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'Sultán' (arriba, a la dizquierda), 'Process' (arriba a la derecha), 'Sebastián' (abajo, a la izquierda) e 'Intrigue' (abajo, a la derecha), fueron los sementales llegados desde Canadá a Cantabria DM .
La prodigiosa herencia genética de 'Sultán'

La prodigiosa herencia genética de 'Sultán'

La cabaña de leche de Cantabria dio un salto de calidad con el toro canadiense, del que aún viven 193 descendientes | Aunque el semental tuvo que ser sacrificado en 1990, treinta años después de su compra por la Diputación todavía nacen hijos suyos gracias a las dosis de semen que se congelaron

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Lunes, 28 de mayo 2018, 19:04

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Tres décadas han pasado desde la sonada llegada a Cantabria del toro 'Sultán', un semental que contribuyó de manera notable a la mejora de la calidad de la cabaña ganadera de leche de la región. Pese a que tuvo que ser sacrificado en julio de 1990, aún nacen descendientes directos de aquel imponente ejemplar gracias a las reservas congeladas de su cotizado esperma.

Juan Hormaechea era el presidente en 1988 de la entonces Diputación Provincial -ahora Gobierno regional- que decidió la compra de este toro de raza frisona línea Holstein americana. La operación costó a las arcas públicas un millón de dólares canadienses, unos 111 millones de pesetas de la época. Con la calificación de 'excelente' y la máxima puntuación para animales de este tipo, llegó desde Norteamérica acompañado por otro ejemplar, llamado 'Process', de similares características. Dos años más tarde se compraron otros tres toros también de Canadá: 'Sebastián', 'Intrigue' y el rojo pinto 'Matchumaken'. Las adquisiciones tenían por objeto mejorar genéticamente la raza frisona y conseguir aumentar la producción lechera de las vacas cántabras. Tras tres años de trabajo de los toros, se cifró en un 30% el aumento de la productividad media de cada vaca.

Sobre 'Sultán' se vertieron ríos de tinta en Cantabria y en el resto del país. Su fama creció cuando se rompió en 1990 el ligamento cruzado del corvejón izquierdo, del que fue operado en un centro clínico veterinario de Alicante. Nunca se recuperó. De regreso a la región, tras haber perdido la mitad de su peso al quedarse en 500 kilos porque apenas comía y bebía, tuvo que ser sacrificado en el matadero de Canfrisa de Santander el 27 de julio de 1991.

Los tres años que permaneció activo 'Sultán' produjo 64.327 dosis seminales -algunas siguen congeladas en las vaquerías cántabras-, que se vendían exclusivamente a los ganaderos de la región a un precio reducido: 200 pesetas cada una y 100 a los veterinarios inseminadores. Bastante menos de las 8.000 pesetas que costaba cada unidad importada a la empresa 'Sémex Canadá'. El Ejecutivo prohibió que las muestras salieran de la región.

'Sultán' trabajó junto con el resto de hermanos de raza canadiense y en poco tiempo revolucionaron la cabaña ganadera. Entre los compradores y tratantes que acudían semanalmente al Mercado Nacional de Torrelavega, se vendían entre 600 y 700 vacas cada siete días. Las hijas de 'Sultán' tenían mucha aceptación. Estas ferias eran el barómetro en el que se fijaba Vicente de la Hera Llorente, veterinario y entonces consejero de Ganadería, en el que se apoyó y confió siempre Hormaechea para valorar el rendimiento del famoso toro.

Aquellas importaciones de sementales fueron muy cuestionadas por los partidos de la oposición, que consideraron demasiado elevada la inversión para una comunidad con un modesto presupuesto. Hormaechea y De la Hera apostaron por el modelo y los resultados ahí están treinta años después: las vacas de Cantabria no tienen nada que envidiar a las mejores de Europa, como lo demuestra la participación con notable éxito en concursos y exposiciones internacionales.

