Los investigadores desmontan la versión de los acusados de prostitución: «Salta a la vista la discapacidad intelectual de la mujer»

En la segunda sesión del juicio han comparecido todos los agentes que intervinieron en la investigación y algún testigo más, con lo que mañana, jueves, se practicarán las periciales y las conclusiones e informes finales. Una policía local de Torrelavega ha relatado que el 21 de septiembre de 2021 recibió un aviso de la Guardia Civil alertando de que la denunciante se encontraba en una calle de Reinosa, portando un cuchillo. «Cuando la encontramos miraba hacia todos los lados como si la persiguieran». Pese a que no comprendía el castellano, la mujer, que estaba indocumentada, afirmó en ese momento que «quería ir con su madre» y «no» con el principal acusado y presunto novio. «Nos entregó el cuchillo».

La guardia civil que acompañó a la mujer «en todo momento» ha definido a la denunciante como una persona «muy infantil, con cambios de carácter que no eran normales». «Se tiraba al suelo, tenía rabietas y no sabía leer ni escribir». En su declaración, la presunta víctima aseguró que era la novia del principal acusado, «que la prostituía en su casa» y que «bajo la promesa de vivir mejor y tener más dinero la convenció para venir a España». Esta agente ha relatado, además, como la mujer afirmaba que, una vez en España, el principal acusado «la instó a robar, a lo que se negó, y después a prostituirse». «Uno de los acusados la decía que le hiciera una felación mientras otro de los implicados la penetraba por detrás», aseguró, la agente, que cree que «a esta muchacha la han debido de prostituir en su país de pequeña». «La mujer también hizo referencia a que la habían violado en una tienda de campaña dos hombres».

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Junto al relato de la denunciante, la Fiscalía sustenta su acusación en el contenido de los mensajes de varios perfiles de Facebook y de los móviles del principal acusado. Allí, los investigadores hallaron «conversaciones con señores de contenido sexual, en las que pedían dinero a cambio de mantener relaciones sexuales», según ha señalado la agente que analizó toda la información de los dispositivos. Entre esos mensajes, los investigadores encontraron un SMS en el que se «planteaban relaciones sexuales a cambio de 100 euros».

La sesión de este miércoles ha acabado con la declaración de la amiga de uno de los acusados, que define a la denunciante como «una persona muy peligrosa e incontrolable» y al acusado como «un hombre de honor y de principios, incapaz de faltar el respeto a una mujer». «¿Vulnerable? Todas las mujeres los somos», ha respondido a preguntar de la fiscal.