Los vecinos de Revilla advierten de que la Nacional 623 se hunde

El 'soplao' que apareció el pasado viernes en las inmediaciones de la rotonda del Alto de la Venta de la Morcilla (Revilla de Camargo) ya ha sido reparado. Los operarios de la empresa encargada de la conservación de carreteras dedicaron la noche del viernes y la jornada de ayer, sábado, a recuperar la normalidad en la carretera Nacional 623. Sin embargo, ayer se podía comprobar que la enorme cantidad de hormigón utilizado para rellenar el agujero se hundía lentamente, al mismo tiempo que resurgían las grietas de la superficie que delimitaban el contorno del 'soplao'.

Los vecinos de la zona están preocupados por la situación. «Menos mal que un vecino que cruzaba por el paso de cebra vio que se estaba formando un agujero y avisó al dueño del bar cercano para que llamase a la Guardia Civil, porque si no, se cae dentro un coche», señalan.

También mostraron su malestar por los problemas que están generando las obras de la Autovía del Agua. De hecho, consideran que son la razón del hundimiento del asfalto. «Estamos de suciedad hasta las narices», afirmaba indignada una vecina. «Aquí suben y bajan, estropean la carretera y ni siquiera riegan para que no se haga polvo».

Los trabajos de reparación comenzaron con el picado y saneamiento del agujero, que originalmente tenía dos metros de profundidad por cuatro de ancho y otros cuatro de largo. Posteriormente se rellenó el hueco con unos 14.000 metros cúbicos de hormigón y se instalaron chapas de metal sujetas al suelo para evitar que se desplazaran con el paso de los vehículos.

Si el viernes la carretera en dirección a Cianca fue cortada, ayer los obreros tuvieron que dar paso alternativo a los vehículos para facilitar la fluidez de la circulación mientras reparaban el 'soplao'. Se prevé que a lo largo de la madrugada del domingo la N-623 recupere la normalidad.

Presunto 'soplao'

Existen serias dudas sobre el origen de este nuevo hundimiento en Camargo. Un municipio donde la palabra 'agujero' es sinónimo de 'soplao'. Los vecinos están convencidos de que las obras de la Autovía del Agua -y no los acuíferos subterráneos- son los culpables del socavón abierto en la carretera.

Uno de sus principales argumentos de los vecinos es que el lugar en el que surgió el presunto 'soplao' coincide con el trazado de la tubería de la Autovía del Agua.

Según cuentan los vecinos, los trabajos llevan ejecutándose desde hace más de ocho meses y han intervenido dos empresas. La primera fue obligada a abandonar porque su trabajo no se ajustaba al proyecto del Ministerio de Medio Ambiente, mientras que la segunda tuvo que rellenar, «con mucho hormigón», las canalizaciones anteriores.