Los niños imparte una lección de fantasía en Santander

Createctura, un proyecto cántabro de innovación pedagógica a través del desarrollo creativo, el diseño de espacios y el arte, diseñó expresamente para la Muestra –que este año celebra la décima edición– la propuesta 'Esferas', un espacio de juegos «y de experimentacion», a los pies del Centro Botín. «Lo que queremos es que los niños puedan invadir el espacio público de una forma diferente, con una serie de actividades más imaginativas de lo que a lo mejor estamos acostumbrados y que les permita crear», tal y como explicó a este periódico Irene Fernández, directora del proyecto.

Para ello, el parque se llenó de distintas instalaciones repletas de pelotas rojas de todos los tamaños y distintos elementos como tijeras, pinzas de la ropa, trozos de fieltro, piezas de madera y alargados globos que rápidamente se conviertieron en improvisadas espadas o bates con los que lanzar esas esferas por los aires. Y es que los niños no dudaron en hacer suyo espacio, compartir juegos y perder vergüenza a la hora de construir sus propios pasatiempos. Mientras, en el templete de los músicos, una especie de tela de araña gigante hecha con cuerdas se convirtió en entretenimiento para los pequeños que disfrutaron, hasta que empezó a llover, con tan original propuesta.

'Esferas' tal y como lo explican desde Createctura es un experimento lúdico con la emoción de la sorpresa como punto de partida, «un 'happening' urbano que pretende provocar la participación de todos los asistentes». Y es que, aunque los niños se adueñaron de la zona, en Createctura consideran que el juego no está limitado a la infancia. «Los niños rápidamente entienden la propuesta y se meten en ella enseguida, pero los adultos nos hemos olvidado un poco de como jugar. Tenemos que recuperar a ese niño que tenemos dentro y tener hijos es, precisamente, una oportunidad magnífica para ello», señaló Irene Fernández.

El proyecto, tal y como explicó, apuesta también porque niños y mayores jueguen y se diviertan juntos. «Desde Createctura y también desde la organización del MAF se tiene muy en cuenta ofrecer cosas que puedan gustar tanto al público adulto como al público infantil y, sobre todo, que las puedan compartir».

Así lo hicieron por la mañana los asistentes al espectáculo 'The Trap' de la compañía Nakupelle (EE UU-Finlandia) en el El Centro Cultural Quijano del Ayuntamiento de Piélagos que, por tercer año, se convierte también en sede de las actividades del MAF. El espectáculo, que también se podrá ver hoy en la Plaza Atarazanas, se compone de «sublimes payasadas». Una batalla entre tecnología y naturaleza «teniendo en medio a un deasafortunado idiota al más puro estilo de Chaplin o Buster Keaton».

La primera jornada de la Muestra, que reserva para hoy su día grande con el mayor número de actividades de calle, se completó con la primera de las dos funciones que va a ofrecer en Santander, Compagnie Rasposo. Un espectáculo titulado 'La DéVOrée', con una puesta en escena teatral con acrobacia aérea y música en directo que también podrá verse esta noche, en la Campa de La Magdalena, a las 22.00 horas.

Como viene siendo tradicional la Muestra de Artes Fantásticas compagina las actividades de calle con una exposición. El escenario, en esta décima edición, es la Escuela de Náutica de la UC que desde ayer y hasta el próximo día 30 acoge la muestra 'El desván de las ilusiones mágicas'. Allí habitan los títeres creados por Francisco García del Águila, un madrileño que tras trabajar como ilustrador y realizar varias exposiciones en Madrid y París, vivió en Nueva York y San Diego donde inició su preparación como diseñador, constructor y manipulador de títeres en 1990. En 1994 y ya de vuelta en España creó la compañía de títeres Magerit que ha participado en espectáculos de forma individual y con otras compañías hasta 2007. Paralamente empezó a colaborar en Producciones Cachivache.

Entre antiguos baúles y maletas de principios del siglo pasado, entre los que sobresalen ropas, instrumentos y juguetes de época, la propuesta reúne a títeres de todo tipo para recordar viejos tiempos y seguir actuando tal y como se puede comprobar en un monitor ubicado en este 'desván'.

La exposición permite ver tres tipos diferentes de títeres: Títere de dedo, títere de guante, títere del estilo Muppet, y el último de estilo propio. Y todo ello en una atmósfera en la que la melancolía traslada al visitante hasta siglos pasados.

Permanecerá abierta de lunes a viernes de 18.00 a 21.00 horas y el sábado y domingo de 12.00 a 15.00 y de 17.00 a 21.00 horas. El precio de la entrada es de un euro. Este trabajo recibió la Mención Especial del Jurado en la Feria Europea de Artes Escénicas para Niñas y Niños en 2009.