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Cantabria pretende coordinar su gestión del lobo con el Parque de Picos

Uno de los objetivos de la presidencia cántabra de esta área natural es, según anunció ayer Oria, «lograr una mayor cercanía con los habitantes de la zona»

Pedro Álvarez

Jueves, 28 de enero 2016, 07:21

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El consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria, expuso ayer a los representantes de los municipios cántabros que aportan terrenos al Parque Nacional de los Picos de Europa (Camaleño, Cillorigo de Liébana y Tresviso ) algunas de las prioridades de la Consejería para este área durante esta legislatura, destacando como premisa básica el objetivo de «lograr una mayor cercanía de la gestión del Parque con los habitantes de la zona cántabra y especialmente con las entidades locales».

Para ello, Oria, en su calidad de presidente de turno de la Comisión de Gestión y del Patronato el Parque, anunció que uno de los objetivo que persigue es lograr que este mismo año se inicie la tramitación del Instrumento de Gestión Integrada del Parque Nacional, equivalente al Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG), que conllevará un proceso de participación pública y audiencia a los interesados, reforzado en el sentido de no limitarse a la tramitación formal, sino que se celebrarán reuniones en cada municipio, y con los diferentes sectores sociales y económicos. El calendario de reuniones se anunciará y se consensuará con los ayuntamientos.

Por otro lado, al estar previsto aprobar el Plan de Gestión del Lobo en Cantabria en las próximas semanas, se pretende lograr la máxima coordinación y coherencia entre dicha iniciativa y los criterios de gestión de este animal dentro del Parque Nacional; por supuesto, teniendo muy en cuenta que el Parque se rige por una normativa básica de ámbito estatal.

En esta línea, y siempre que sea factible dentro de ese marco legal, Cantabria quiere aplicar en todo su territorio, sin excepciones, el sistema de pago de daños producidos por la fauna silvestre a través del seguro que tiene contratado la Consejería de Medio Rural; los criterios y protocolos para la verificación de los daños por parte de los técnicos auxiliares del Medio Natural, y el régimen de ayudas a la adopción de medidas preventivas y los pagos por servicios ambientales, o sistemas equivalentes, que se apliquen en el contexto de la gestión del lobo o de otras especies de fauna.

Lago de Ándara

En cuanto al proyecto de restauración del Lago de Ándara, la Consejería es partidaria de continuar con su desarrollo por lo que significa de recuperación de una zona degradada por la actividad minera, pero siempre que se cumplan dos premisas esenciales. La primera, que el proyecto definitivo cuente con los informes favorables de todos los organismos competentes. La segunda, que ese proyecto definitivo sea viable desde el punto de vista técnico y económico.

Por otra parte, Cantabria apuesta por una revisión de los actuales estatutos reguladores del Consorcio Interautonómico para la gestión del Parque Nacional, tal y como se acordó en la reunión de la Comisión de Gestión del Parque celebrada el pasado mes de octubre.

La Comisión encargó a los tres directores generales competentes en materia de espacios protegidos en cada Comunidad estudiar las alternativas y las modificaciones que se consideren adecuadas de esos estatutos, con la finalidad de mejorar los procedimientos de trabajo para simplificar trámites y reforzar la seguridad jurídica de las decisiones que se adoptan.

Por último, el Consejero anunció que está previsto tramitar una modificación de la Estructura Orgánica y de la Relación de Puestos de Trabajo de la Consejería de Medio Rural que, en el caso de la Dirección General de Medio Natural, supondrá la integración funcional del personal transferido a Cantabria junto con la gestión del Parque. Se considera que esta integración es clave para lograr la máxima eficiencia de los medios disponibles.

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