Viaje crepuscular
Filmoteca UC. Sala de Náutica. Jueves. ·
Hay rabia y tristeza, redención y crudeza. Un filme de excelente ambientación que anticipa al cineasta heterodoxo, que luego será cada vez más salvajemente suyoRezuma lírica y atmósfera crepuscular. La presencia de dos actores como Joel McCrea y Randolph Scott enciende ese aroma nostálgico pero en el sentido más ... noble y menos manipulado del término. Afloran esos guiños clásicos, su apelación al sentido del deber, a la lealtad, a la amistad, entre toques épicos y un rastro de decadencia memorable. Es western crepuscular sí, casi inaugural, de una tendencia que se repetiría después con más o menos acierto por el propio cineasta y por otros coetáneos, pero también desprende un clima y un relato compartido entre lo tradicional y lo elegante, entre la mirada histórica y la banda sonora de George Bassman.
-
Año 1962
-
País Estados Unidos
-
Dirección Sam Peckinpah
-
Guion N.B. Stone Jr
-
Reparto Randolph Scott, Joel McCrea, Mariette Hartley, Ron Starr
-
Género Western
'Duelo en Alta Sierra' es uno de los primeros Sam Peckinpah, pero sobre todo el que abre el camino del éxito, el que revela su personalidad visual y su claridad y coherencia. El cineasta zarandea un tiempo mítico, desnuda las entrañas del Viejo Oeste y juega entre polos opuestos como la amistad y la traición, la emotividad y el viaje nostálgico. Por si fuera poco, el azar, la cerrazón y ceguera de los productores acabaron por facilitar la libertad de montaje del director de 'Grupo salvaje', que aprovechó al máximo la inesperada oportunidad. Detalles y diálogos, personajes con presencia, perfiles con personalidad, roles intercambiados se conjugan fruto de una construcción natural.
Scott, actor fetiche de Budd Boetticher, y Joel McCrea, que asomó por las ventanas más clásicas, desde Wellman a Sturges, son dos cómplices en esta obra mayor que desconcertó, fracaso en su punto de partida y fue con el tiempo reclamada como uno de los western más singulares de la historia. Ahí está como declaración de principios valiente, rupturista y provocadora su primera escena del héroe a caballo y la extrañeza de una sorprendente carrera de dromedarios. La civilización cierra el paso de pistoleros y bandidos pero también en 'Ride the High Country' se anuncia la clausura de una idea de libertad. La mezcla de desencanto y de melancolía empapa el aire trágico de viejos héroes en retirada que poseía la pareja protagonista. Hay rabia y tristeza, esa violencia masticada, redención y crudeza. Un filme de excelente ambientación que anticipa al cineasta heterodoxo, que luego sería cada vez más salvajemente suyo. Entre el caos y el exceso. Un loco cowboy autor de un cine que va mucho más lejos de la etiqueta de violencia como demostraron otros fogonazos crepusculares, caso de 'La balada de Cable Hogue' y 'Junior Bonner'.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión