Torrelavega reformará la plaza de la Iglesia de Viérnoles para hacerla más accesible

La plaza que rodea a la iglesia de San Román, en pleno barrio Paramenes de Viérnoles, va a cambiar de cara. El Ayuntamiento de Torrelavega acaba de poner en marcha el proceso para adjudicar unas obras que buscan hacer este espacio «más accesible, más cómodo y más pensado para quienes lo usan a diario». Se actuará tanto en la calzada como en las aceras, con una intervención completa que se desarrollará a lo largo de tres meses, una vez arranquen los trabajos.

La actuación llega tras años en los que los vecinos venían señalando algunas carencias. Tal y como señalan los técnicos municipales, la acera es estrecha, hay desniveles incómodos y la zona no está bien adaptada para personas con movilidad reducida. Tampoco hay una separación clara entre los espacios peatonales y el tráfico rodado. Con esta reforma se pretende solucionar todo eso, sin perder el carácter abierto y tranquilo que siempre ha tenido esta plaza.

El presupuesto para ejecutar los trabajos es de 74.009 euros y la empresa que resulte adjudicataria tendrá que encargarse de demoler los pavimentos existentes, nivelar el terreno, renovar el firme de la calzada y rehacer las aceras con materiales nuevos. También se corregirá la pendiente de la rampa de acceso, que ahora resulta incómoda para algunos vehículos.

Uno de los cambios más visibles será la plantación de cinco árboles nuevos. En concreto, se trata de perales en flor, que sustituirán a los actuales, ya deteriorados. Además, se colocarán bancos nuevos y se repondrá la papelera, con el objetivo de que la plaza siga siendo un lugar de descanso y encuentro para los vecinos.

También habrá mejoras en el sistema de drenaje. Se instalarán rejillas y canaletas nuevas para evitar que el agua se acumule cuando llueve. Las obras contemplan además una pequeña intervención en la red de saneamiento y el acondicionamiento de los servicios que pasan por la zona. Incluso está previsto adaptar la instalación eléctrica para conectar correctamente las tres farolas existentes.

Durante el tiempo que duren los trabajos, se intentará mantener abierto al menos un paso para los peatones, y se dará prioridad a la seguridad. Algunos materiales que se desmonten —como tapas de arquetas o rejillas— se conservarán para reutilizarlos después.

Otro aspecto importante del proyecto es la gestión de residuos. El plan elaborado por el Consistorio incluye medidas para reciclar todo lo posible, evitando la mezcla de restos peligrosos con otros escombros. Habrá zonas señalizadas para cada tipo de material y se controlará el destino final de todo lo que se retire.

La licitación ya está en marcha y el plazo para presentar ofertas acaba el 16 de junio. Si todo va según lo previsto, las obras podrán comenzar poco después del verano. El objetivo es sencillo: mejorar un espacio muy utilizado, hacerlo más cómodo y adaptado a las necesidades actuales, sin perder su esencia.

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