José Ajuria dona a El Astillero toda su colección sobre minería y el ferrocarril

Como explica, «son mis grandes pasiones», y una vez jubilado, Ajuria ha dedicado la mayor parte del tiempo a estudiar y recopilar documentación sobre la historia minera y ferroviaria del municipio, parte de ella reflejada en libros como 'El Coto Orconera. Historia de la cuenca minera de la Bahía de Santander', del año 2006. El delineante, historiador e inventor lleva los últimos años preocupado por dejar «en buenas manos» este valioso legado cultural que ahora pasará a formar parte del patrimonio del Ayuntamiento de El Astillero tras la firma de un convenio entre ambos.

El alcalde, Francisco Ortiz, destaca «el acto de generosidad» de «este vecino insigne», al tiempo que reconoce el alto valor histórico y cultural de esta colección de documentos, fotografías y planos y que resultan claves para posteriores estudios y trabajos de investigación. Según el acuerdo, el Ayuntamiento se compromete a integrar este fondo documental, fotográfico y cartográfico al Archivo Municipal, poniéndolo a disposición de los investigadores y del público en general para su divulgación.

Además del convenio, el Ayuntamiento y el propio José Ajuria, en su día primer autor de la página dedicada a la historia de El Astillero en el suplemento dominical de El Diario Montañés, 'Imágenes e Historias', están preparando unas jornadas sobre la historia minera y del ferrocarril en el municipio y en las que participarán reconocidos historiadores. Según el regidor regionalista, «un modesto homenaje para reconocer la figura y el trabajo de Ajuria en el marco de este encuentro» y que se completará asimismo con una exposición de la colección que se dona al Ayuntamiento. «Mi gran temor era que todo esto se perdiera», dice Ajuria en su casa de Guarnizo, rodeado de montañas de papeles, fotografías, planos y libros. Señala una de las instantáneas en las que aparece retratado, de joven, mientras efectúa una toma de datos con el taquímetro de Kern. Bajo la foto se puede leer: «José Ajuria, topógrafo de la compañía Orconera, replanteando una conducción de aguas del manantial de Elillo al depósito de Astillero».

José Ajuria, que cursó sus primeros estudios en las Escuelas Nacionales de Villaescusa para ingresar después en el Taller Escuela Sindical Nuestra Señora de los Remedios, en Guarnizo, pertenece a la Asociación Sindical de Delineantes Españoles, siendo dado de alta en 1977 en el Colegio Profesional de Delineantes Españoles, con la categoría de superior. Recuerda que entró como pinche de carpintería de minas en 1952 en la compañía Orconera (Orconera Iron, Ore Company Limited), donde más tarde sería peón de talleres, especialista, oficial, técnico y topógrafo. En 1962 al establecerse la clasificación de puestos de trabajo, efectuado por la empresa especializada Seina a petición de la compañía minera, le fue asignada la categoría de jefe de la Oficina de Topografía y Delineación.

En la década de los 70 pasa a formar parte de la empresa Polybar Canalizaciones Eléctricas Prefabricadas como delineante proyectista y ayudante de ingeniería. En 1984 se produce la absorción de la sociedad por la empresa Ciama, de Barcelona, que le nombra director técnico, otorgándole el cargo de jefe de mando, y solo un año después pasa a compartir el cargo con el de administrador mancomunado. En el desempeño de esta nueva función de fabricantes de conductores eléctricos rígidos ha desarrollado varias patentes y modelos de utilidad, de canalizaciones eléctricas para baja y media tensión, así como otros perfeccionamientos para la distribución eléctrica.

En 1997 esta sociedad fue adquirida por el grupo alemán Klöckner & Moeller, que tres años más tarde la traspasó a Siemens, con cuyo nombre estuvo operando hasta que en 2006 esta compañía desmontó sus instalaciones en Gajano (Marina de Cudeyo) para llevarlas a Suiza. Ajuria apunta que Siemens tuvo que comprar la compañía ubicada en sus orígenes en la calle Industria para hacerse con la patente que él había diseñado. Es a partir de 2003 cuando comienza a investigar sobre la historia de Guarnizo y Astillero y descubriendo las posibilidades en cuanto a su vinculación con las minas de hierro. Como resultado presentó el reconocido libro 'El Coto Orconera', un referente sobre la minería en la cuenca de la Bahía.