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La Plaza de Toros de Santander ya ha comenzado los trámites para encontrar nueva empresa gestora para los próximos años. Después de que las últimas ... cuatro temporadas fuera Lances de Futuro la que organizara la feria de Santiago, el consejo de administración y el Ayuntamiento se encuentran ultimando los detalles del pliego que, si no hay retrasos, se hará público en las próximas semanas. Un paso importante para el futuro del recinto y del serial, toda vez que sentará las bases de lo que será la tauromaquia en Cuatro Caminos durante varios cursos.
Y es que la de la empresa que dirige José María Garzón ha sido la primera experiencia del coso con gestión privada después de que en las últimas décadas fuera el consistorio el que organizara la feria. Con altos y bajos, los cuatro años de Lances de Futuro han convertido Santiago en un serial amable, con baja exigencia ganadera y artística y en la que las actividades de fomento o relacionadas con la tauromaquia han brillado por su ausencia.
Las claves
Será más alto que en el pliego anterior, aunque la cifra de partida está todavía por concretar
Valorará la oferta artística, con poco margen a nivel de toreros y mejorable a nivel de ganaderos
Realzará las propuestas de promoción y fomento del mundo del toro para el presente y el futuro
El primer aspecto que regulará el nuevo pliego es el canon que la adjudicataria dejará en las arcas municipales. En el anterior contrato era de 60.000 euros, una cantidad que se adaptará a los tiempos actuales y que podría rondar los tiempos actuales. No obstante y dado que la gestión de un edificio municipal tampoco debe llevar afán recaudatorio y que no poner límite a la oferta económica derivaría en un empeoramiento del espectáculo, el presidente del consejo de administración del coso, Indalecio Sobrino, aboga por poner un tope bien de dinero o bien de puntuación a las ofertas monetarias. La empresa que puje por la plaza tendrá que demostrar experiencia en recintos de similar importancia y categoría y una solvencia económica fuera de toda duda.
La parte artística, la feria en sí, también tendrá un peso importante dentro de las puntuaciones del contrato, aunque se trata de un criterio subjetivo en el que, dada la situación actual de la tauromaquia, los empresarios tendrán que apostar, sobre todo, por el nivel ganadero. Y es que las figuras del toreo no han faltado en los últimos años en Cuatro Caminos, pero sí se ha echado en falta hierros punteros por historia o nivel de rendimiento de los últimos años, tipo Fuente Ymbro, Santiago Domecq o el legendario hierro de Victorino Martín. Eso sin entrar en detalle del escaso trapío, hechuras y poder de los toros en las últimas cuatro ferias.
De momento Sobrino reconoce que ninguna empresa ha preguntado oficialmente por la plaza o su pliego, aunque no es un secreto que son varias, más allá de Lances de Futuro, las empresas que pujarán por una plaza y una feria atractiva para el mundo taurino. Y es que el trabajo da sus frutos y si de algo puede presumir Santander es de que desde la última etapa con el Ayuntamiento al frente del coso y durante la gestión de José María Garzón las entradas en el tendido han sido positivas. La política de precios, abono joven incluido, será otro de los aspectos fundamentales a la hora de mantener el serial como una parte fundamental de la temporada tanto de aficionados locales como de los llegados de fuera.
Más allá del dinero y de los carteles, el pliego entrará a valorar las mejoras que pueda aportar cada empresa a la feria o a la plaza, como por ejemplo un festejo de promoción con la Escuela Taurina de Santander. Sobrino reconoce que, al tratarse de una entidad privada (no recibe ninguna ayuda por parte de las instituciones públicas), no se puede obligar en el pliego a que el adjudicatario organice una novillada para sus alumnos, aunque la opción es optar por una fórmula que ya se usa en Palencia (donde la plaza también se cede por un mes) o Gijón y que hace referencia a un plan de colaboración con entidades, asociaciones y escuelas dedicadas a la promoción de la tauromaquia cuya actividad se realice en la plaza de toros. Un aspecto importante para el presente y para el futuro y cuya inclusión en el pliego supondría un gesto por parte consistorial hacia los chavales que pelean por hacerse un camino en el mundo del toro.
Pero hay más. Charlas, coloquios, exposiciones, encierros infantiles, concursos de recortes, festejos populares, reuniones de peñas… la imaginación del empresario es libre y el pliego deberá puntuar cualquier mejora ofrecida por los contendientes. De momento será mañana cuando Indalecio y el secretario municipal siente las últimas bases jurídicas para un texto que deberá pasar por el consejo de administración antes de salir a concurso público y ser objeto de deseo por parte de las empresas taurinas más potentes.
Además del pliego, el otoño será fundamental para Cuatro Caminos ya que en los próximos días comenzarán las obras para arreglar el drenaje del ruedo y componer el mismo con varias toneladas de arena, una arena peculiar, difícil de encontrar y que tiene que suponer la vuelta del coso al estado de excelencia que siempre ha presentado. Y es que en la última feria, más allá de la lluvia, que la aguantó, fue el polvo el que más entorpeció las faenas de los toreros.
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