El País Vasco cierra la hostelería todo el mes de noviembre
El Gobierno de Urkullu endurece las restricciones ante «la amenaza de saturación en los hospitales» y adelanta el toque de queda a las 22.00 horas
Terry basterra
Bilbao
Viernes, 6 de noviembre 2020, 08:54
La ascendente curva de contagios y la cada vez mayor presión asistencial que amenaza con saturar los hospitales han llevado al Gobierno vasco a tomar una decisión drástica a la que hasta ahora se había resistido por las pérdidas económicas que va a acarrear a miles de familias. Cierra la hostelería. Lo hace desde mañana y durante, al menos, todo el mes de noviembre para desactivar uno de los principales puntos de la transmisión del virus en Euskadi. Y no por culpa de los responsables de los negocios. El lehendakari insistió ayer en que los contagios que se producen en estos espacios son fruto del «comportamiento de las personas». La ciudadanía tiende a relajarse en bares y restaurantes. Se quitan mascarillas y reducen las distancias. «Hay un contacto social indiscriminado» y se dispara el riesgo de contagio.
Este es el motivo por el que la principal nueva restricción que aplica Lakua va dirigida al que es uno de los principales espacios de ocio y reunión de los vascos. Pero no es la única. El toque de queda se adelanta una hora. Todas las personas deberán estar a las diez de la noche en sus casas y no salir de ellas hasta las 6 de la mañana, salvo que tengan una causa justificada. Al Ejecutivo vasco le hubiera gustado poder recortar aún más la hora límite hasta la que se puede estar en la calle, pero el Ministerio de Sanidad se negó el miércoles a variar las condiciones marcadas en el Real Decreto que regula el actual estado de alarma. Quiere esperar aún «dos o tres semanas» para comprobar si surten efecto.
Las nuevas restricciones afectan también a todos los establecimientos comerciales. Tendrán que cerrar a las 21.00 horas, salvo las farmacias y estaciones de servicio. Mismo límite se fija para las actividades y espectáculos culturales. Quedan además suspendidos todos los ensayos y actuaciones no profesionales, como también todo el deporte en grupo no profesional o semiprofesional, incluido el escolar.
El transporte público tendrá las 22.30 horas como límite de salida, mientras que a la hostelería se le permitirá seguir abierta para enviar comida a domicilio o servir en el local para llevar con cita previa hasta las nueve de la noche. Todas estas medidas serán «valoradas permanentemente y estarán condicionadas a la evolución epidemiológica».