Además de 'Sultán', otros toros canadienses contribuyeron a mejorar la cabaña ganadera de raza frisona de Cantabria

Los ganaderos iniciaron una nueva época. Aceptaron las incorporaciones de los sementales, ya que mejoraba la raza frisona en una tierra considerada, entonces y años después, de vaca lechera. Fue un beneficio para todo el sector, como corroboran los ganaderos José Arronte Diego, José Ángel Pereda, José Ramón Gutiérrez Rebolledo, Felipe Puente y Francisco Castanedo. «Traer a 'Sultán' fue un acierto. Además, muy sonado a nivel regional y nacional», relatan. «Los ganaderos aprendimos pronto a inseminar con aquellos toros a las vacas de leche», recuerdan hoy. «Entonces se inició de forma seria la evolución y mejora de nuestra ganadería», añaden. Como resultado de aquella iniciativa, Cantabria tiene vacas que dan más de 11.000 litros de leche al año. Actualmente, según Fernando Ruiz Sarabia, gerente de la Asociación Frisona de Cantabria (AFCA), 'Sultán' tiene 193 descendientes vivos. En total, 12 hijas, 29 nietas por parte de madre, 29 nietas por parte de padre, 105 biznietas por parte de madre y 18 biznietas por parte de padre. Unas cifras menores con respecto a 2011, donde su descendencia se cifró en 638 animales, pero hay que tener en cuenta que la media de vida de una vaca lechera se sitúa «entre 4 y 5 años» y que «otros toros mejores genéticamente han ido desplazando progresivamente a 'Sultán'».

Representantes del sector consideran que se produjo un «cambio radical» en la genética, que se mejoró, y en el incremento de la producción lechera. «Por entonces, había muy pocos sementales de la categoría de 'Sultán'», aseguran. Además, este modelo para la reproducción comenzó a tomar protagonismo. En aquella época menos de la mitad de las vacas eran inseminadas.

El exconsejero de Ganadería, Vicente de la Hera, fue de alguna manera paladín de aquellas decisiones. Casi a la par que 'Sultán' y sus hermanos, llegaron de Canadá 700 novillas frisonas Holstein y otras 300 lo hicieron en avión al aeropuerto de Parayas para ser trasladadas posteriormente a la península de La Magdalena, donde se repartieron a precios módicos entre los ganaderos de la región. Cantabria puso en marcha un plan para la mejora genética, se potenció el Centro de Selección y Producción de Torrelavega y se creó el Centro de Trasplante de Embriones. Además, De la Hera fue el impulsor de 'La Jerrizuela', en Coo (Los Corrales de Buelna), la finca donde se asentó el Centro de Selección de Ganado Tudanco.

'Sultán'

El más famoso entre los sementales que se compraron. Nació el 3 de noviembre de 1981 y fue calificado como 'excelente-superior tipo'. De padre y madre también 'excelentes', llegó en 1988 y tuvo que ser sacrificado en 1990.

'Sultán'.
'Sultán'.

'Sebastián'

Comprado en 1990 con la calificación de 'excelente superior por producción' obtenida en 1987. Nació el 30 de octubre de 1982 y era hijo de dos 'excelentes'. Era un semental de tamaño medio, armónico y equilibrado.

'Sebastián'.
'Sebastián'.

'Process'

Llegó a Cantabria a la vez que 'Sultán', con calificación de 'excelente'. Nació el 1 de mayo de 1981, hijo de padre 'excelente' y madre 'muy buena'. Entre los ganaderos de Cantabria se distribuyeron 100.000 dosis seminales.

'Process'.
'Process'.

'Intrigue'

Comprado en 1990 con la categoría de 'excelente clase extra'. Hijo de padre 'excelente-extra' y de madre 'excelente'. Cuando se adquirió estaba considerado uno de los toros más completos del mercado canadiense.

'Intrigue'.
'Intrigue'.

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