El Supremo rechaza el recurso de Sniace por el Patatal y libra a la ciudad de un pago de 10 millones

Y la magistrada Ángeles Huet explica por qué en la sentencia firmada hace siete días. El recurso de casación presentado por la firma no se sostiene porque «incumple» requisitos básicos de la Ley reguladora de la Jurisdicción Contencioso Administrativa (LJCA) -la normativa que controla los cauces y la actividad en el marco de estas competencias procesales-. Dicho de otra manera: el Supremo ni siquiera puede admitir el «interés casacional» de la reclamación porque esta no está debidamente justificada.

Sin entrar en tecnicismos, lo que la Sala le dice a Sniace en este fallo es que su escrito revela «falta de fundamentación» y una serie de carencias lo bastante importantes para que la magistrada cierre la puerta a emitir siquiera un matiz o valoración con respecto al valor de los árboles o el terreno en general. Nada más lejos. La jueza se ciñe a la jurisprudencia existente y remite el caso a lo dictado por parte del Tribunal Superior de Justicia Cantabria (TSJC), el órgano que -antes de esta sentencia, en marzo de 2022- ya había rechazado el recurso de Sniace y ratificado el valor del Patatal en 322.302 euros -218.822 por el suelo, 88.132 por el arbolado y 15.347 en base al premio de afección-.

Pasarían dos meses de ese fallo hasta que Sniace elevara su recurso al Tribunal Supremo. Su opinión sobre la tasación resuelta en 2020 por el Jurado de Expropiación Forzosa fue reflejada en las páginas de El Diario Montañés aquel 23 de mayo. «Simplemente ridícula», calificó la química, convencida de las infracciones «flagrantes» que contenía la sentencia del TSJC y del «valor real» de un catálogo de árboles que, además de integrar 2.500 ejemplares y una treintena de especies «insustituibles», fue plantado por la firma «con fines paisajísticos y de esparcimiento» hace más de sesenta años.

Indignada con lo que consideran un incumplimiento de la Ley de Suelo y Rehabilitación Urbana y la propia Ley de Expropiación Forzosa, la empresa llevó el caso hasta el Supremo con la esperanza de que el Alto Tribunal se impusiera y, sobre todo, estableciera un criterio de valoración que, según esta, «no está previsto en la normativa» y carece de jurisprudencia. Pero nada más lejos. La magistrada ha descartado ese debate de su dictamen, alegando que «las cuestiones de hecho y su valoración probatoria están excluidas de la casación».

El varapalo que sufre Sniace tras el fallo del Supremo corta de raíz el debate sobre la tasación de los terrenos de Las Tablas, pero su particular pugna con el Ayuntamiento por los bienes expropiados se mantiene abierta en otro frente muy importante: las parcelas del pabellón Óscar Freire. Aquí también hay mucho dinero en juego. Y el último fallo, a la espera del recurso del Consistorio, da la razón a la empresa.

Ha pasado cerca de un mes desde que el TSJC estimó su recurso -esta vez sí- y elevó en 1,1 millones el precio de los 51.022 metros cuadrados donde hoy se ubica el complejo polideportivo. Aquí, el varapalo fue para el Ayuntamiento de Torrelavega. La sentencia enmienda los criterios de tasación emitidos por el Jurado Provincial de Expropiación hace tres años, condenando al municipio a pagar no 1,5 sino prácticamente el doble: 2,7 millones. Con todo, esa suma está lejos de los 3,4 que pedía la compañía.

Lo que parece 100% asumido tanto por Sniace como el Ayuntamiento es que, como en el caso del Patatal, los dos están decididos a llevar el caso hasta donde haga falta para llegar a una cifra deseable. «Estamos estudiando presentar recurso de casación», avanzaba entonces el alcalde, Javier López Estrada, antes de recordar el «alquiler abusivo» que solía pedir Sniace entre 1999 y 2011 y extraer un balance positivo de una pugna que, juicios al margen, ha tenido consecuencias diarias para los vecinos.

Para muestra, los seis años de precariedad que deterioraron los vestuarios del Óscar Freire desde que finalizó ese contrato de alquiler con Sniace hasta que el Consistorio hizo efectiva la expropiación (2017). Un lustro después, cuatro barracones sustituyen a estos espacios. y entre tanto, el Ayuntamiento dice que trabaja en la rehabilitación.

El parque de Las Tablas también quiere pasar página. Aquí, el Consistorio viene proyectando un cambio de imagen de 2,8 millones enriquecido con humedales, juegos y espacios deportivos para los vecinos. Este nuevo pulmón verde fue presentado sin éxito a las subvenciones de la Fundación Biodiversidad, en julio, aunque el equipo de gobierno confía en captar el dinero en la próxima convocatoria.