La Policía busca a tres hombres como sospechosos del homicidio de Javier Borrás en Los Castros
La magistrada que instruye el caso ha decretado una nueva prórroga del secreto de sumario a la espera de que se produzca alguna detención, ocho meses después del suceso
Un nuevo mes y una nueva prórroga del secreto de sumario. El homicidio de Javier Borrás en su urbanización de la Avenida de Los Castros ( ... Santander), que tuvo lugar hace ya ocho meses, sigue estancado. Y no porque el departamento de Homicidios de la Jefatura Superior de la Policía Nacional de Santander haya aparcado el asunto. Nada más lejos de la realidad. El problema es que están teniendo serias dificultades para dar con el paradero de los sospechosos del crimen, que, según han revelado a El Diario Montañés fuentes cercanas al caso, ascienden a tres. Al menos dos de ellos son viejos conocidos de la Policía Nacional por su historial delictivo. Sobre el tercero tienen menos información, de momento.
A la espera de que se produzcan las primeras detenciones, la titular del Juzgado de Instrucción Número 5 de Santander, Mercedes Compostizo, ha vuelto a acordar una nueva prórroga –la séptima ya– del secreto de sumario. Eso supone que la acusación particular no dispone de información sobre los avances de la investigación.
Lo cierto es que para que la instrucción tome impulso es vital que los investigadores pongan delante de la instructora a alguno o a todos los sospechosos del crimen. Será entonces cuando se ponga en marcha toda la maquinaria judicial que rodea a cualquier caso de este tipo.
Aunque hayan pasado ya ocho meses sin que la Policía Nacional haya procedido a alguna detención, entre los investigadores hay cierto optimismo ya que tienen claro que tarde o temprano sus pesquisas darán los frutos esperados.
Mientras tanto, los familiares de la víctima guardan silencio –no han querido pronunciarse sobre los avances de la investigación– a la espera de saber quiénes fueron los responsables de la muerte de Javier Borrás y qué les llevó a acabar de una forma tan cruel (apareció amordazado y con golpes) con la vida de este santanderino, de 63 años, que contaba con antecedentes por delitos vinculados al tráfico de drogas y había pasado por la cárcel.
Cuando la Policía halló a la víctima muerto dentro de un coche, «amordazado, ensangrentado y con diversos golpes» en un garaje de la Avenida de Los Castros, lo primero que pensó es que se encontraban ante un ajuste de cuentas, como consecuencia de la relación que tenía la víctima con el mundo de las drogas. Sin embargo, tras practicar varias pesquisas se decantaron porque el móvil del crimen fuera «un intento de robo que se fue de las manos».
Aunque desde el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional no han querido desvelar ningún detalle de la investigación, más allá de asegurar que «siguen trabajando en el caso», este periódico ha podido averiguar que durante las primeras pesquisas que realizaron los agentes hallaron droga en la vivienda de Javier Borrás, aunque no ha trascendido la cantidad ni qué tipo de sustancias. Esta circunstancia refrendaría la hipótesis del robo.
Al parecer, los autores del crimen habían quedado con la víctima para comprarle droga y, por causas que aún se desconocen, acabaron con su vida.
¿Causa de la muerte?
Respecto a las causas de la muerte, los forenses llegaron a la conclusión de que Borrás murió el domingo 7 de enero y no el miércoles 10, cuando apareció su cuerpo. Y creen que ese violento fallecimiento se produjo «por la noche». Esta circunstancia provocó que el juez Jaime Parra pasara el caso a su compañera Mercedes Compostizo, de guardia el día del crimen. Además, la autopsia reveló que los diversos golpes que presentaba la víctima no fueron la causa de la muerte, simplemente le provocaron alguna fractura de costillas, pero no fueron el motivo directo de su fallecimiento, que «tampoco fue por causa natural».
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