Atención Primaria se lava las manos ante la petición de reabrir el consultorio de Miera, que no tiene buena conexión a internet

No hay fecha a la vista para la reapertura del consultorio médico de Miera. Eso es lo que se deduce de la contestación que remitió antes de su dimisión la directora gerente de Atención Primaria, Alicia Gómez, en respuesta a la petición de los alcaldes de Miera, Liérganes y San Roque de Riomiera (Tarsicio Gómez, Santiago Rego y Antonio Fernández, respectivamente). El motivo que alegan desde el Servicio Cántabro de Salud es que ellos no pueden solventar los problemas tecnológicos que aquejan a las instalaciones médicas de Miera, que lleva sin prestar servicio desde el comienzo del verano.

La pasada semana los regidores de Miera, Liérganes y San Roque de Riomiera decidieron hacer llegar por escrito su solicitud a la Consejería de Sanidad para dar solución al prolongado cierre del consultorio meracho. Si los tres ayuntamientos decidieron aunar sus voces en dicha reclamación es porque pertenecen a la misma Zona Básica de Salud, y la suspensión de la atención en uno de los centros repercute en el resto directamente. Además, genera molestias en los habitantes. «No es de recibo que los vecinos de Miera tengan que desplazarse al consultorio de Mirones», dice el escrito de los alcaldes, y menos «cuando Miera ha dispuesto un local a la Administración Sanitaria».

Asimismo, echan en cara al consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, que el alcalde de Miera le planteara el problema el pasado año, sin recibir respuesta. «Si se quiere evitar el despoblamiento de la Cantabria rural es obligado hacer un esfuerzo por mejorar y mantener los servicios», han reclamado.

Por otra parte, los regidores aprovechaban la misiva para proponer que el personal médico y de enfermería no coincidan en los días de consulta, de tal manera que se garantice que los consultorios estén abiertos todos los días de la semana, unos días con médicos y otros con personal de enfermería.

La respuesta llegó días después por parte de la entonces directora gerente de Atención Primaria, Alicia Gómez. Ella se lavaba las manos respecto a la reapertura en Miera. «Reconocemos las dificultades tecnológicas existentes en el Consultorio de Miera como único obstáculo para mantener la actividad asistencial presencial», admitía. Pero apostillaba: «la resolución de dichas deficiencias escapan a esta Gerencia». Aunque, a su vez, aclaraba que «desde hace tiempo se ha dado traslado del caso a otras instancias con mayor capacidad resolutiva y nos consta que se está trabajando para dar con una solución».

En lo concerniente a la petición de turnar profesional médico y de enfermería, la directora gerente se comprometió a estudiar la propuesta «dada la carencia ya conocida de personal sanitario».

Desde que comenzó la pandemia, con la excusa de optimizar recursos, son varios los consultorios en la región que han echado el cierre. Sin embargo, el caso de las instalaciones de Miera es especial, porque se clausuró en verano ante los problemas del personal médico para descargar informes y radiografías por falta de una buena cobertura de internet para las instalaciones, que eran demasiado modernas para la infraestructura. Algo que para los regidores afectados no es comprensible. Tal y como trasladan en su misiva, «no puede haber un local cerrado que está listo para prestar servicio en la era de las nuevas tecnologías, la Consejería tiene que tomar medidas y actuaciones urgentes para solucionarlo».

Unos días después de que los tres alcaldes remitiesen la carta a Sanidad, desde la oposición, el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Miera, Ricardo España, también envió un escrito al consejero Rodríguez solicitando la reapertura «inmediata» del consultorio de la localidad, cerrado desde hace «casi cinco meses». España criticó que las razones que esgrime Sanidad para justificar el cierre, «un problema de cobertura de la red», siempre le han parecido «una disculpa para justificar una decisión política».