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El ejército de México ha abatido a seis presuntos criminales en el oeste del país en medio de una cruenta disputa de cárteles del narcotráfico. ... Estas bandas han protagonizado una ola de violencia en 30 municipios de los Estados de Michoacán, Guajanato y Jalisco, atemorizando a la población. Un episodio que arrancó la mañana del miércoles y se ha saldado con dos policías muertos, incendios que han chamuscado medio centenar de vehículos, tres ataques a tiendas, bloqueos de carreteras y agresiones a autoridades.
Estos hechos se han registrado en un zona donde actúa el Cartel Jalisco Nueva Generación, uno de los más poderosos del país y que mantiene un duro enfrentamiento con organizaciones locales por el control del territorio. Los medios locales apuntan a que los rivales de la organización sería la Nueva Familia Michoacana. Según fuentes policiales citadas por el medio DW, los ataques serían la reaacción de la banda a un operativo militar en la región.
La violencia se desató poco después del mediodía del miércoles, cuando hombres armados se apoderaron de camiones de carga y les prendieron fuego en una peaje de la autopista que conecta a Ciudad de México con Guadalajara, una de las más vías más transitadas del país.
#ULTIMAHORA | Michoacán vivió horas de tensión. El saldo: 43 vehículos calcinados y 2 tiendas OXXO incendiadas.
— Quadratín Michoacán (@Quadratin_) April 24, 2025
Leer más: https://t.co/MkhEFq3Uvx pic.twitter.com/pmrudV0cRN
Tras ese conato las autoridades informaron de una escalada de los bloqueos en carreteras en municipios de Michoacán, Guajanato y Jalisco y hombres armados protagonizaron un tiroteo con la Policía.
Como respuesta a estos sucesos violentos, el ejército mexicano «repelió las agresiones de grupos delictivos» en los municipios de Tarímbaro y Apatzingán, según ha informado la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC). Además de los seis presuntos sicarrios que perdieron la vida, otro más resultó herido. En la operación policial se requisaron siete armas largas, equipos tácticos, munición y un vehículo.
El Gabinete de Seguridad ha explicado en un comunicado que la muerte de los supuestos delincuentes se produjo tras una acometida contra los soldados y la Guardia Nacional que se encontraban realizando «acciones de manera coordinada para restablecer el Estado de derecho en la región». Objetivo que han conseguido, asegurando unas calles que han recuperado la normalidad. Para ello han tenido que retirar artefactos explosivos e incluso destruir minas.
Estos brotes de violencia son ya casi rutina en el oeste de México como producto de las guerras enntre cárteles del narcotráfico. Los choques del crimen organizado en esta zona han puesto a Guanajuato, Jalisco y Michoacán entre las seis provincias con más homicidios a nivel nacional, según los datos del Gobierno azteca.
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