«Debemos aprender del pasado para no cometer los mismos errores»
El autor de 'El poderde tu alma', en el que explica las claves para la transformación personal, se sumerge ahora en la narrativa con una historia enmarcada enla Guerra Civilespañola
Hace un tiempo, el Ayuntamiento de Selaya fue el escenario de un evento cultural cargado de memoria y emoción: la presentación del libro 'La guerra ... acabó en el valle pasiego', del escritor cántabro Pedro Cobo. Una novela basada en hechos reales que rescata del olvido la historia de los abuelos del autor y de un miliciano asturiano, cuyas vidas se cruzaron en medio del horror y la incertidumbre de la Guerra Civil española. Cobo, que forma parte de la Sociedad Cántabra de Escritores, estuvo acompañado en la presentación de su obra por la escritora cántabra Regina Carral y el cantautor Manuel Iberia. Hablamos con el autor para conocer más sobre esta novela profundamente humana, escrita desde la memoria, la empatía y el deseo de reconciliación.
–¿Cómo nació la idea de escribir 'La guerra acabó en el valle pasiego'?
–La idea surgió de manera casi inevitable. Durante años escuché anécdotas acerca de la historia de mis abuelos que necesitaban ser contadas. Al investigar, descubrí la figura de un miliciano asturiano que estuvo vinculado a sus vidas, y supe que ahí había una historia que merecía ser narrada con respeto y verdad.
–¿Qué encontrará el lector en estas páginas?
–No es una novela de buenos y malos, ni una crónica política. Es una mirada íntima al conflicto desde el corazón de tres personajes que tuvieron comportamientos diferentes ante situaciones trágicas. El lector encontrará sufrimiento, sí, pero también esperanza, dignidad y comprensión de la naturaleza humana.
–¿Por qué ambientarla precisamente en los valles pasiegos?
–Porque los hechos principales se desencadenaron en esta zona. Nuestros padres y abuelos fueron testigos de la guerra, y quería transmitirlo de una forma más cercana, diferente de como lo leeríamos en los libros de historia. El conflicto partió familias y dejó heridas en las personas que lo vivieron. Esta es una forma de homenajear a mis antepasados.
«Durante años escuché anécdotas acerca de la historia de mis abuelos que necesitaban ser contadas»
–¿Cuál ha sido el mayor reto al escribir esta historia?
–El mayor reto fue el respeto. Trabajar con historias reales implica una responsabilidad inmensa. No quería caer en el morbo ni en el juicio fácil. Quería contar sin herir, mostrar sin manipular. Por eso el tono es sobrio, el lenguaje sencillo, y hay ilustraciones que acompañan la historia sin invadirla. Mi intención fue siempre dar voz a nuestros antepasados.
–¿Qué espera que se lleve el lector tras cerrar el libro?
–Ojalá leerlo le lleve a hacer una reflexión serena. Que entienda que la guerra no solo se libra en los frentes, sino también en los hogares, en el alma de quienes sobreviven. Y que seamos capaces de aprender de las experiencias del pasado para no cometer los mismos errores en el futuro.
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