuota que se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), y con el que no están de acuerdo otras comunidades.
La flota cántabra se ha quedado en tierra, sin más remedio, a la espera de la llegada del bocarte que ya ha entrado esta semana. La cuantía de verdel a repartir entre los buques de cerco de Cantabria ha ascendido hasta las 1.600 toneladas, mientras que a las embarcaciones de artes fijas les corresponden 1.905.
A ese TAC fijado por la Unión Europea ya se la ha restado el porcentaje de la multa por sobrepesca que pesa sobre España hasta 2022.