Acusan al alcalde de Santiurde de desviar material de obra de una pedanía a otra

Según el relato de la alcaldesa pedánea de Pando-Penilla, Milagros Ruiz (PRC), la citada junta mantiene desde hace años un convenio con la cantera de Fernández Rosillo por la que su pueblo tiene hasta 400 toneladas gratis de este material para utilizar en el arreglo de caminos y accesos a fincas. De ese acuerdo solo se beneficia esta pedanía, ya que la cantera está en terrenos de esta junta, por lo que el resto han de pagar el material que cargan.

La pasada semana, Milagros Ruiz empezó a sospechar que algo pasaba, al comprobar cómo por delante de su casa pasaban «camiones y camiones cargados de grava». Ellos estaban arreglando un camino en Pando, pero ese día la empresa (Tamisa) le había dicho que no irían a trabajar. Al ver tanta frecuencia de viajes decidió coger el coche y seguir a uno de los camiones, al que vio descargar los áridos con destino a una carretera que no era la suya. Ni corta ni perezosa se plantó en la cantera, donde le confirmaron que los albaranes de las distintas cargas de material se los estaban apuntando a ella, a la cuenta de la pedanía. «De inmediato les dije que parasen, que esa carretera no era nuestra», dijo. Tras interrogar a la empresa que ejecutaba la carretera (Tamisa), Milagros dice que su sorpresa fue que el encargado le dijo que el alcalde (por Víctor Concha) había dado la orden «y que le dijo que yo estaba de acuerdo, que había hablado conmigo, y conmigo no habló nadie», afirmó.

Poco después se pronunciaba su partido (PRC) a través de la Junta Vecinal explicando el caso y denunciando que «aunque pudiera ser anecdótico, esto daba muestra de las malas artes de un alcalde tramposo», definían. «Este nefasto movimiento deja perplejo a todo un pueblo que no entiende ni las formas ni la necesidad de llevar a cabo este atraco sin precedentes», sentenciaban en un escrito.

Según la versión del alcalde aludido, Víctor Concha, lo que dicen desde Pando-Penilla «es todo mentira» y el material lo «va a pagar el Ayuntamiento, que ya se lo dije yo a la empresa el día que lo cogió». El caso es que todos los albaranes que tiene la Junta Vecinal en su poder -los nueve que solicitó el día de autos la alcaldesa pedánea a Fernández Rosillo- vienen a nombre de Pando-Penilla, no del Ayuntamiento. El alcalde no niega lo de los recibos de la cantera, pero insiste en que no es como lo cuentan. «Eso es mentira todo. Ya llamaré yo a la empresa, pero a ellos se les dijo siempre que ya lo pagaba el Ayuntamiento y también a la empresa que lo echó», insistió.

A preguntas de este periódico sobre si era conocedor del convenio de Pando-Penilla con Fernández Rosillo, el regidor dijo que, efectivamente, «la grava que hay en la cantera es de ellos, pero el convenio que tienen nunca la han gastado», añadió. El alcalde añade también que no es cierto, «como dicen», que él haya dado la orden de apropiarse de parte de la cuota gratis de los áridos de Penilla. «El alcalde no ha llamado a la cantera. Tamisa -la empresa que está arreglando los caminos- es quien ha ido allí a cargar el material, pero yo al de Tamisa no le he dicho, ni que lo iba a pagar la Junta Vecinal ni nadie».

Por último, restando importancia a un asunto que, a su juicio, no la tiene, explicó que si al final se había cargado ese material a nombre de la Junta de Pando-Penilla, eso tenía fácil solución: «que me llamen a mí y que el Ayuntamiento lo pague, pues vaya una cosa que han sacado», zanjó.