Cantabria colocará barreras en Lunada tras el accidente de tráfico mortal de cuatro jóvenes
El Gobierno prevé iniciar en primavera las obras que cuentan con una inversión de 4,4 millones y un plazo de ejecución de doce meses
Las demandadas obras para mejorar la seguridad vial del puerto de Lunada están previstas para «la primavera de 2026». Tras el accidente de tráfico en ... el que fallecieron cuatro jóvenes madrileños el pasado mes de marzo, el consejero de Fomento, Roberto Media, anunció este viernes que el Gobierno de Cantabria ya supervisa el proyecto que contempla la ampliación del ancho de la carretera, hasta los 5 metros, y la instalación de barreras metálicas a lo largo de todo el tramo.
Las actuaciones, que contarán con un presupuesto de 4,4 millones de euros y doce meses de ejecución, responden a la demanda de los familiares de los jóvenes fallecidos, que solicitaron la instalación inmediata de quitamiedos en el tramo.
Las obras prevén la mejora de la seguridad vial en la carretera CA-643, desde el Barrio de La Concha (San Roque de Riomiera) hasta el Portillo de Lunada. Un total de 12 kilómetros sobre los que mejorar la seguridad, con una altitud de hasta 1.350 metros, y donde la velocidad seguirá siendo de 40 kilómetros por hora al tratarse de una vía de alta montaña. Eso sí, ampliando el ancho de la calzada. El Ejecutivo pretende conseguir un ancho de 5 metros desde La Concha hasta el punto kilométrico 10, y en el resto de la vía realizarlo «donde físicamente sea posible ampliar hasta los 5 metros».
Además, el proyecto, que ya estudian los técnicos de la Administración, incluye la creación de un drenaje longitudinal en toda la carretera, la ejecución de varios muros de escollera –necesarios para ampliar la plataforma– y la mejora del firme, que se realizará mediante un triple tratamiento superficial. Así lo han «aconsejado», especificó Media, como la «mejor medida» para una carretera de estas características que sufre nevadas y requiere del mantenimiento con sal y quitanieves durante el invierno.
En cuanto a las barreras metálicas, se contempla colocarlas a lo largo de todo el trazado, a pesar de que conllevarán unas condiciones de mantenimiento «complejas» en las zonas donde se producen aludes. Para ello, las especificaciones técnicas contemplan «barreras continuas en una longitud muy grande porque los aludes podrían tumbarlas y arrancarlas». Todo ello enmarcado en unas obras necesarias para dar respuesta a la demanda de las familias y de la ciudadanía: «Hay que tomar medidas ante lo que allí ha pasado y este es un Gobierno que no se aparta de tomarlas. Y el proyecto ya está».
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