El Racing no descarta la salida de Balboa

Dos de los que le han dicho que no a la comisión deportiva verdiblanca son los delanteros Jordi Sánchez y Mario Barco. Ahora bien, en el club son tan conscientes de que en estos diez días hay que acertar que amplían la lista de posibles bajas en función de los futbolistas que puedan llegar. Por el momento le han abierto las puertas a Joan Maynau y a Ismael Benktib y no tienen nada segura su continuidad Adrián Balboa y Pablo Andrade. En un capítulo aparte se encuentra Jordi Figueras, cuyo rendimiento está siendo inferior a lo esperado, pero al que su alta ficha impide buscarle un acomodo o liquidarle de un modo sencillo. La otra de las vías para sacar a jugadores que puedan dejar sitio a los refuerzos son las cesiones si bien en su día el presidente, Alfredo Pérez, así como el director deportivo, José María Amorrortu, aseguraron que «no saldrá bajo ningún concepto ningún canterano».

Así las cosas a Maynau y Benktib, con quien el club espera llegar a un acuerdo se suma ahora Adrián Balboa que no ha cumplido con las expectativas. La continuidad del uruguayo está más que en el aire. Su rendimiento no satisface a los responsables, que optaron por el mercado sudamericano al ver que no eran capaces de encontrar lo que buscaban en España. La dilatada experiencia internacional del charrúa invitó a la apuesta de firmarle como complemento en la delantera a la espera e un '9' de referencia. En el ecuador de la Liga, Balboa suma un gol y apenas una actuación destacada. Como todos los casos, no será sencillo rescindir el contrato que les une, pero en cualquier caso, en el Racing no lo descartan.

El club no cierra ninguna de las posibilidades y está dispuesto a negociar su salida en cualquiera de las modalidades que sea. El entrenador ya ha dejado claro que no cuenta ni con Benktib ni con Maynau, y los ha dejado fuera de las convocatorias, en el caso de Maynau aún a riesgo de no disponer de un futbolista específico en su posición (lateral izquierdo ). En cualquier caso no será fácil, dado que apenas han participado y ambos empalman un largo periodo de inactividad amplio.

Por otro lado, la situación de Jordi Figueras no es menos complicada. Su larga trayectoria y dilatada experiencia, unida a la 'generosidad' de Chuti Molina -hace dos años- propiciaron que el Racing le pusiera encima de la mesa un contrato largo y con una ficha alta. El ascenso a Segunda facilitó que la relación del catalán con el club pudiera mantenerse, pero el regreso a la Segunda B y el recorte presupuestario impuesto por los dueños hacen que ahora se reabra el caso. El rendimiento de zaguero no está siendo acorde al coste que le supone al Racing, pero el futbolista tiene firmadas unas condiciones que el club ha de cumplir. En esta encrucijada se ven envueltos los responsables que estarían dispuestos a abrirle la puerta al veterano zaguero, pero no existen muchos pretendientes que lo puedan recibir.

En la comisión deportiva han cambiado el paso; así como en otra ocasiones es la primera maniobra es dar salidas para poder hacer sitio a los que vengan, en esta ocasión han optado por todo lo contrario. Se ha testado todo el mercado nacional, después de hablar con prácticamente la mayoría de los directores deportivos de los equipos de Segunda y muchos de la Segunda B en busca de los perfiles que necesitan. Existen en la actualidad varios frentes abiertos y la estrategia es cerrar la llegada y automáticamente hacerle hueco. Son tan conscientes de que la plantilla necesita reforzarse que cuentan con perder en las bajas si con ello se consigue mejorar el equipo.

En este sentido, las cesiones de alguno de los canteranos no están descartadan. En las prioridades está la de un delantero, un pivote creativo y un hombre de banda. Así las cosas, si llegase un jugador de garantías para jugar por fuera, junto con Álvaro Bustos y Patrick Soko -del que esperan una notable mejoría- podría posibilitar la salida de Marco Camus, al que las lesiones y la falta de continuidad le han cortado la proyección. No es una prioridad, ni mucho menos, pero en estos diez días el futuro de la plantilla está en el aire.

«Cuatro o cinco fichajes que mejoren lo que tenemos». Con estas palabras, Alfredo Pérez adelantaba que en invierno el club iba a dar un paso adelante. «Ese paso lo daremos nosotros», remarcó en una clara alusión a que no hay nadie que les ayude en tal menester. Y en esas está la comisión deportiva. Dos de los acercamientos que ha iniciado han acabado en agua: Jordi Sánchez y Mario Barco. El primero de ellos, el delantero del Castellón, le ha dicho al Racing que 'no quiere jugar en Segunda B'. Su club desea sacarle, pero él, con amplia experiencia en la categoría, quiere seguir en Segunda o marcharse al extranjero. En otras palabras, la oferta económica del Racing es muy inferior a la que opta quedándose en el Castellón o firmando por un equipo de fuera de España. El otro atacante, Mario Barco, también le ha dicho que no. El '9' del Mirandés, pese a que apenas ha entrado en los planes del técnico del conjunto burgalés confía en ganarse la confianza en la segunda vuelta y ha declinado por segunda vez -ya estuvo en la órbita del Racing con Molina como director deportivo- la propuesta racinguista. Todo abierto hasta el 31 enero.