Torrelavega vuelve a cerrar su piscina de Tanos por el reto viral de defecar en el agua

El Consistorio ha informado esta mañana a través de sus redes sociales de que la piscina grande estará cerrada hasta este martes, 15 de julio, para completar el proceso de depuración del agua y realizar los análisis para confirmar que no hay presencia de la bacteria E.Coli. En caso de que el resultado sea negativo podría retomar su actividad con normalidad.

Fue ayer a última hora, la piscina está abierta de 10.00 a 20.30 horas, cuando uno de los dos socorristas se percató de la presencia de heces en el agua. «No lo lanzan, lo hacen dentro de la piscina. Al final es bajarte un segundo el bañador y lo haces. El que lo hace puede controlar si alguien está mirando o no, ya que debajo del agua es muy difícil que veas que se hace», relata el concejal de Deportes, Nacho González.

El Ayuntamiento ha informado que se están revisando las cámaras de vigilancia de la instalación y advierten de que este tipo de comportamientos son más que una gamberrada, porque «suponen un atentado a la salud pública». Más allá de aplicar la ordenanza de protección de los bienes públicos y mantenimiento de la convivencia ciudadana con una sanción grave de 601 a 1.500 euros, desde el Consistorio barajan junto a la Policía Local la posibilidad de considerar estos hechos como un delito contra la salud pública, que contempla un mayor castigo.

El concejal de Deportes, que apunta que el pasado miércoles se habían cerrado en España más de 300 piscinas por este reto viral, lamenta el trastorno que está ocasionando estas acciones incívicas a la gente que, como este domingo, se han acercado a las instalaciones para disfrutar de un baño y se han encontrado la piscina cerrada. «El usuario de la piscina está muy enfadado con esta situación. Por eso pido un poco de civismo, un poco educación. Que los usuarios que puedan ver algo, rápidamente lo notifiquen y nos puedan decir o señalar quién ha cometido la acción».

González no ve ahora mismo otra solución para frenar esta incívica moda que cerrar las piscinas, pero eso supondría que paguen justos por pecadores y es consciente de que no se puede hacer. Por eso apela al buen comportamiento de la ciudadanía y a que quién vea este tipo de actos lo denuncie en el momento.

La dificultad para detectar a los responsables de estos vergonzosos actos está provocando que, por el momento, no se haya localizado a ninguno de los autores de los últimos episodios que se han registrado en Cantabria en la última semana. No obstante, en los ayuntamientos ya están estudiando posibles soluciones para estrechar el cerco y poder identificar a los responsables, a los que se les dará un buen escarmiento, a modo de multa, como ya adelantó el edil de Seguridad de Torrelavega, hace unos días.