Esperanza frente a tanto problema

«El lunes se suspendió el entrenamiento por mal tiempo. Y 'encendí' la mecha con uno de los jugadores, para ver si hacíamos algo en casa. Hicieron un entrenamiento de más de una hora, a través de zoom. Para mí, esa actitud vale más que un entrenamiento en un día de lluvia». Tristán 'Chucho' Mozimán, el entrenador del Independiente, no está aún preocupado por la situación en la Liga. «Si nos llegan a tocar otros equipos al inicio, estaríamos primeros o segundos. ¿Eso sería real o engañoso?».

Con una Liga que se partirá en dos grupos al final de la primera vuelta, y en la que en esa segunda fase no contarán los resultados con los equipos que no estén en su grupo, los verdes deberán concentrarse en 'su' Liga. «Cisneros, Getxo, Ciencias y Les Abelles», si , como todo apunta, los santanderinos están entre el sexto y el duodécimo puesto. Queda por aguantar el presumible chaparrón de este fin de semana ante el Quesos.

Tras las cuatro derrotas consecutivas, lo que se ha querido mantener es la «capacidad de trabajo» de los jugadores y la confianza «en el nuevo staff técnico -Mariano García, Leo Bulacio y Emi Quevedo-» para cuando llegue nuestro momento», señala el 'Chucho'. El día 20, la visita al Cisneros empezará a dar la medida de si los problemas tienen solución o la cosa pinta aún peor de lo que ya lo hace.

Aún sin patrocinador principal, esos 280.000 euros del Independiente palidecen ante los 600.000 que ronda Les Abelles, el recién ascendido y que ocupa la plaza del Bathco.

Ordizia, Alcobendas, Burgos, Santboiana y este domingo, el Quesos. Cinco partidos más que duros. La llegada de encuentros ante rivales más asequibles dará la medida del equipo.

Por ahorro de costes –billetes de avión– y por la pandemia, no se ha podido fichar en el tradicional 'caladero' argentino que se conoce bien. De lo que ha venido, la mayoría estaba en España.

46 puntos a favor, con seis ensayos. El peor ataque de la Liga. Falta más continuidad en los puestos de medio melé y apertura, la zona de creación de juego.

Lo que más preocupa en los verdes. Los 185 puntos encajados –el que más– son una losa difícil de soportar para un equipo que siempre ha hecho de la defensa su gran bandera.

Aunque aún es posible, lo mejor es olvidarse de playoffs por el título y centrarse en los partidos ante Cisneros, Getxo, Ciencias y Les Abelles. De ellos dependerá el futuro en la Liga de los verdes.