Aitor Buñuel: «Había que acabar esa jugada y entró»

Aitor Buñuel lo tenía claro. Tras el pitido final, el lateral navarro sentía «una felicidad absoluta». En esos momentos Buñuel se acordaba «sobre todo de mi familia que no ha podido estar aquí, pero seguro que lo estuvieron viendo desde la tele». Al defensa le faltaban palabras para definir lo que estaba viviendo: «Esto es un auténtico espectáculo. Ahora solo queda disfrutarlo por parte de todos: el Racing, nosotros, todo Santander y toda Cantabria».

El goleador explicó que vio el balón y «había que acabar esa jugada así que fui con toda la fe del mundo y gracias a Dios entró». Lo importante no fue la autora «a veces mete gol el que menos se lo espera la gente, pero daba igual quien lo metiera, lo importante era marcar».