Álvaro Pombo, «emocionado y agradecido», recibe la Medalla de Oro de Cantabria
La presidenta regional, María José Sáenz de Buruaga, en un encuentro «entrañable», entrega al escritor el «símbolo del vínculo indestructible entre su escritura y su tierra»
El autor de 'Santander, 1936' lo tiene claro: «La vejez es un buen momento para recibir medallas». Álvaro Pombo, incesante en su escritura y atento ... a todo lo que depara la actualidad y el debate más vivo, recibía ayer al mediodía en Madrid la más alta distinción de la comunidad autónoma: la Medalla de Oro de Cantabria. Un reconocimiento, concedido el pasado mes de abril, cuya entrega se había hecho esperar ante la posibilidad de que el Premio Cervantes viajara a su ciudad natal el pasado verano. Finalmente, «emocionado y agradecido», recibió ayer la medalla de manos de la presidenta regional, María José Sáenz de Buruaga, en el transcurso de un encuentro calificado de «íntimo y entrañable», que tuvo lugar en el domicilio del autor en Madrid, debido a su estado de salud. Un acto que transcurrió entre evocaciones santanderinas del autor de 'El metro de platino iridiado' y los elogios por una trayectoria literaria sembrada de premios. Buruaga le entregó la más alta distinción de la comunidad, considerada un «símbolo del vínculo indestructible entre su escritura y su tierra».
Pombo (Santander, 1939), que reiteró su agradecimiento por la Medalla a la jefa del Ejecutivo cántabro y a todo Santander por «esta estupenda medalla», aprovechó para colgarse la distinción nada más recibirla.
El narrador, por su parte, agasajó a la presidenta con el libro 'Doña Mercedes o la vida perdurable', además de compartir con ella recuerdos de sus «veranos santanderinos y de sus paseos por Puertochico». Pombo publicó 'Doña Mercedes...', obra inédita en la que muestra su faceta como dramaturgo, el pasado mes de abril . La obra se sumó a la colección Biblioteca Premios Cervantes, que el Fondo de Cultura Económica de España coedita junto con la Universidad de Alcalá y que cada año conmemora la obra del galardonado del Premio Cervantes con un volumen que completa la excelencia de su perfil literario.
Asimismo, el autor de 'Donde las mujeres' mostró su satisfacción por los galardones y medallas, como esta que le llegan ahora, octogenario, ya que «la vejez es un buen momento para recibir medallas».
Buruaga trasladó la admiración de la comunidad autónoma hacia un cántabro «cuya vida y obra forman parte de un patrimonio común», y ensalzó una «brillante trayectoria literaria» en la que, además, su tierra natal está presente «proyectando nuestra voz en el mundo». La presidenta destacó, a su vez, este «vínculo» con su región y con su ciudad natal, Santander, que ha sido siempre «profundo y fecundo», Y subrayó: «Aunque su vida y su obra le ha llevado a otros lugares», Pombo siempre ha vuelto a sus orígenes, «a su puerto de Santander, a pasear por sus calles y plazas y a mirarse en su bahía».
Al referirse a su obra, Buruaga aludió a su «autenticidad, que es la clave de su aportación a la literatura y a esta sociedad, ya que ha sabido articular un pensamiento vivo, inquietante y libre» abriendo espacios de reflexión y apelando a plantear nuevas miradas críticas».
En sus palabras, «Álvaro Pombo recibe muy merecidamente» la más alta distinción de Cantabria, un homenaje acompañado de nuestro reconocimiento y nuestro afecto, que se suma a los numerosos premios que ha conseguido a lo largo de su carrera». El último y el más importante, el Cervantes 2025, que recogió en abril de manos del Rey Felipe. «Espero que esta Medalla de Oro sea símbolo del vínculo indestructible entre su escritura y su tierra», señaló la presidenta, que destacó el «honor» de entregar al escritor esta condecoración y el «placer de compartir con él este momento».
La presidenta, finalmente, concluyó el encuentro definiendo al escritor cántabro como «un faro que seguirá iluminando a generaciones futuras desde Santander y Cantabria hacia el mundo».
El Consejo de Gobierno de Cantabria aprobaba en su reunión del pasado 10 de abril la concesión de la Medalla de Oro de Cantabria a Álvaro Pombo, por iniciativa de la propia presidenta y siguiendo lo establecido en la Ley de Honores y Distinciones de Cantabria.
El autor, premiado con el Planeta y el Nadal, entre otros muchos, (solo se le ha resistido el Princesa de Asturias) se une a una selecta lista de personalidades y entidades que recibieron esta distinción con anterioridad: Gerardo Diego, Eulalio Ferrer, José Simón Azcona, Juan de Borbón, El Diario Montañés, la Hermandad de Donantes de Sangre, el pueblo mexicano, Manuel Díez de Velasco, el Banco Santander y Alfonso Osorio.
El poeta de 'Protocolos' y 'Variaciones', el narrador que emprendió una carrera literaria exitosa con 'Relatos sobre la falta de sustancia' en los setenta, Premio Honorífico de las Letras de Santander, prosigue en su domicilio con su intensa y prolífica escritura. Tras publicar en los últimos tiempos un ensayo como 'La ficción suprema. Un asalto a la idea de Dios' y la novela 'El exclaustrado' trabaja en una nueva narración y publica en el suplemento Sotileza de El Diario su serie semanal de artículos.
La sorpresa del otoño será la publicación de sus 'Cuentos autobiográficos', en un primer volumen de la editorial Anagrama. Dieciocho relatos autobiográficos a sus ochenta y seis años, en los que aborda la autoficción mediante evocaciones en las que revive personas, espacios y experiencias que moldearon su carácter e inspiraron su literatura. Un examen retrospectivo en el que asomarán «la idiosincrasia de sus padres y los paisajes como estado de ánimo, con Santander como centro del mundo».
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