MIES, el proyecto cántabro para anticipar posibles problemas físicos en mayores
Los investigadores del consorcio formado por Ambar, el Idival y la UC aseguran que es «un hito significativo para realizar evaluaciones geriátricas»
H. R.
Santander
Viernes, 19 de septiembre 2025, 07:25
Una herramienta preventiva para anticipar posibles problemas físicos entre las personas mayores. Es lo que persigue el Proyecto MIES (un consorcio liderado por la cántabra Ambar Telecomunicaciones y al que también pertenecen el Instituto de Investigación Sanitaria Marqués de Valdecilla (Idival) y la Universidad de Cantabria). Los investigadores de la iniciativa han presentado una solución tecnológica de evaluación funcional sin contacto, destinada a mejorar el diagnóstico y seguimiento del estado físico en personas mayores. Lo han dado a conocer como «un hito significativo para realizar evaluaciones geriátricas más objetivas, facilitar la detección precoz de la fragilidad y anticipar el riesgo de caídas».
El funcionamiento del nuevo sistema de estimulación y evaluación física se basa en una cámara de tiempo de vuelo (ToF), equipada con sensores de profundidad y un avanzado sistema de captura de movimiento sin necesidad de marcadores corporales. Esto permite evaluar a los pacientes sin contacto físico ni equipamiento clínico especializado, lo que facilita su integración en entornos como residencias, centros de día e incluso hogares particulares.
Bajo la batuta de Ana Sobrino Santos, ingeniera biomédica del Idival, se ha realizado un estudio piloto a personas mayores y un grupo control de adultos jóvenes para testear la fiabilidad de la herramienta. A través de pruebas físicas sencillas como sentadillas, estancias de pie en distintas posturas o ejercicios de equilibrio, el sistema recoge diferentes métricas biomecánicas. Desde el desplazamiento del centro de masa y el área de oscilación postural, hasta la flexión de rodillas o la alineación de la columna.
Estos datos permiten obtener una imagen precisa de la capacidad física del paciente, un aspecto fundamental para detectar precozmente signos de fragilidad o deterioro funcional. Los datos obtenidos muestran diferencias significativas entre ambos grupos en cuanto a amplitud de movimiento y estabilidad. Además, el sistema permite el seguimiento longitudinal del estado funcional, detectando incluso alteraciones sutiles relacionadas con caídas recientes.