«Buscamos la originalidad, pero en la copia y la imitación ocurren cosas interesantes»
El madrileño Jorge Diezma, premio del Instituto d'Estudis Baleàrics, presenta sus bodegones marinos en Artesantander
Frente al 'Agnus Dei' de Zurbarán, Jorge Diezma (Madrid, 1973) decidió que quería ser pintor. «Eso era lo que quería hacer». Solo había un ... pequeño inconveniente: aprender a pintar. Desde que esa idea alumbró su cabeza hasta el momento en que con detalle explicaba los secretos de 'Paisajes suspendidos: bodegones marinos', la propuesta con la que participa en Artesantander, no cabe duda de que la meta se cumplió.
De la mano de Institut d'Estudis Baleàrics, en cuya convocatoria abierta resultó ganador, Diezma acude a la feria comisariado por Cristina Anglada. Y afirma sentirse «muy contento y orgulloso» del resultado del estand..., algo que «no siempre ocurre», bromea. El madrileño se formó en Cuenca, en la época en la que José Luis Brea era un referente y el arte conceptual una moda. En aquella etapa de formación en la facultad nunca pintó. «Ni siquiera toqué el óleo». La meta era «tener una visión crítica». Tras una crisis personal y el alumbramiento de Zurbarán pintar «fue una respuesta contestataria», un lugar «que necesitaba menos mediación». No es necesario estar dentro de las dinámicas del arte para entenderlo, porque «tenemos una tradición que hace comprensibles los códigos de la pintura».
Noticia relacionada
Una única feria, cientos de sonidos del arte
Con la directora de la feria, Mónica Álvarez Careaga asintiendo atenta a sus reflexiones, Diezma afirma que «en el mundo del arte el valor económico está asociado a la autoría». Frente a ese hecho, «la pintura tiene otras opciones y las ha tenido también históricamente». Caso del medievo, en el que el autor no es importante. Hace, además, una reivindicación de los procesos creativos que no tengan la originalidad como objetivo central o como axioma del que se parte, «pero nosotros estamos acostumbrados a buscar con nuestra mirada, desde hace siglos, esa originalidad como un elemento necesario y creo que la pintura no es no tiene por qué ser así, de hecho, en la repetición y en la copia ocurren muchas cosas interesantes», defiende.
Entre todos los estilos y teniendo en cuenta la falta de práctica, ¿qué le llevo a elegir el barroco como referencia? «Cuenta mucho el misterio de la representación; cómo se esconde y cómo se enseña». Decide los temas de sus composiciones por bloques para una temporada entera. «El tema no es lo importante, sino la representación en sí». Decide y después busca referencias, y prefiere la luz que cae desde la izquierda «para evitar las sombras» cuando pinta al natural. Un aspecto este, que se complica en su taller, cuando el objeto son peces. Entre sus favoritos, las sardinas.
«Cuanto más pintas, más ves de los maestros», razona. Recuerda que en sus inicios, «miraba los cuadros y no es que no supiera cómo lo habían hecho, es que no tenía ni siquiera una puerta de entrada a su práctica pictórica». Hoy, sus elementos, que trasladan a otra época narrativa, parecen surgir de una profunda oscuridad que no es causal, «es constitutiva». Una de sus particularidades es plasmar sus bodegones marinos sobre terciopelo, un material que solo ofrece la máxima oscuridad pintando en una dirección concreta de sus fibras.
«El pescado azul es muy entretenido pictóricamente». Considera Diezma, mientras invita a tocar la textura suave de sus cuadros, que el este elemento no ha tenido nunca en la historia un lugar destacado: «Ningún pintor se ha dedicado al bodegón marinero en concreto». Pero sí lo hizo una mujer. La familia Recco, napolitana, contó con pintores en varias de sus generaciones. El abuelo pintaba muy oscuro. Su hijo hizo algún esbozo de bodegón marinero allá por el siglo XVII y en el XVIII, con la tercera generación Elena Recco profundizó en este campo. Hay, de hecho, un cuadro suyo «colgado muy alto» -'Bodegón de flores, aves y vaso de cristal'--, en el Museo del Prado. Ella «se inventó los colores, creando una fantasía». Tanto le gustó a Diezma esa referencia, que el cuadro principal que se puede ver en Artesantander es, precisamente 'Variación sobre un cuadro de Elena Recco'. Círculo cerrado sobre terciopelo.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión