El embarcadero de Cubas ya está instalado y funcionando, tras años de batalla judicial
El Ayuntamiento de Ribamontán al Monte colocó hace unos días el pantalán y la pasarela sobre la ría, una vez resuelto el conflicto con los conservacionistas
El Ayuntamiento de Ribamontán al Monte colocó hace unos días el pantalán y la pasarela sobre la ría, una vez resuelto el conflicto con los ... conservacionistas
cubas. El alcalde de Ribamontán al Monte, el regionalista Joaquín Arco, anunciaba esta semana una noticia que llevaba tiempo esperando, la colocación de la pasarela y el pantalán en la ría de Cubas. Un proyecto que trajo bajo el brazo en su primera legislatura como regidor, pero que no pudo materializar porque los grupos ecologistas denunciaron su instalación y el tema se judicializó. El pasado mes de mayo, el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria daba la razón al Ayuntamiento y solo faltaba el permiso de Costas para actuar.
Las claves
-
2017. Ribamontán al Monte plantea un proyecto sobre el pantalán y la pasarela de unos 40.000 euros.
-
2021-2022. Se inician los trabajos y los ecologistas los denuncian y se paraliza la obra mientras dura el litigio.
-
2025. En mayo de este año, el Tribunal Supremo da la razón al Ayuntamiento y se retoman los trabajos ya ejecutados.
«No ha sido un capricho» explicaban esta semana el alcalde de Ribamontán al Monte, Joaquín Arco y la alcaldesa pedánea del pueblo de Cubas, Pilar Gómez. Ambos afirman que la instalación, que es desmontable, estaba pensada para dar servicio a las embarcaciones que circulan por la ría. «Es una zona que se estaba utilizando ya pero sin la seguridad que te da un pantalán», afirman. Además, ambos responsables avanzan que su idea es que «en un futuro», se puedan acercar barcos a la zona, como pasaba ya antaño. «Trabajaremos para hacerlo posible», insisten.
La instalación del pantalán se llevaba a cabo hace unos días, ya que el Ayuntamiento acaba de recibir luz verde por parte de Demarcación de Costas para ponerlo en marcha. Unos permisos que el consistorio lleva esperando desde 2017, cuando se presentó el proyecto inicial para realizar esta pequeña parada en la ría. Una idea que fue tomando forma y que, en 2021, estuvo a punto de ejecutarse pero la denuncia de los ecologistas en 2022 paralizó el proceso y hubo que guardar el pantalán y la pasarela en los almacenes municipales.
El pasado mes de mayo, tras años de litigios, la sección primera de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo (TS) ratificaba la legalidad de la instalación fluvial para siempre, porque ya no cabía recurso alguno, imponiendo las costas judiciales a los conservacionistas.
A partir de ahí, el Ayuntamiento –a la espera del permiso de Costas– ha ido preparando el terreno y adecentándolo para poder volver a colocar la instalación en su sitio. En 2022, cuando el proceso paralizó las obras, ya se había encargado la pasarela y el pantalán y se habían ejecutado los trabajos de las pilastras que sostienen esta instalación, por lo que terminar la obra y dejarla lista para su disfrute ha sido relativamente rápido y sencillo.
De hecho, en la última resolución judicial, el Supremo entendía, al igual que el TSJC, que los trabajos consistían en una rehabilitación de instalaciones preexistentes, ya que se ha ejecutado sobre los restos de un viejo embarcadero, recordando que aquella infraestructura estaba ya concluida y en servicio «desde tiempos inmemoriales». También subrayaban los jueces en la primera sentencia favorable que la intervención sobre la zona no es muy significativa.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión